24 jul 2015

Esos, los que los quemaron, deben pedir perdón a la humanidad

Hace un par de  meses el Subcomisario Solar me pidió una declaración. Cada tanto algún tribunal me solicita declarar respecto de las lesiones y su contexto en el caso  de mis pacientes grandes quemados.  Esta vez era respecto de Carmen Gloria y Rodrigo Rojas. Adjuntó mi declaración en el Tribunal el 3 de Septiembre de 1986. Me sorprendió el contenido y que la tuviera.  No la recordaba.

Teníamos otras preocupaciones esos días, Carmen comenzaba a levantarse, tramitábamos su traslado y el de su familia a Canadá, los dirigentes de la Asamblea de la Civilidad estaban presos en Capuchinos, yo subrogaba la Secretaría General del Colegio Médico y la Asamblea. El ambiente era pura tensión. Cuatro días después se produjo el atentado. El escenario cambió, asesinaron a  Felipe Rivera, Gastón Vidaurrázaga, José Carrasco y Abraham Muskablit.

Así supe que se había reabierto la causa.Ahora las preguntas eran más precisas. ¿Cómo se enteró? ¿Por qué se vinculó? ¿Quién lo contrató? ¿En qué condiciones los encontró? ¿Por qué no se trasladó a Rodrigo? ¿Pudo ella también fallecer? ¿Salvó Ud. su vida?

Más tarde, hace unos días un periodista me informó que había un ex conscripto que iba a declarar y que quería hablar con Carmen para pedirle perdón. Le dije que le preguntara a ella. Su ubicación es conocida. No pude evitar agregar que me parecía que no bastaba pedirle perdón a ella, tenía que pedirle perdón a la humanidad, pedir perdón al país.

Después se ha producido una avalancha de información y las preguntas de tribunal se han convertido en públicas. Revisar mi declaración de entonces, actualizarla y responder las preguntas que entonces no se hicieron y otras nuevas obligó a recordar.

Recordar la cara de doña Lucy Figueroa, nuestra secretaria del Colegió Médico, cuando ese 2 de Julio como a las once me informó que alguien decía que quemaron a dos muchachos y desencadenó nuestra acción.

Entonces no necesitábamos ni largas reuniones, ni consultas burocráticas, ni cálculos  menores. Sabíamos lo que había que hacer. Los médicos, proteger la vida. Los comunicadores comunicar.

Instrucción básica “si te pasa algo, llama a Cooperativa” mejor “llama a la Manola”.

Consiguieron que llegáramos tarde para Rodrigo y lo lamentaré siempre, pero no pudimos. Salvamos la vida de Carmen Gloria. ¿La salvó Ud.? Me han preguntado. Y si… Ese es nuestro oficio, a eso nos dedicamos. Pero somos uno más de un gran equipo.

¿Por qué me involucré? Repite la pregunta un periodista. Porque a eso me dedico, porque soy médico, porque nosotros convocamos el Paro y nos sentimos responsables y finalmente… como dije al pasar, simple solidaridad de combatientes.

Pero salvar la vida de Carmen adquirió  otro significado. En una entrevista de Televisión de la época dije “estamos tratando (entonces no sabíamos si lo conseguiríamos) a  la que puede llegar a ser una testigo viva de las atrocidades de la dictadura”.

Lo dije pensando en las palabras que el 16 de Julio, catorce días después que la quemaran, a propósito de su santo le escribieran los trabajadores de la “Coordinadora Sindical Zona Centro” cito: “Por más flores que corten del jardín de la juventud, jamás podrán detener la Primavera. Los trabajadores, te rogamos, resiste. Te imploramos, sana. Te pedimos, lucha. Te ordenamos ¡Tienes que vivir!

Esa era la tarea. Miles colaboraron en ella. Los que hicieron guardia día y noche, lo que recolectaron el dinero para pagar la atención. Los que ofrecieron donar su piel. Esos dos anónimos héroes que materialmente lo hicieron, el equipo que cuidó de ella y de ellos. Y si… salvamos su vida, era lo que teníamos que hacer. Por ella, por los que cayeron, por nosotros, por el país. Era lo que teníamos que hacer.

Los años, la familia, la vida han hecho de la niña de entonces una gran mujer, una gran testigo, un gran testimonio.

