11 ago 2014

Las “mutuales” son hoy monstruos del lucro

Las chilenas y chilenos somos víctimas del abuso y violación de la ley vigente que realizan las mutuales de empleadores.El primer abuso dice relación con las derivaciones ilegales que hacen estas instituciones al sistema de salud público.

En enero de 2013 las mutuales debieron devolver a la isapre MasVida casi dos mil millones de pesos, por concepto de licencias médicas que esta Isapre había asumido en prestaciones, que en realidad correspondían a accidentes del trabajo que habían sufrido trabajadores beneficiarios de la Ley 16.744 -que establece el Seguro Social Obligatorio contra Accidentes del Trabajo y Enfermedades Profesionales- cuyos costos tenían que haber sido sufragados por las mutuales.

Este fenómeno tiene su raíz en incentivos perversos: si un accidente no es calificado como laboral o no es denunciado como tal, disminuye la tasa de accidentabilidad de la empresa.

El poseer bajas tasas de accidentabilidad permite que la prima que cobra la mutual al empleador, para efectos del seguro laboral, mantenga su valor (lo que hace ahorrar al empleador). Además permite a las mutuales pavonearse con sus falsos buenos resultados.Pero lo más importante para estas, es que si un accidente no califica como tal, estas se eximen de tener que asumir el costo de los tratamientos médicos que por ley tendrían que cubrir. Por eso muchos de los accidentes y enfermedades laborales no las aceptan como tales.

Esta irregular actuar se ha visto favorecida por el poco profesionalismo y la actitud cómplice con que ha actuado la Superintendencia de Seguridad Social (SUSESO). Según cifras oficiales, siete de cada diez apelaciones a la calificación de un accidente del trabajo o enfermedad profesional que recibe la entidad, son rechazadas. Las personas rechazadas son derivadas a la atención pública, lo que tiene como consecuencia que Fonasa deba asumir los costos de prestaciones que debió haber asumido la mutual, saturando el sistema.

Hay que señalar que muchos de los rechazos –algunos de los cuales hemos denunciado- son injustos y descriteriados. Es el caso de Iris Sepúlveda quien trabaja hace 40 años como secretaria del Servicio de Salud de Concepción, debiendo ejercer a diario movimientos repetitivos y de digitación que le provocaron una severa tendinitis.Sin embargo, tanto la SUSESO como su mutual rechazaron la calificación de su tendinitis como enfermedad profesional, debiendo endeudarse para costear su afección. La diferencia la pagó FONASA.

Idea desvirtuada

Las actuales mutuales han convertido la seguridad social, un derecho humano, en un negocio altamente lucrativo. Pero esto no siempre fue así. Hay que tener presente que estas entidades fueron creadas –en la segunda parte del siglo XIX- por los mismos trabajadores para resguardarse en caso de accidentes laborales o enfermedades. Las mutuales surgen como respuesta a la ausencia de una política estatal que garantizara derechos básicos como el acceso a la salud, pensiones y vivienda.

Pronto estas instituciones se expanden por todo el país y amplían su campo de acción.“En torno a las mutuales surgen bibliotecas, grupos de música y teatro, escuelas de oficios, grupos de rehabilitación alcohólica. Eran instituciones formadoras y moralizadoras”, como se señala en el artículo El mutualismo. Pasado y presente, publicado en la revista penquista Resumen, el 12 de octubre de 2010.

Tras el derrocamiento del presidente José Manuel Balmaceda (1891) el mutualismo vivió su periodo de esplendor constituyéndose en la orgánica más fuerte del movimiento social.Entonces bregan por la jornada de ocho horas y por poner coto al pago de salario con fichas, entre otras demandas.

En 1924, con la puesta en marcha del seguro de enfermedad e invalidez en el trabajo, el Estado chileno comenzó a asumir su responsabilidad en materia de derechos sociales. Con esto comienza la decadencia del mutualismo y el auge del sindicalismo.

En 1968 el Gobierno de Eduardo Frei Montalva quiso darle nuevamente una responsabilidad importante a las mutuales. Así nace la citada ley 16.744, pero Frei Montalva, ni en la peor de sus pesadillas, imaginó que estas instituciones se convertirían en verdaderos monstruos del lucro y del abuso a los trabajadores.Ésta normativa, en su artículo 12 letra “B”, señala que las mutuales deben disponer de servicios médicos adecuados propios. Y en su letra “d” afirma que estas entidades no deben ser administradas directa ni indirectamente por instituciones con fines de lucro.

Según se reseñó en el reportaje de Ciper El imperio de negocios que la ACHS creó con las cotizaciones de los trabajadores (24/06/2011) la ACHS controla el 53% del mercado y recibe ingresos anuales por más de US$ 400 millones. El gran anillo de poder que tienen las mutuales se origina en el hecho que la ley les asegura a estas la administración del seguro obligatorio contra accidentes y enfermedades laborales.Solo este ítem le reportó a la ACHS -en la primera década de este siglo- ingresos superiores a los US$ 3.000 millones.

La ACHS tiene plena participación en una serie de sociedades anónimas, que actúan como sociedades espejo, al igual que lo hacen las universidades privadas. Entre estas podemos encontrar el Laboratorio Bionet con un 33.33%, Sorema S.A con 75%, Sorema del sur S.A con un 30%, Sorema del norte S.A con un 30% Imágenes 2001 S.A con el 34%, SMI Concepción S.A con el 20%, SRM Concepcion S.A con el 10.64%, SMMN Concepción S.A con un 20%, SMI S.A con un 22.2%, SMI Temuco S.A 49.14%, Esachs 99%, CEM HTS 99.99%, entre tantas otras.

Según Ciper “como la ACHS es una corporación sin fines de lucro, no puede repartir sus excedentes y está obligada reinvertirlos en sí misma. Para evitar esto, la mutual creó una complicada estructura de negocios que se extiende por todo el país (…) al menos 103 sociedades anónimas y una fundación donde la ACHS tiene alguna participación (…)Algunas son asociaciones comerciales; otras sólo son sociedades de fachada que persiguen beneficios tributarios, a través de las cuales la ACHS, exenta de pagar IVA y gravámenes aduaneros, recupera el IVA que de forma directa no podría”.

De acuerdo a esta investigación: “la estructura de inversiones es controlada por los propios ejecutivos de la mutual, los que ocupan cargos gerenciales y directivos en las empresas relacionadas. A través de ellas externalizó servicios propios que las mutuales entregan por ley y entró a competir en el mercado de la salud privada.También les transfiere equipos y capital. La relación es simple: mientras menos accidentes laborales hay en el país, más invierte la ACHS en infraestructura médica y empresas clínicas que venden servicios a particulares. Un millonario negocio que ha sido subsidiado con lo que los empresarios pagan para proteger a sus trabajadores”.