He dicho muchas veces que la vida me ha dado grandes privilegios. Entre ellos poder escribir estas palabras 29 años después en la sección de Opinión de Cooperativa. Poder decir, como Violeta, Gracias a la vida por darme el privilegio de hacer lo que hago y tener los amigos que tengo.

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24 jul 2015

Aborto, trauma y subjetividad

Quisiera detenerme en la tercera causal del proyecto de ley de despenalización del aborto por tres razones: la violación. Con respecto a esta causal, hay más controversia que en las dos anteriores ya que, en este caso, se pone en juego el derecho al aborto por causas no atribuibles a la biología sino que a la subjetividad de la mujer puesta en juego en torno a un embarazo no deseado ni consentido. Aquí entra la noción de trauma psíquico como una variable a considerar como causa suficiente para poner término a un embarazo no deseado. Sería el reconocimiento social de al menos dos aspectos:

1. El reconocimiento a la existencia, gravedad y a los efectos brutales de la violencia sexual que padecen las mujeres en este país.

2. El reconocimiento a la violencia que puede implicar obligar a una mujer a llevar a término un embarazo que fue concebido sin su consentimiento.

El debate de la despenalización del aborto por tres causales ha evidenciado de manera lamentable que estos dos aspectos básicos de la dignidad de cualquier mujer no están resguardados.

Primero, por la relativización, negación, desmentida y minimización de la violencia sexual como problema imperante en nuestro país (recordemos que gran parte del debate se ha centrado en atribuir a las mujeres la responsabilidad de ser violentadas sexualmente, o atribuirles un uso malicioso de falsas acusaciones al respecto, o desestimar las cifras de incidencia) y segundo, por no hacerse cargo de la violencia que implica a una mujer obligar a llevar a término un embarazo no consentido.

La potencia de este aspecto es que, precisamente, invisibiliza la subjetividad femenina como relevante. Pensar incluir la subjetividad de una mujer en el debate obliga a pensar a una mujer no sólo como un cuerpo que engendra y que está biológicamente disponible para parir, sino que ese cuerpo es parte de una individuo llena de complejidades –como todo ser humano.

Si aceptamos ese punto –el que la mujer no es un cuerpo despojado de subjetividad-, aceptamos que la mujer es una sujeto que no puede ser reducida a su función reproductora.

Cuando incorporamos la noción de trauma psíquico, nos hacemos cargo de que aquello que sucede en nuestro cuerpo y en nuestro entorno tienen efectos que pueden ser nocivos para nuestra salud mental (y viceversa). Y que afectan la manera en que una vida se hace vivible.

La maternidad, como acto humano, es un lugar privilegiado para mostrar esto, ya que reviste una función compleja. Una mujer que se embaraza debe llevar a cabo un largo y trabajoso proceso de maternaje, proceso que no todas las mujeres están en condiciones de asumir ya sea por razones sociales, subjetivas, vitales, históricas u otras. Obligar a una mujer a asumir un embarazo no deseado, es obligarla a escindirse, a anularse como sujeto y a reducirse a un cuerpo sin subjetividad. Esto, es pedir algo no solo monstruoso sino que imposible de realizar sin negar la condición de seres humanas a las mujeres.

Cuando pretendemos obligar a una mujer a asumir una maternidad no deseada, la estamos vulnerando.

Obligar a una mujer a que asuma un embarazo no deseado, sea cual sea la razón que causa el embarazo, es, simplemente, brutal. Y si, aún más, la razón de ese embarazo es una violación, simplemente hablamos de un acto de desprecio humano fundamental.

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24 jul 2015

Hacia una solución a las listas de espera

A pesar de poseer una importancia prioritaria en materia de prevención y resolutividad, la salud primaria arrastra también importantes falencias que, o son resueltas con recursos propios de los municipios o, sencillamente, se agravan en el tiempo sin solución alguna. Consecuentemente, los problemas gestados en este nivel se proyectan e impactan en el sistema secundario de salud, uno de cuyos principales síntomas es la existencia de largas listas de espera.

La semana última, el Senado aprobó un proyecto de ley que apunta a mejorar las condiciones laborales de un importante grupo de trabajadores del sistema primario, lo que constituye un avance y una mejora para los funcionarios y funcionarias que se desempeñan en los centros de salud municipales, muchas veces con contratos precarios o calificados en categorías inferiores a las que amerita la titulación técnica de nivel superior que poseen.

Sin embargo, el proyecto no dispone de recursos adicionales para aquellas funciones dedicadas a la atención de salud propiamente tal.