En 2005 el sindicato de la ACHS (SNTACHS), realizó una presentación a la SUSESO, dirigida en ese entonces por Javier Fuenzalida Santander en que le solicitó que se fiscalice la creación de la ESACHS, empresa que según los denunciantes estaría “desnaturalizando” la ley 16.744. Sin embargo, la SUSESO resolvió a favor de la creación de la empresa pese a que actuaría como sociedad espejo. Lo particular de esto, es que Fuenzalida Santander, una vez concluida su función en la SUSESO, pasó a ser gerente general de la ESACHS.

Lo que sucede con las mutuales devela la profunda crisis del sistema de seguridad social en Chile. Es imprescindible hacer una reforma estructural a este sistema.

Sin embargo, el proyecto de ley que hoy se tramita con urgencia en el Senado no aborda los problemas aquí señalados. Por lo mismo, es indispensable retirar este proyecto e ingresar uno que contemple una modificación estructural a las problemáticas que hemos descrito.

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11 ago 2014

Mártires reales y de cartón piedra

En sueños, he transitado por galerías de retratos familiares y extraños, cuadros que, una vez vivenciados (porque el arte no genera objetos sino experiencias) proporcionan el vislumbre, perturbadoramente real, de la condición humana.

En la vigilia, elijo tres retratos que he visto en esas galerías caóticamente intercambiables llamadas los medios de comunicación, tres instantáneas que se retienen en la memoria pese al intento enconado de los grandes conglomerados de la (des)información para que se sumerjan en las aguas del olvido lo antes posible.

Son retratos de mártires. Figuras que trascienden la vanidad del minuto, encarnando un ideal y pereciendo gloriosamente por el. Dos son dolorosamente patéticos (no uso la palabra peyorativamente, sino en su real contexto), el otro, una ridícula caricatura que se chinga (uso la palabra peyorativamente y en su real contexto) en su intento siquiera de parecerlo.

La primera imagen es una anciana sentada junto a una columna, apoyada en unas muletas y sacudiendo un tazón de lata con algunas monedas en su interior. La gente pasa a su alrededor sin prestarle atención. La cámara se centra en su rostro que delata la enfermedad y el dolor. Alguien la reconoce, de pronto. Esa mujer fue su profesora de infancia. De él y de muchos otros. Su pensión misérrima y sus muchas enfermedades habían guiado a esta maestra de generaciones a la dramática decisión de mendigar en la calle.

Vivo, terrible emblema de la ingratitud y desprecio del que este país ganador y de mañas de mocoso hace gala para con sus maestros. Oriente tributa honor al maestro errante y mendicante y las multitudes agradecidas los reverencian y alimentan porque los saben su reserva cognitiva y moral. Doña Alicia Morales, en cambio, dio lo mejor de sí misma para formar generaciones y fue arrastrada a la vergüenza por un sistema criminal y embustero al que le confió su merecido descanso.

Martingala diseñada y avalada por una dictadura sangrienta, lavados sus activos por tecnócratas de escasa moralidad que hoy se pavonean por el mundo entero voceando su logro digno de genocidas en cámara lenta.

Día a día el sistema de las AFP, a elevados costos financiados, (adivina por quién), vocea sus falsos logros. Ellos me explicaron y yo entendí que mi destino, como docente, es idéntico al de Doña Alicia.Ella es la mártir invisible de la crisis de una educación y de una pensión convertida en bienes de consumo por estos halcones regordetes.

Dios se lo pague, dirán estos santones del crimen organizado y validado por la ley del país de los vacíos legales. Ellos bailan la danza exclusiva de los millones, las monedas que sobran caen a su pequeño recipiente de latón.

La segunda es la imagen del luto por la masacre de niños en una escuela de la ONU en la Franja de Gaza, si bien bajo periódicos ataques por parte de Israel, hoy víctimas de una abierta batalla de aniquilamiento.

En un ghetto de extensión semejante a la comuna de Providencia, millones de palestinos están acorralados y completamente indefensos por el odio revestido de religión.

Sufrimos desde nuestra cómoda lejanía sudamericana por los cientos de niños asesinados, mutilados, aniquilada su tierna inocencia, y condenamos la cobardía de quienes propalan esta violencia en nombre de su dios, ya sea Allah o Adonai, que brilla por su ausencia, hay que decirlo.

Teniendo queridos ex alumnos y amigos, descendientes de ambas etnias y culturas mortalmente enfrentadas en una ruleta sin destino, me es difícil tomar la fácil posición del descalificador gratuito de uno u otro bando.

Sin embargo, los petardos hechizos de cinco o seis pirómanos no te autorizan a arrojar contra un pueblo acorralado lo más selecto del moderno arsenal de guerra del siglo XXI. Conoces muy de cerca esa práctica, solo pregúntales a tus abuelos por sus aterradoras consecuencias y detén esto.

Mártir no eres tú tampoco, con tu guerra de delirio santo y tus cohetes atados a la cintura, los mártires auténticos de la ceguera y de la religión son los niños, que son hijos, sobrinos, nietos, pequeños amigos y vecinos y son el futuro de toda cultura y religión.

La tercera, festiva, es la de un tipo joven regresando de un país del que debió salir tras una detención por parte del gobierno de esa nación. Militante de un partido ultramontano devenido en defensor de una clase a la que nunca ha pertenecido, realizó un viaje de relaciones públicas que concluyó con él, encarcelado por el gobierno venezolano.

Aparentemente habría fotografiado edificios gubernamentales, lo que en cualquier parte del mundo puede acusarte al instante de espionaje y bueno, caer en la capacha.

Sin embargo, intervenciones express del gobierno de Bachelet, mediante, fue liberado tras varias horas y autorizado para dejar el país sin ningún problema. No recibió torturas ni apremios ilegítimos. No fue deportado, lo que sí habría evidenciado una supuesta detención política arbitraria. Desde un principio se supo su paradero. Nada se le incautó. Él mismo afirmó haber abandonado el país por voluntad propia.

El discurso de sus dirigentes, tras su mediático arribo a nuestro país, trató de vender el hecho como el regreso de un mártir político, con una pompa más triste que retreta de pueblo abandonado.

La descripción que el sujeto hizo parece la vergonzosa parodia de las palabras reales de nuestros propios detenidos desaparecidos, presos sin juicio alguno, torturados y ejecutados sin misericordia y peor aún ocultados o destruidos sus cuerpos.

Los dirigentes fundadores de este partido trabajaron codo a codo y con gran entusiasmo con el régimen de facto más despiadado de nuestra historia y hoy salmodian con lágrimas peores que las del cocodrilo de la fábula, quejas impostadas que nadie, salvo que sea ingenuo elector de estos palurdos, podía creer.

Como si nadie hubiera sido apresado ilegalmente en su propio país finge ser un preso político instantáneo, mártir de nada ni nadie, mártir de cartón piedra que infringe daño a la memoria de quien sí perdió su vida en nombre de destinos más nobles para sí mismos y los demás. ¿Nada sabían? ¿Nada creyeron? ¿Y usted todavía cree que tal estolidez debería gobernar Chile?

Se dice que todo vencedor necesita de vencidos. Asimismo podría afirmarse que todo mártir necesita de su ejecutor. Doña Alicia, los niños palestinos y nuestros detenidos desaparecidos no necesitan contrapartes para brillar en el firmamento, tampoco de cretinos que pretendan arrogarse el derecho a compartir el trono de la dignidad, de la pureza, de la verdad.

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10 ago 2014

A propósito del Día del Niño

Domingo 10 de agosto.Este día es, después del 24 de diciembre, un día marcado por la ansiedad de consumo y materializada en los regalos que los padres se apresuran a comprar para sus niños, ignorando que el verdadero regalo que esos niños desean recibir no se compra en ninguna tienda, es gratuito pero sobrecogedoramente esquivo: se llama Buen Trato, y es un regalo que actualmente sólo uno de cada tres niños chilenos afirma recibir de sus padres todos los días del año.

El Buen Trato en la infancia y la niñez tiene un sinónimo, Trato Amoroso, y representa la más espléndida acción de prevención en salud integral del niño. Un niño a quien sus padres aman, respetan y protegen está recibiendo neurotróficos, una invisible corriente química y energética que fortalece su organismo, en especial su cerebro, otorgándole resiliencia e incrementando las habilidades cognitivas y socioemocionales, dones que se van a expresar no sólo en ese niño cuando adulto, sino que atravesarán el umbral generacional por más de una generación.

Es preciso recalcar que las experiencias vividas durante la niñez marcan al individuo y se expresan en el futuro, alcanzando a sus hijos , a los hijos de esos hijos, tejiendo una urdimbre de destinos individuales en un solo destino común, feliz o desgraciado.

El Mal Trato al niño, representado por el maltrato físico y psicológico, la negligencia, el abuso y la disfunción familiar como escenario donde se desenvuelve la vida de ciertos niños provoca, por el contrario, una enorme liberación de sustancias tóxicas para el organismo, en especial para las delicadas estructuras cerebrales de la vida emocional y para la igualmente delicada trama vital del corazón.

Estos neurotóxicos, cardiotóxicos, inmunotóxicos , son particularmente dañinos en los infantes menores de cinco años de edad, por cuanto las estructuras cerebrales de la vida emocional primaria en ese tramo de la vida poseen el triple de receptores sinápticos, sensibles tanto a las sustancias neurotróficas como a los neurotóxicos provenientes del maltrato y de la negligencia afectiva.

El daño a las estructuras cerebrales de la vida emocional suele ser irreversible si nadie hace nada por reparar esas heridas. Ese daño se denomina técnicamente “ Estrés Post Traumático” (EPT) , y su escueto nombre no alcanza a dimensionar su escalofriante magnitud.

Por más de una generación, el EPT marcará el destino común de muchas personas ligadas a quien fue maltratado cuando niño y se expresará como desesperanza, ira, pérdida de la capacidad de disfrutar , incapacidad para aprender de la experiencia, inestabilidad emocional, incluso crueldad.

En otras palabras, dos de cada tres niños chilenos recibe muchos días al año el “ anti regalo” del Mal Trato de parte de sus padres, quienes quizá sólo este “ Día del Niño” le obsequiarán un juguete y le dedicarán atención, ignorantes de la magnitud devastadora de su conducta habitual el resto del año sobre sus hijos.

Imposible no pensar en esos niños sobrevivientes del horror en Gaza.Un conflicto del mundo adulto actual, justificado o injustificado, está marcando para siempre sus vidas y las de sus hijos y nietos, enlazándoles en el más trágico de los destinos. Nada más gratuito y más brutal.

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10 ago 2014

Una tragedia social

El trabajador Mario Cortes de 80 años, falleció en la mañana del lunes en la plaza de la Constitución, aproximadamente a las 7 horas de ese día. Había sido minero y el daño a sus pulmones le impidió seguir en esa actividad laboral, pasando a emplearse como barrendero cuando ya alcanzaba los 70 años de edad.Su jubilación no le alcanzaba para vivir.Sin embargo, con su salud quebrantada se situaba al aire libre, en pleno invierno, para aumentar sus escasos ingresos.

Era un poblador de la comuna de El Bosque cuya fatigosa rutina se iniciaba a las 4 de la mañana para cubrir un turno de 6 a 15 horas que le permitía otra ocupación en un edificio cercano retirando basura.

Sus amigos del sector declararon a la prensa su cariño hacia el fallecido por su esfuerzo y espíritu de sacrificio.Entre ellos un lustrabotas que se afanaba juntando monedas para enviarle una corona de flores, asumiendo la representación del espíritu solidario del pueblo chileno.

El drama de las pensiones que no permiten sostener una existencia digna es uno de los más pesados lastres que dejó la dictadura, de aquellos que pesan hoy enormemente en los hombros del régimen democrático que se recuperó en 1990. Una imposición ejecutada por la fuerza no podía tener un buen destino y, en demasiadas ocasiones se ha convertido en una tragedia social para quienes deben soportarla.

El sistema de las AFP asumió un compromiso que no cumplió. Sobre un ancho sector de trabajadores sencillamente fue un engaño. Se prometió un monto de la llamada tasa de reemplazo que no llega a la mitad de lo que se dijo iba a cubrir. Es decir, en relación a la remuneración que se recibe al momento de dejar la actividad laboral, la pensión que viene a ocupar ese vacío no se empina ni siquiera al 40% siendo la promesa original de un 70%.

Esa penosa realidad obliga al duro bregar del adulto mayor en Chile, que en innumerables hogares simplemente no se puede jubilar para no caer en la pobreza o incluso en la indigencia.

Este es el problema de fondo, las AFP no son capaces de responder por su tarea esencial, entregar pensiones que posibiliten acceder a una jubilación que permita vivir dignamente y que evite a un adulto mayor tener que soportar inclemencias que a la postre no puede resistir.