Si la preocupación principal del Gobierno apunta a resolver las necesidades de las personas, resulta razonable que los proyectos de ley propuestos por el Ejecutivo, además de resolver las reivindicaciones legítimas de los trabajadores, también permitan que los municipios puedan contratar más especialistas, más enfermeras y más técnicos de nivel superior.

Ahora que se habla de reorientar la agenda y los compromisos del Gobierno, los esfuerzos en salud deberían, necesariamente, orientarse a reducir las listas de espera tanto de consultas médicas como de intervenciones quirúrgicas, que generan malestar e incertidumbre entre miles de pacientes a lo largo de todo el país.

Sólo en la Región de Los Lagos, hay 59.937 personas en lista de espera por una consulta médica y 14.200 pacientes esperando por una intervención quirúrgica.

Si el realismo evidencia la dificultad de construir todos los hospitales comprometidos, al menos no renunciemos a la idea de disminuir sustancialmente las listas de espera en los centros de salud del país, y resolver así un problema concreto y urgente de una parte importante de la población.

La atención primaria puede ayudar a reducir la lista de espera de especialistas. Sin embargo, en vez de fortalecerla, se aumenta la carga financiera de su administración, que desde hace años arrastra un fuerte déficit.

Las reivindicaciones de los funcionarios son completamente legítimas, pero su financiamiento debe ser de total responsabilidad de la autoridad central, lo que en este proyecto una vez más, no se está cumpliendo.

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23 jul 2015

El celibato sacerdotal

En la iglesia primitiva no hubo sacerdocio, la comunidad estaba habilitada para celebrar la eucaristía, pero con el tiempo se instituyó prácticamente el “ministerio sacerdotal”: presbíteros, epíscopos encargados de celebrar la eucaristía. Un concilio les impuso la obligación del celibato. Sin duda influyeron los monjes en el surgimiento de esta obligación. No fue fácil introducir esta novedad. Se impusieron castigos severos contra las mujeres convivientes con sacerdotes.

La reforma protestante y la diversidad de cultos que suscitó han cuestionado la institución del celibato sacerdotal pero ésta ha sido firmemente reforzada por la reforma católica, por el Concilio de Trento.

Hoy día múltiples cambios culturales, pastorales, sociales han despertado variados cuestionamientos al celibato sacerdotal.

Mi tesis es que el celibato sacerdotal ha favorecido y sigue favoreciendo la división de la iglesia entre jerarquía y fieles, siendo así que tanto los orígenes de la iglesia como el postulado del Concilio Vaticano II piden que la iglesia sea realmente una comunidad de fieles y todos estemos igualados como Pueblo de Dios. La historia de la primitiva iglesia nos muestra que la nota comunitaria fue dominante en los comienzos y esto se rompió con la admisión de la iglesia como religión oficial del imperio. Al menos se advirtió la tendencia a constituirse centros de poder dentro de la comunidad cristiana.

Los epíscopos, presbíteros constituidos en autoridad, tendían a apoyar esta autoridad como originaria, como institución divina. También quisieron apoyar su autoridad religiosa en el poder civil que el imperio les concedía.

Entonces se impuso el celibato. El celibato cubría el poder con la nota de sacralidad. El poder político que adquirió la Iglesia hizo que se constituyera una “jerarquía” dominante en contraposición con la masa de los “fieles”. Estos fieles no tenían voz ni voto, prácticamente no pesaban y casi no existían como parte integrante de la iglesia.

La reforma quiso reaccionar contra esto pero el concilio de Trento estabilizó esta situación. Ha sido el Concilio Vaticano II el que ha marcado la meta de que la iglesia sea verdaderamente una comunidad de fieles, el pueblo de Dios. Pero el celibato mantiene la división entre clero y fieles.

El clero célibe y con poderes, los fieles a veces desconocidos como auténticos miembros de la iglesia. Hoy se oye a católicos que critican “la iglesia” siendo ellos mismos iglesia, pero no lo reconocen en su lenguaje.

El celibato tiende, como dijimos, a que el clero se sienta superior, más espiritual, más iglesia con los inconvenientes que esta discriminación representa. Por esto la supresión del celibato obligatorio me parece una medida conveniente. Tendría que abarcar a sacerdotes y a obispos.

Tendría también, evidentemente, que efectuarse en conjunción con una clarificación doctrinal. La autoridad episcopal no viene derivada del evangelio mismo. El episcopado es un ministerio eclesial, no divino (procedente de Cristo mismo).