Chile vive un amplio proceso de cambios en múltiples esferas, en particular, se ha propuesto una reforma educacional que responda a las exigencias del país de hoy.

Están también en la perspectiva las reformas políticas que avancen hacia una nueva Constitución.No obstante, en el ámbito social, para la construcción de las mayorías nacionales que robustezcan la estabilidad democrática, no cabe duda que avanzar en una reforma estructural al actual sistema de pensiones es una demanda decisiva para el futuro de Chile.

Está en trámite en el Congreso Nacional un proyecto de ley del actual gobierno para crear una AFP estatal, esta iniciativa representa un buen comienzo en una tarea de largo aliento para que haya libertad en las opciones, mayor competencia y se progres en un ámbito tan fundamental en la vida de los hogares chilenos.

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10 ago 2014

Venezuela enseña soberanía, caso Cuevas

Para cualquier analista lo lógico es que la acción consciente de un “joven UDI” al tomar fotos a instalaciones prohibidas no es un acto de madurez sino de provocación clara, impulsado por gente que aún sustenta pensamientos militaristas y debe ser rechazado por la sociedad chilena.

La detención en Caracas de Felipe Cuevas, dirigente “juvenil” de la UDI, ha sido claramente explicada por las autoridades venezolanas: el hecho se debió a que el dirigente tomó fotografías en un lugar no autorizado y por no tener su identificación al momento de ser sorprendido por la policía.Se refiere al edificio Helicolde, donde funciona el Servicio de Inteligencia de Venezuela. Un caso judicial grave que fue resuelto con gentileza por el gobierno de Nicolás Maduro, optando la vía diplomática.

Sin embargo, se intentó hacer un show mediático por parte de la UDI con el fin de seguir con la política de oscurecer la realidad del país. Así, se entiende la falta de argumentación por parte de algunos parlamentarios y su odio manifiesto a todo lo que signifique dignidad, cayendo en absurdos discursos que, sólo por ser amparados por Medios donde la ideología prima, parecen ser verdaderos.

El caso del “juvenil” líder de 28 años quien se reúne con una persona que desea destruir un gobierno, incluso por vía armada, considerado en Chile sujeto de prisión, ha regresado en un evidente acto de farándula manifestando que simplemente estaba paseando por la calle (“fuimos encañonados, de manera arbitraria, simplemente por estar caminando”), sin celular, como simple transeúnte, siendo asaltado sorpresivamente por agentes violentos que lo detuvieron. Sus palabras en contra del gobierno y finalización son contundentes, diciendo: “temí no volver a Chile”.

Al respecto, las frases absurdas de un diputado criticando que detengan a una persona por tomar fotografías, demuestra el nivel perverso de un sector que en vez de agradecer el trámite rápido de un gobierno donde se maneja un criterio no represivo incluso con terroristas consumados, resuelve con eficiencia una situación concreta para Chile.

Lo que no ha dicho este político, en un intencionado “olvido”, es que durante el gobierno de Sebastián Piñera se detuvo al ciudadano peruano, Elito Antonio Saldaña Florian, acusado de “tomar fotos” con su teléfono Blac kberry en instalaciones militares, en enero 2012, manteniéndolo en prisión preventiva por cerca de ocho meses (1).

Hay que reconocer como positivo que el presidente de la Unión Demócrata Independiente, Ernesto Silva, respecto a la detención conforme a derecho de este ciudadano, comience a elogiar a las organizaciones de derechos humanos olvidando su pasado militarista (por ende la aprobación efectiva de asesinatos de chilenos en forma cruenta), al decir que “es de máxima gravedad es un atentado contra los derechos humanos. Siempre vamos a estar en contra de cualquier atentado contra los derechos humanos” (2).

Afortunadamente en Chile también existen herramientas informativas que permite evidenciar las falacias de personajes políticos.

La realidad, independientemente de la información tergiversada, es muy clara: este militante fue detenido por un hecho judicial grave cual es sacar de modo encubierto fotos en un Centro de Inteligencia mientras, supuestamente, visitaba una opositora al gobierno encarcelada por delicados actos de subversión.

Por ello, el gobierno chileno actuó con eficacia y diálogo lo que permitió su liberación, pese al show mediático de la UDI preparando un vuelo para “liberar” al secuestrado jovencito in-maduro.

El corolario lo reflejaba un tweet: “qué vergüenza, un gallo sin pasaporte, sin cerebro, tomando fotos en lugares de inteligencia, y después alegando como niño chico por los derechos humanos. Ese sí es descaro.”

(1) http://www.eldinamo.cl/2014/08/08/frase-de-diputado-kast-revive-caso-de-peruano-expulsado-de-chile-por-tomar-fotos/

(2) http://www.eldinamo.cl/2014/08/08/udi-y-liberacion-de-felipe-cuevas-solo-estaremos-tranquilos-cuando-llegue-a-chile/

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09 ago 2014

Repartir el poder

El paso de la tecnología electrónica a la digital en las comunicaciones influye en la formación de una nueva subjetividad ligada ya no a la calidad de espectadores de la TV, que necesita público que vean su programación, sino a un protagonismo de la sociedad civil que con los instrumentos interactivos de lo digital, que son móviles, puede auto convocarse, tener voz al margen de los medios tradicionales y exigir participación en las decisiones políticas.

Las nuevas fronteras de la tecnología de la información amplían el espectro de opinión pública y, en particular, la conexión computador – teléfono – Internet y sus ramificaciones- hacen posible el surgimiento de nuevas formas de comunidad y le dan una enorme oportunidad a la política y a los partidos en la medida que ellos también sean capaces de pasar de lo análogo a lo digital y que utilicen las nuevas tecnologías de la información para escuchar y consultar a la ciudadanía, horizontalizando la democracia .

Vivimos un cambio de época marcado por los efectos de la globalización y la influencia creciente de la revolución digital. Las tecnologías de la información y de las comunicaciones han permitido el surgimiento de redes sociales al margen o más allá de las estructuras de los partidos políticos y de las instituciones del Estado.

La sociedad en red se organiza utilizando las modernas tecnologías de las comunicaciones a través de las cuales han construido nuevas relaciones de poder que compite o sobrepasa a los partidos políticos, a los Gobiernos y a los Parlamentos, poniendo en tela de juicio la democracia representativa tradicional y la capacidad organizadora de la pluralidad ciudadana que ha correspondido hasta ahora casi plenamente a los partidos políticos.

Lo anterior significa que hoy el poder comienza a repartirse de manera distinta entre sociedad civil y la sociedad política.