Digamos finalmente que con esto no queremos en ninguna forma descalificar o disminuir el valor que tiene el celibato. El celibato individual es un obsequio a Dios, una consagración integral a su servicio, pero no puede reivindicar una excelencia institucional en el sentido que fundamenta una situación de privilegio.

Se da un valioso y fructífero celibato en la vida monacal, en la vida religiosa, en las comunidades apostólicas o institutos seculares. También debemos valorar la opción por el celibato que puede tomar –y de hecho toma- el sacerdote diocesano.

Pero en cambio un celibato que refuerza la separación del clero en su dimensión principal (exceptuando el sector de los diáconos casados), no favorece la unidad de la comunidad eclesial.

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23 jul 2015

Los Honorables no están dando el ancho, pero sí la hora

A la misma hora que nuestros Honorables Parlamentarios brindaban su 1era Cuenta Pública en Valparaíso, en Santiago se comunicaban los resultados de la última encuesta Cerc-Mori: Barómetro de la Política del mes de julio, la cual develó entre sus cifras que un 81% de los entrevistados manifiestan que “los políticos no se preocupan mucho de lo que piensa la gente como yo” , mientras que un 79% expresó que “esté quien esté en el poder, siempre busca sus intereses personales”.

Sin duda, sería injusto decir que los 120 Diputados y los 38 Senadores que son parte del Congreso caigan dentro de la histeria de mis líneas, pero hoy el síntoma de rechazo y desaprobación de nuestros “Honorables” es transversal, preocupante y creciente con el paso del tiempo.

Según estudio de Adimark publicado en el mes de junio  las evaluaciones de la “Nueva Mayoría” y de la “Alianza” rompieron los récords de desaprobación, siendo así como un 74% desaprueba la gestión de la coalición de gobierno mientras que un 79% al conglomerado de oposición. La evaluación que la ciudadanía hace de ambas cámaras del Congreso no cambia en grado alguno y otorga un 78% de desaprobación a la gestión del Senado y de la Cámara de Diputados. De la misma forma, Plaza Pública Cadem, en su Estudio N° 75 publicado el mismo mes, expone la desazón de las personas, donde los partidos políticos tradicionales y también los nuevos, promedian tan sólo un 22% de evaluación positiva.

Desde el punto de vista técnico, los Senadores y Diputados entre sus principales funciones deben legislar, representar y fiscalizar a otros poderes del Estado.

Al respecto, me permito preguntar ¿usted estima que nuestros congresistas hoy legislan de cara a nuestras necesidades?, ¿están representando nuestros intereses? ¿Están fiscalizando al resto de los poderes del Estado? A los resultados de las investigaciones que encabezó la Fiscalía Nacional en el ámbito del “financiamiento irregular” de la política, sumado a las cifras arrojadas por las encuestas, lo más probable es que su respuesta ante estas tres interrogantes sea un lapidariono.

La Reforma Electoral colocó fin al sistema binominal y el nuevo escenario “proporcional inclusivo” aumenta la cantidad de Diputados de 120 a 155 y en el caso de los Senadores de 38 a 50, anunciando que no presentará mayores costos y todo con el propósito de mejorar la “representatividad” de los ciudadanos.

Pero si la base del nuevo sistema electoral busca la representatividad, la suma de más parlamentarios nunca fue un clamor desde la sociedad, muy por el contrario, aspectos en los cuales la ciudadanía si hace reparos no se consideraron, como por ejemplo, que los parlamentarios podrán seguir siendo reelectos siempre y cuando no sea en un mismo distrito o circunscripción; no se puso atajo a los aportes desde las empresas a la política y tampoco se consideró baja en los sueldos que perciben, los cuales en el caso de los Diputados se encuentran entre los mejores pagados entre los países de la OCDE.

El comportamiento de algunos parlamentarios de nuestra República hicieron que el descrédito hoy sea institucional y necesitan asimilar con urgencia que la política es una forma de servicio público y no una forma de lograr riqueza.

¿Cómo explicarse que postulen la idea que para solucionar las pensiones de nuestros adultos mayores, éstos puedan hipotecar sus casas?

¿Cómo puede ser posible que se les pague un viático por asistir al Congreso en el cumplimiento de su trabajo y que incluso dicho pago sea doble cuando se encuentran en el extranjero?

¿Cómo es posible que pretendan reeditar el voto obligatorio para ratificar en las urnas lo que no han conseguido validar por medio de su gestión; cómo explican sus considerables sueldos en un país donde el 53,5% de los trabajadores chilenos gana menos de $300.000 y el 70% menos de $426.000 líquidos.

Desde el retorno a la democracia, específicamente entre los años 2002 y 2003, nuestros Honorables aumentaron la dieta de los $2.447.017 a los $ 6.334.099, mientras que en el mismo periodo el ingreso mínimo aumentó de $ 105.500 a $ 115.648.

Hoy el sueldo mínimo es de $241.000 mientras que los parlamentarios llegaron a una remuneración de $ 9.121.806, situación que ha sido tomada como ejemplo por organismos internacionales en relación a la falta de equidad que existe en Chile.

Al momento de proponer la disminución de sus sueldos un Diputado hizo un paralelo con los sueldos de los futbolistas, otros tildaron la moción como demagoga y populistas, otros explicaron que una dieta alta hace más difícil la corrupción parlamentaria, otros explicaron que los sueldos llegan a esos montos para competir con los sueldos de la empresa privada, para asegurar la llegada de “los mejores” al Congreso y evitar la fuga hacia el sector privado, lo cual hilando fino, tal vez no sería tan mala idea, siempre y cuando consideren una fuga de carácter masiva.

Por otra parte tampoco deja de llamar la atención las legislaciones “express” donde por arte de magia todos se ponen de acuerdo, argumentando que son necesarias para cuidar la democracia, pero en contraparte no hacen nada concreto frente a las miles de familia que fueron violadas y vulneradas en sus propios hogares por delincuentes que conocen la ley mejor que ellos.

Hoy la ola de robos y asaltos es una prueba contundente que hay personas que no están haciendo su trabajo, hoy los ciudadanos que trabajan de forma honrada son los que deben estar encerrados en sus hogares, son los que no pueden llegar tranquilos a su casa porque les roban el auto en su portón e inclusive con los hijos en su interior. ¿Por qué en vez de estar pensando en el candidato presidencial que los representará el 2017 se concentran en brindarnos seguridad, salud, pensiones dignas y educación de calidad?

Eso demuestra que siguen teniendo cero sintonía con lo que pasa en Chile, hoy se les puede escuchar frecuentemente en sus conferencias de prensa que buscan ser la voz de los ciudadanos y por medio de la presente y en caso que tengan tapones en los oídos, les informo que la gente tiene voz propia y les piden a gritos que simplemente hagan su pega.

La voz de la ciudadanía se expresa día a día en aquellos que deben enfrentar el Transantiago y el Metro; las voz de la ciudadanía está en miles de Pymes que se sienten abusadas por las leyes del mercado; la voz de la ciudadanía la pueden observar en la redes sociales y las voz de la ciudadanía se les representa cuando cada vez son menos los chilenos que concurren a votar.

Por medio de estas líneas y totalmente alejado de cualquier sesgo político les pido a aquellos “Honorables Parlamentarios” que se alejaron de la representación ciudadana y a sus Partidos Políticos,  que paren el “mambo” y que terminen con la fiesta, que legislen en pro de la sociedad y no del beneficio propio; que representen nuestros intereses y no los propios; que se dediquen a fiscalizar partiendo lógicamente por casa y que finalmente nos demuestren a todos los que escribimos este tipo de columnas plenas en histerismo y verborrea, que aún son capaces de dar el ancho y no sólo dar la hora.

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23 jul 2015

El pacto de silencio y la vergüenza militar

Mi abuelo fue militar. Hizo una brillante carrera que lo llevó a representar a Chile en la Sociedad de las Naciones. Fue demócrata y fue uno de los pocos militares leales al gobierno constituido de Arturo Alessandri Palma. Fue exiliado, como su nieto,  y murió y fue enterrado con honores militares en el Cementerio General. Era un hombre riguroso, de una moral sin tachas y no permitía que nadie mintiera o cometiera actos innobles a su alrededor.

Es por eso que nosotros, sus descendientes, fuimos criados con una noción muy clara que asociaba la nobleza de espíritu a la carrera militar. Un militar que robara o que  engañara no cabía en nuestras cabezas. Tampoco era imaginable un militar que actuara en contra de la Constitución y de la ley. Esta idea se derrumbó el 11 de setiembre de 1973.