Como recuerda el politólogo italiano Stefano Rodotà, “además de las fragilidades endógenas, un enorme remezón llegó a través de la globalización que impuso una nueva forma de democracia, la doxocracia o democracia de la opinión pública, en la que la voz de los ciudadanos puede alzarse en cualquier momento y desde cualquier lugar para formar parte del concierto cotidiano”.

Del predominio determinante de la televisión, y sobre todo de la TV satelital, que dotó a los seres humanos de cualquier lugar del planeta de un nivel de información como nunca antes en la historia de la humanidad, entramos hoy a la era digital donde la comunicación deja de ser vertical, deja de ser de pocos a muchos, espacio análogo que constituía también el escenario privilegiado de las cosas e instrumentos de la política.

La forma de comunicar deja de ser un espacio más de la política y se transforma en el espacio donde se ejerce la política.Ello debilita, sin duda, el rol de la intermediación de todas las instituciones que fueron características en la democracia.

Los ciudadanos se auto convocan, emiten sus propios mensajes, fijan agendas, condicionan a los parlamentos y a los gobiernos, lo cual coloca en tela de juicio, relativizan o colocan desafíos mayores a la acción de los partidos y de los parlamentos, que aparecen actuando en una sintonía distinta a la de la sociedad, y que sin embargo han sido y siguen siendo columnas vertebrales del sistema democrático.

La democracia está cada vez más marcada por esta nueva forma de ciudadanía y los partidos, parlamentos y demás instituciones, están obligadas a adecuarse a estos fenómenos con mecanismos cada vez más abiertos que respondan a las exigencias de protagonismo participativo de la sociedad civil.

Junto a ello, las nuevas tecnologías cambian los tiempos de la política y de la propia democracia representativa y esto no puede no afectar al trabajo parlamentario que tiene sus tiempos y donde el debate y la búsqueda de acuerdos es la base de su actividad.

El juicio ciudadano se forma hoy en una óptica nueva determinada por la velocidad de las comunicaciones y quisiera que los parlamentos respondieran a sus aspiraciones en ese ritmo.

Se trata de una sociedad más exigente y más informada, convencida que los parlamentarios y los políticos corresponden a una casta privilegiada de la sociedad que se ha separado de ella y por la cual no se siente representada.

Asistimos, además, a una pérdida de densidad de la política y a una fuerte personalización de ella.

Castells explica que el mensaje, más que ideología o proyecto, tiende a ser hoy el personaje mismo.

La propia adscripción de los electores a los programas se debilita y una enorme masa de ellos fluctúa entre una y otra alternativa, de pronto de sectores ideológicos y políticos muy distintos en su contenido, viendo qué ofrece cada cual, con menos sujeción al plano ideal y mucho más a la oferta de corto plazo del candidato. Se observa, incluso en las democracias más consolidadas, altos grados de abstención electoral y desafección por la política y sus instituciones.

Hay, por tanto, un cambio en la política. El fenómeno de la desideologización y la crisis de las utopías han terminado con las claves interpretativas de la realidad y con las propuestas que anunciaban sociedades superiores.

Hoy la política es más pragmática, radicada en el presente, como si fuera inamovible, y con insuficientes proyectos de futuro si consideramos las demandas crecientes de la sociedad, lo que la hace aún menos atractiva.

Hay un evidente retraso cultural de la política para comprender e interpretar los nuevos fenómenos y los temas globales. Los partidos, nacidos en tiempos de Estados nacionales fuertes, tienden a tener una visión y a dar respuestas locales, mientras las redes y los nuevos temas que se instalan a través de las comunicaciones son globales y frecuentemente sobrepasan lo que los partidos están dispuestos a hacer en materia de cambios.

Hay, ciertamente, más radicalidad y liberalidad cultural en la sociedad que en estratos importantes de la política y de los políticos y ello se expresa a través de las redes sociales.

El ciudadano se siente desprotegido y por ello la demanda de un Estado que además de proteger los derechos y las libertades se haga cargo de garantizar para el ciudadano un conjunto de bienes que le permitan vivir con dignidad y realizarse según sus capacidades.

Este descontento responde sin duda a las aspiraciones sociales no atendidas, a las formas elitistas y auto referenciales con que operan los partidos e instituciones, a los escasos espacios de participación que la ciudadanía tiene en las decisiones, y, también, a las prácticas contrarias a la probidad, a la falta de transparencia, lo cual genera un fuerte repudio de la opinión pública que tiende a generalizarlas.

Los sondeos de opinión demuestran que la mayoría de los ciudadanos valora la democracia y a las instituciones de la democracia, pero están descontentos con la forma como ella se ejerce y sus logros.

Recomponer la fractura entre instituciones de la democracia y ciudadanía pasa por más y mejor democracia y hoy las nuevas tecnologías permiten que la ciudadanía sea consultada fácilmente, que se creen canales de expresión de ida y venida, que aparezcan nuevas formas de comunidad y que los ciudadanos conectados pero, a la vez, movilizados, disputen la formulación de la Agenda política y social a los medios y la impongan ante las autoridades.

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09 ago 2014

Universidades sin buses de acercamiento

La desigualdad en nuestro país, y sobre todo la de la escuela, inevitablemente condiciona el futuro, es innegable señalar que a muchos se les cierran las oportunidades para acceder a la universidad y siempre los más excluidos son los estudiantes más pobres.

Esta sociedad neoliberal le roba a la mayoría de las personas la posibilidad de ser profesionales, salir de la pobreza y ganar el sueldo que desean.En teoría, la educación ayuda a la movilidad social, pero hay casos en que es un componente de segregación. Lo fundamental es que quien tenga las capacidades pueda educarse bien, sin ser discriminado ni por su cuna, ni por su dinero, ni por su apellido.

Uno de los grandes problemas de este país es que los ricos tienen el sartén por el mango y el mango también. La unión de las elites intelectuales, financieras, familiares y las grandes empresas está generando una sociedad de castas.

Los ricos nacen en clínicas para ricos, estudian en colegios para ricos, se casan entre los ricos y trabajan para su misma clase. Dicho de otra manera, una persona, que nace en San Carlos de Apoquindo, estudia en un colegio de San Carlos de Apoquindo y más tarde en una universidad en San Carlos de Apoquindo.Éste no conocerá nunca a su país. El ‘descremar’ a ricos y a pobres es el gran problema de la educación de nuestro país, no nos sentimos integrados porque hay personas que viven en guetos.

El apartheid educativo-cultural que vivimos está en la base del modelo.Es irónico señalar que existen buses de acercamientos a las universidades, sabiendo que éstas debiesen ser un bus de acercamiento a la realidad; en donde se investiga, se planea, se discute cuanto dice relación al bien común de la nación y de la humanidad.Suponemos que deben ser el cerebro del país.

Sin embargo, existen universidades que buscan un perfil de alumno que estudie apartado de los temas candentes del país, en el tranquilo faldeo cordillerano.Estas instituciones deliberadamente se han excluido de la realidad, porque no quieren que “cualquiera” llegue a estudiar allí. Este apartheid representa, entre otras cosas, la ruptura de los intereses académicos de los planteles educativos con el interés nacional.

Este sistema educacional ha sido el espacio donde el neoliberalismo ha entrado en crisis más que en otros grupos o problemas sociales y, sin lugar a duda, hemos logrado cuestionar el “sistema”.Existe la sensación desde el mundo social que hoy vivimos un momento histórico, de cambio, de movilidad. Pero obviamente esperamos que haya una seria y profunda discusión sobre la Reforma Educacional, que se explique la letra chica para que no haya timos escondidos, sino que haya verdaderamente posibilidades de terminar con la enorme segregación que existe.

La profunda convicción que requiere el desarrollo de esta Reforma no puede aguantar unos años más sin emprender la tarea de reconocer que el cariño que vincula lo personal con lo colectivo es la fuerza clave en la construcción de una alternativa al neoliberalismo.

Pero, como todos sabemos, las convicciones requieren grandes inversiones de tiempo y afecto. Refundar la educación chilena con base en un continuo educativo es imposible sin el vínculo con los movimientos sociales.

Es profundamente necesario remover las raíces podridas del sistema de apartheid educativo en el cual estamos insertos, y esto sólo es posible desde las redes de colaboración, unidad y solidaridad entre nosotros. Es la única manera de sembrar una alternativa. Hoy no es tiempo de cosecha, sino que de siembra.

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09 ago 2014

Rusia, comercio y principios

La delicada crisis en Ucrania abrió esta semana un nuevo capítulo en su libro de conflictos y con un imprevisto acápite que involucra a nuestro país.Es que junto con las represalias comerciales anunciadas por Moscú contra Estados Unidos, la Unión Europea, Australia, Canadá, Japón y Noruega, las que prohíben -inicialmente por un año- la importación de una amplia gama de sus productos agropecuarios, se supo casi simultáneamente que los embajadores en Moscú de Brasil, Chile y Ecuador, más el encargado de negocios de Argentina habían sido convocados a reuniones de urgencia por el gobierno ruso para evaluar la posibilidad de aumentar la presencia de nuestros productos agroalimentarios y, de este modo, sustituir la oferta desde los mercados vetados.

Si las negociaciones derivan finalmente en un incremento de las exportaciones a Rusia, el caso se vuelve uno de aquellos donde los principios e intereses de nuestra política exterior no necesariamente pueden terminar entonando la misma melodía.

Examinemos primero los principios. Nuestro país fija desde antiguo su orientación internacional a partir del respeto al derecho internacional, la integridad territorial, la promoción de la democracia, el respeto a los derechos humanos y la responsabilidad de cooperar a fin de conseguir soluciones colectivas a problemas globales.

En ese sentido, respaldar las sanciones económicas que los países afectados han levantado contra Rusia pareciera ser la decisión más afinada.No debemos olvidar que éstos impusieron restricciones financieras, comerciales y de movimiento a ciertas personalidades para defender los mismos principios que nosotros consagramos y tras llegar a un amplio consenso en torno a las responsabilidades que le caben al gobierno de Vladimir Putin en la anexión ilegal de Crimea, la intromisión y desestabilización del este de Ucrania y, finalmente, en el trágico derribo de un avión comercial con más 298 pasajeros a bordo.

En contraste, las represalias comerciales anunciadas por Moscú no responderían a ninguna transgresión de dichas normas por parte de los afectados.Son sólo sanciones que responden a otras sanciones.

La otra cara de la moneda es el genuino interés de expandir el mercado para nuestros productos agropecuarios, cerrando nuevos negocios en un mercado tan grande y atractivo como el ruso, de casi 146 millones de habitantes (incluida la población de Crimea) y el que en el año 2013 importó productos de estos por un valor cercanos a losU$43 mil millones.

El caso, además, es un interesante ejemplo de la rápida adaptación con la que se mueven los actores que participan del comercio internacional, una de las actividades modernas que mejor apropió los atributos que llegaron con la globalización, y cuya dinámica ha sido hábilmente explotada por nuestros exportadores desde hace más de dos décadas.

La situación, asimismo, va en línea con el anhelo del actual gobierno por convertir al país en una potencia alimentaria mundial; política que busca inteligentemente diversificar nuestra oferta exportadora, aún muy dependiente de la minería cuprífera.

No hay que olvidar, igualmente, que el agro nacional es uno de los actores privados más atentos y reactivos a las coyunturas internacionales, tanto para bien (aumentar el volumen exportador ante la apertura de nuevos mercados), como para mal (caídas en el precio de las divisas o presiones proteccionistas).Es una oportunidad hecha para tomarla.

¿Cuál de los enfoques es el correcto? Creo que una combinación de ambos es la fórmula más adecuada.

Por un lado, el desenlace de la crisis de Ucrania alimentará el debate respecto al futuro del actual Orden Mundial: aquella estructura jerarquizada de valores liberales que guían las relaciones internacionales contemporáneas (protección de derechos individuales, promoción del comercio y profundización de la democracia), la cual está encabezada por los Estados Unidos (su diseñador), país que a cambio de asegurar su predominio ofrece un amplio espacio para que terceros colaboren en la construcción de reglas y consensos, disposición que estaría -en principio- asegurada con la fundación de instituciones ‘liberales’ de alcance global (ONU y otras).

La amenaza, señalan algunos, está en que el ascenso económico de China y las reacciones desafiantes de Rusia, entre otros fenómenos, aceleren su deterioro.

Por otro lado, se puede argumentar razonablemente que tomar la oportunidad exportadora que se abre no implica poner en cuestión los referidos principios de nuestra política exterior –bien hemos denunciado la violencia en Ucrania y, desde nuestro puesto en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, hemos apoyado la condena de la comunidad internacional.

También es defendible el argumento que señala que es legítimo demostrar cierto escepticismo sobre el papel de los Estados Unidos en el manejo de las relaciones internacionales y querer revisar alternativas.O quizás, si excluimos a Brasil del grupo, la capacidad de sustitución de importaciones que podemos ofrecer es más que limitada y no ofende a las principales potencias.