A partir de esa fecha, cada cierto tiempo, a medida que se conocen nuevos detalles de lo que ocurrió durante la dictadura militar esa idea se hunde todavía más en el abismo de las ilusiones perdidas, hasta no ser hoy día mas que un pálido recuerdo de lo que algún día pudo representar el Ejército de Chile para la ciudadanía.

Las Fuerzas Armadas transformadas en instituciones que acogieron y defendieron a una horda de criminales que existieron en su seno y que fue capaz de cometer las tropelías más repugnantes que se pueda imaginar.

El General en Jefe del Ejército, transformado en dictador por medio de traiciones y engaños, y mintiendo sistemática y descaradamente para amparar a los asesinos y torturadores, él mismo robándose los fondos reservados del Estado con la complicidad de varios miembros del ejército subordinados suyos, él mismo repartiendo las empresas del Estado entre sus parientes, él mismo justificando con mentiras las persecuciones y los atentados a los derechos humanos perpetrados bajo su régimen.

Las Fuerzas Armadas transformadas en el brazo armado de tendencias políticas ultraderechistas pisoteando toda la tradición constitucionalista que tuvo muchos nobles representantes en sus filas. Es decir, el prestigio de estas instituciones arrastrado por el suelo y cada vez más en peligro de perderse definitivamente.

Desde el término de la dictadura hasta ahora ha pasado mucha agua bajo los puentes, pero lamentablemente los gestos que se han hecho de parte de los representantes de las Fuerzas Armadas siempre se han quedado cortos. La bajeza en la que cayeron estas instituciones fue tan grande que lo que se hubiera necesitado para restituir su honor habría requerido acciones mucho más radicales que las que se llevaron a cabo.

El pacto de silencio frente a los atropellos fue mantenido y la entrega de antecedentes a los Tribunales que sin duda las hubiera alejado de los problemas del pasado, limpiando su imagen, fue siempre negada. La justicia militar se transformó en el principal órgano encubridor de estos crímenes.

Por eso, parece injustificable que a pesar de los años, cuando ya todas las justificaciones que se entregaron para intentar explicar estos hechos deleznables se han derrumbado, estas instituciones sigan apareciendo ante la opinión pública como cómplices de ese negro pasado precisamente debido a su completa falta de cooperación con la justicia en los temas de derechos humanos.

Por la actitud de los políticos nacionales que han tenido responsabilidades de Estado frente a estos hechos da la impresión de que las Fuerzas Armadas siguen en cierto modo chantajeando a los poderes institucionales manteniendo una política de encubrimiento que estos no han enfrentado en forma abierta y clara.

Este chantaje apareció en los primeros años de la Concertación en forma abierta, pero no está excluido que hoy día siga en forma encubierta. Si no, no se explica que no se hayan tomado medidas más drásticas para limpiar de una vez por todas esta historia oscura y denigrante.

Que las fuerzas armadas sigan manteniendo y protegiendo el pacto de silencio entre sus filas demuestra que ellas no han avanzado en la conciencia democrática y en el respeto a los derechos humanos que hoy día en el resto de Chile son temas ya asentados como valores ciudadanos indiscutibles.

Que exista esta distancia entre estas instituciones y el país es sin duda algo preocupante y si se desea afirmar nuestra democracia debieran tomarse medidas a la brevedad para terminar con este peligro.

Mi abuelo está muerto. El ejército al que él perteneció también. Las fuerzas armadas coherentes con los nuevos tiempos que se han ido asentando en Chile todavía no han nacido y las que actualmente existen tienen todavía mucho camino que recorrer para recuperar el honor perdido y reencontrarse de nuevo con la mejor parte de su propio pasado que durante todos estos años ha sido vergonzosamente olvidado.

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22 jul 2015

Los graves riesgos del financiamiento de la política

“Quiero ser muy clara: no hay espacio hoy en Chile para que las empresas financien a los partidos políticos”, señaló la Presidenta Bachelet en medio de la polémica por la indicación de Comisión de la Constitución de la Cámara de diputados que busca permitir aportes de empresas a partidos políticos por un máximo de 500 UF, una clara señal que el tema preocupa al Gobierno.

Y como no ser así, si aun es común escuchar que el “financiamiento irregular de la política no es tan grave”,  “que siempre se ha hecho” y que “todos sabían que se hacía…”; si no ¿cómo se iban a financiar las campañas?” Muchos se escudan diciendo, “es que la ley actual es mala”, así que no queda otra forma que hacerlo ilegal.