Para concluir, sí pondría el acento en dos elementos. Primero, advertir lo que acusan algunos analistas internacionales en el sentido que Rusia ha dejado de actuar ‘racionalmente’, por lo que cada vez toma más trabajo predecir las acciones futuras que se deciden en el Kremlin. Está por verse, entonces, si sus nuevas intenciones exportadoras con Latinoamérica son consistentes.

Segundo, evitaría hacer alardes de los posibles efectos positivos que puede tener en nuestra economía la expansión comercial. “Valorar” la oportunidad, como lo declaró esta semana un influyente integrante de la comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados, no es prudente ni justo con la historia de violencia y sangre de inocentes con la que arrastra la propuesta.

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08 ago 2014

Gaza, crimen sin castigo

Escribo con dolor y, por qué no reconocerlo, indignado.

He aprendido a controlar la ira, porque la violencia innata en cada uno de nosotros por haber sufrido 17 años de violencia desde el Estado me hizo deplorarla y evitarla.Pero no puedo remediar lo primero, el dolor me corroe el alma.

Cuando han continuado los bombardeos israelíes después de una corta tregua y –según cifras de la ONU– ya hay 1.949 palestinos asesinados en la Franja de Gaza, 419 niños muertos, 142 escuelas destruidas, 470 mil habitantes sin casa pues sus viviendas fueron destruidas y miles de heridos, oigo a chilenos que se dicen judíos referirse ambiguamente y con la lógica del empate Israel-Hamás acerca de esta matanza, llegando a argumentar que lo que allí ocurre es una guerra, tal como argumentaba Pinochet para justificar sus crímenes. Me acordé de palabras de Humberto Maturana: la razón nace de la sinrazón, es decir de la emoción.

Mi emoción y razón no pueden comprender que en ciertas personas prime más no sé qué fidelidad mal entendida a su origen judío para no condenar sin pretextos lo que otros judíos de Chile y el mundo sí han hecho (como una estremecedora y digna protesta del editor Paulo Slachevsky).

La condena a los actos desesperados de Hamás (además de insignificantes en su daño real al enemigo) ni por asomo justifica o “empata” al genocidio planificado y sin compasión que está cometiendo el Estado de Israel hacia seres humanos, sea cual sea su origen, religión o creencias, ante la escandalosa omisión, complicidad e incluso apoyo de las potencias del mundo.

Pudiera parecer que no tengo velas en este entierro: ningún ancestro árabe o judío en mi árbol genealógico, aunque es seguro, como quiltro impuro que soy, corren ambas sangres por mis venas al ser yo el resultado de numerosas y saludables mezclas que la historia humana sabiamente ha permitido… mezclas que también contaminan a esos judíos que todavía tienen la ilusión de ser de una pureza propia de pueblo elegido.

Pero sí corren velas propias en este entierro, cualquier humano con corazón y dos dedos de frente sentiría y pensaría lo mismo. Como personas dignas, todos tenemos el deber moral de ponernos en el lugar de las madres y padres palestinos y así llegar a considerara los centenares de niños asesinados como si fueran nuestros propios hijos muertos.

El dolor que produce permitir y avalar la política de exterminio que Israel acomete hacia el pueblo palestino sólo deriva de que mi condición humana me hace ver sin ambigüedades que cualquier asesinato masivo y planificado es un genocidio y me indignaría de la misma manera si seres humanos judíos fueran las víctimas (como lo fueron antes) y no los victimarios (como lo son ahora).

Es probable que esa condición de pasar de víctimas atroces a victimarios feroces sea homologable a lo que les sucede a tantos niños abusados que de adultos se transforman en abusadores. ¿Qué diría ese iluminador judío llamado Freud de todo esto?

Hace pocos años estuve en El Líbano y visité el campo de refugiados palestinos de Sabra y Chatila, que existe desde 1948 (y vergonzosamente no ha cambiado hasta ahora de condición), cuando llegaron millares de familias en tristes caravanas a pie desde su Palestina ancestral, expulsados por las recién estrenadas tropas israelíes en lo que el historiador judío-israelí (ni musulmán ni árabe) Ilan Pappé llamó “limpieza étnica sionista”.

En el sitio eriazo de la entrada, una pequeña rueda de la fortuna de madera a punto de caer –metáfora de esta historia infame– resaltaba ante un edificio destruido en bombardeos israelitas posteriores a la masacre allí ocurrida, y un viejo palestino disputaba algo que comer con una cabra en un pequeño basural.

Pero adentro me sorprendió la vida que resurgió después de la muerte. Niños en callejuelas embarradas por la lluvia jugaban y se reían porque eran niños y no podían evitarlo, aunque sean parte de una población hacinada de 9.000 personas en menos de 2 kilómetros cuadrados.

En septiembre de 1982, tal como hoy,todos nos conmovimosde la matanza–según informe de la Cruz Roja Internacional– de más de 2.400 palestinos allí, la mayoría ancianos, mujeres y niños.Familias completas a las que sacaron de sus casas y pusieron en muros de la avenida Sabra para acribillarlos, y cuyos autores materiales fueron milicianos libaneses cristianos falangistas, mientras las tropas de Ariel Sharon observaban cómo “no judíos mataban a no judíos” (así lo dijo el entonces primer ministro Menájem Begin).

“Un niño muerto puede a veces bloquear una calle, son tan estrechas, tan angostas, y los muertos tan cuantiosos”, escribió Jean Genet en su relato Cuatro horas en Chatila.

Las huestes de Sharon, que habían invadido el sur del Líbano, iluminaron con bengalas la noche para que la operación tuviera éxito. Incluso –según informe de la ONU– un día antes los israelíes le habían entregado a los falangistas bolsas para poner los cuerpos, esa tarde vivos, para cuando 24 horas después fueran cadáveres.

Una investigación del propio gobierno israelí determinó que Sharon era personalmente responsable de hacer posible esa masacre… lo que no evitó que fuera elegido primer ministro de Israel 19 años después. Noam Chomsky, judío-estadounidense, dijo que esa matanza recordaba “lo peor de los pogroms judíos”.

A su vez, la Franja de Gaza tiene una superficie de 350 kilómetros cuadrados (la mitad de la comuna de Santiago), una población de 1.800.000 palestinos y una densidad de 4.200 habitantes por kilómetro cuadrado, lo que hace que sea el territorio más densamente poblado del planeta.

Casi toda su población vive en la pobreza (40% de cesantía, desde que comenzó el bloqueo de Israel) y el territorio es una cárcel porque nadie desde allí puede salir: nadie puede embarcarse (pese a que cuenta con 40 kilómetros de costa), tomar un avión (el aeropuerto fue destruido hace años por cazabombarderos israelíes) o salir de sus fronteras por tierra, pues Israel no se los permite (aunque tiene 11 kilómetros de frontera con Egipto, está cautelada por cercos y el ejército israelí).

Desde que es parte de la Autonomía Palestina (junto a Cisjordania, después de los Acuerdos de Oslo de 1993) Israel ha ejercido contra Gaza una acción brutal, bajo el pretexto de una “guerra defensiva” en contra del grupo extremista islámico Hamás.

Son constantes las incursiones del ejército con bulldozer que derriban edificios y casas con las familias dentro y la declaración de la Franja de Gaza como “hostil” significó el corte del suministro de electricidad, combustible, mercancías y agua… desde principios del año 2000 hasta ahora, limitando incluso la llegada de alimentos y medicinas a la mínima condición.

Que los palestinos allí hayan podido seguir viviendo es un milagro, y teniendo hijos, porque hay una alta tasa de natalidad, lo que irrita al Estado de Israel. Esto quiere decir que el porcentaje más significativo de la población son niños.

Recién en 2005 se produjo la retirada de colonos israelíes de la zona. Desde entonces, Israel ha vuelto, pero a matar, con incursiones militares en 2008 (“Operación Plomo Fundido”, asesinando a más 1.000 palestinos y destruyendo más del 50% de la infraestructura de la Ciudad de Gaza); en 2010 (asesinó a 9 personas que llegaron en un barco de 633 voluntarios de distintas naciones con ayuda humanitaria para tratar de romper el bloqueo naval israelí); en 2012 (asesinando a 150 personas, dejando 1.200 heridos) y hoy, en julio y agosto de 2014 (“Operación Escudo Protector”), ya van casi 2.000 palestinos asesinados.

¿Alguien puede creer que esta manera bestial de resolución del conflicto por parte de Israel, basado en la aniquilación, puede llevar a algún tipo de paz para los propios israelíes?

¿Alguien puede pensar que las víctimas sobrevivientes, niños y jóvenes con familiares muertos, no van a tener justos motivos para plegarse en corto tiempo a acciones extremas e incluso suicidas en contra de cualquiera que les recuerde a los autores de esta imborrable barbarie?

Por todo esto, no puedo negarlo, escribo con dolor indignado.Con impotencia.

Estados Unidos y Europa, que han invadido naciones bajo el pretexto de defender el derecho a la vida de los débiles por una causa suprema (cuando apunto esto EE.UU. acaba de bombardear a yihadistas en Irak), ahora no lo hacen y son cómplices de un genocidio. Y el hecho de que los victimarios de Gaza sean quienes antes sufrieron los peores horrores como víctimas, no aminora el crimen. Por el contrario, lo hace inconcebible.

Israel da motivo para creer, como Ionesco, que la naturaleza humana es un absurdo definitivamente irracional.

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08 ago 2014

Inclusión, tarea de todos

De acuerdo al “Primer informe mundial sobre la Discapacidad”, publicado por la OMS en 2011, 210 millones de personas tienen alguna discapacidad intelectual. En Chile, las cifras asociadas a discapacidad, son del año 2004, razón por la que la realización de la Segunda Encuesta Nacional en Discapacidad (ENDISC), durante el segundo semestre de 2014, es de gran importancia para la revisión, replanteamiento y realización de políticas públicas que permitan mejorar la calidad de vida, participación e inclusión de personas con discapacidad en la sociedad.

Sin lugar a dudas, el ingreso al mundo del trabajo, es un hito en la vida de todas las personas.Lamentablemente, de acuerdo a cifras de la ENDISC 2004, únicamente alrededor de un 12,7% de la población con discapacidad intelectual realiza un trabajo remunerado. Este hecho debiera llevarnos como sociedad no sólo a abrir la mirada, sino que también, a abrir espacios de participación laboral, que permitan la inclusión en el mundo del trabajo a este grupo de personas.

Es cierto que ya hay empresas que han dado pasos significativos. Sin embargo, y de acuerdo a las cifras oficiales, tenemos un gran camino por delante.

Quisiera invitarlos a reflexionar sobre el por qué debemos generar instancias para incluir a personas con capacidades diferentes o es que en las sociedades que hemos construido, ¿no somos capaces de considerar a todas las personas como entes sociales dignos de participar libremente y hacer el valioso aporte del que cada uno es portador?

¿Qué estamos aspirando como sociedad en el siglo XXI?, ¿cómo hemos transitado hasta llegar a lo que somos, donde no hay espacios para recibir el aporte de todos?, ¿por qué los niños que nacen con capacidades diferentes no pueden ir al colegio de sus hermanos?, ¿por qué esas madres deben dejar sus trabajos para cuidar de sus niños con otras capacidades?

¿Por qué las oportunidades de trabajo no son iguales para todos, cuando las capacidades para su realización sí se pueden lograr?

¿Por qué definimos con anterioridad qué puede llenar los espacios y qué no los puede llenar?, ¿es que tal vez con estas exclusiones con que vivimos estamos preservando el modelo?

Incluir no es una tarea fácil, tampoco tarea de unos pocos. Es tarea de todos comprender que las personas somos parte de una sociedad colaboradora y subsidiaria con los que más lo necesitan, y como tales merecen su espacio y oportunidades para hacer de su vida lo mejor posible.

Soy una convencida que cada existencia viene a hacer su aporte único. Lo que queda sin entregar también queda sin ser recibido, luego todos pierden y la sociedad transita hacia un conjunto de personas que no se integran y van perdiendo la capacidad de aceptar la realidad tal como ocurre, imperfecta y asimétrica.

Para terminar, quisiera rescatar un comentario que me hizo una niña con discapacidad intelectual en nuestros talleres protegidos de chocolatería.

Le pregunté ¿cómo te llamas? y ¿cuántos años tienes? Luego de un largo rato respondió, “no lo sé, tampoco mi edad, pero si le dijera que soy María y tengo lo que parezco ¿usted me creería, no es cierto?”, ante lo que yo respondí, sí por supuesto.

Entonces ella dijo, “entonces Sra. Magdalena, ahora me llamo María y tengo como 28 años”… (hubo un silencio) y agregó, “pero sí sé algo de lo que estoy segura, que lo único que sé de verdad, es que estoy aquí, ahora, haciendo alfajores, mañana no sé donde estaré y ayer ya lo olvidé”, ante lo cual me quedé impactada reflexionando de la gran verdad que ella es portadora y tomé conciencia de lo afortunada que soy de recibir su comentario.

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