Las empresas no deberían tener ninguna tendencia política. Es verdad que muchas compañías “tienen dueños o accionistas controladores”, sobre todo en Chile donde muchas nacieron como empresas familiares ligadas a algún partido político, pero la mayoría de las veces son sociedades anónimas, con lo cual entran otro tipo de accionistas minoritarios, en algunos casos, como Penta y en otros casos como SQM, accionistas extranjeros, las AFP, y cualquier persona que desee comprar una acción en la bolsa.

Con el financiamiento de la política se hace una especie de apuesta, se paga o ayuda antes de que la persona sea funcionario público, por lo tanto, no se está pidiendo un “favor” directamente. Pero, ¿qué tan independiente son los políticos que saben que recibieron este favor?

Para ejemplificar claramente lo que ocurre los invito a ver la serie Scandal, en la que el Presidente de Estados Unidos y el equipo que trabajó con él en su proceso de elección apoyado por un gran empresario, una vez que ocupan altos cargos dentro del sistema (jueza, jefe gabinete, Primera Dama, etc.) se ven supeditados a permitir que el “empresario” se pasee y haga lo que quiera en la Casa Blanca. Y no le pueden decir nada…obviamente es ficción, pero más cercana a la realidad local de lo que imaginamos.

El financiamiento de la política, indudablemente genera favores políticos, que son un agradecimiento al aporte económico de las personas, lo que crea una clase política ignorante y determinada por los intereses que representa, lo que termina generando  partidos ineficaces que responden a intereses económicos, por lo tanto se entra en un círculo vicioso del que es muy difícil salir.

Al estudiar la relación entre índices de corrupción y financiamiento de la política están tremendamente ligados; así es como ha empezado todo en nuestros países vecinos donde los empresarios han llegado a manejar diversas esferas de los Gobiernos locales.

En Chile todavía estamos a tiempo, pero hay que actuar ya. Sobre todo creando conciencia en lo grave que puede llegar a ser financiar la política, más allá de crear un marco legal impositivo.

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22 jul 2015

Papa Francisco, te decimos que sí

El querido y recordado Cardenal Raúl Silva Henríquez nos señalaba que el nivel de desarrollo y la economía como ciencia social, debe estar al servicio del hombre y no de los grandes intereses capitalistas quienes solo observan las cifras macroeconómicas y los resultados financieros de sus operaciones productivas y comerciales. El crecimiento no es un mero problema económico, nos recordaba el Cardenal Silva, “sino que se inscribe al interior de un problema ético, de justicia social redistributiva y como un instrumento para resolver la desigualdad social”.

Tanto el Papa Francisco como el Cardenal Silva Henríquez nos instan y nos interpelan para que el mundo social y político, junto a la Iglesia, asuman un rol protagónico en la construcción de una humanidad en que reine la justicia y la paz.

La Iglesia Católica, a través de estos dos grandes pastores, buenos pastores, remueven nuestras conciencias y nos recuerdan con vehemencia que todos nosotros tenemos responsabilidad en la construcción del Reino de Dios a través de la justicia y el amor a los más pobres.

Todos nosotros somos responsables de rescatar “la supremacía del hombre, la inviolabilidad de todos sus derechos, su derecho a la tierra y a la vivienda, su derecho a la educación y a la salud, su derecho al trabajo digno y al descanso, su derecho a sindicarse y agremiarse, su derecho a expresarse e informarse, su derecho a participar responsablemente en las decisiones ciudadanas, su derecho a elegir en conciencia su camino y su fe”, nos enseña el cardenal Raúl.

Y ahora el querido Papa Francisco en la misma línea del Cardenal Silva nos dice que el futuro de la humanidad está fundamentalmente en las manos de los pueblos; en su capacidad de organizarse y también en sus manos que riegan con humildad y convicción el proceso de cambio.

“Los acompaño. Digamos juntos desde el corazón, ninguna familia sin vivienda, ningún campesino sin tierra, ningún trabajador sin derechos, ningún pueblo sin soberanía, ninguna persona sin dignidad, ningún niño sin infancia, ningún joven sin posibilidades, ningún anciano sin una venerable vejez. Sigan con su lucha y, por favor, cuiden mucho a la Madre Tierra. Rezo por ustedes, rezo con ustedes y quiero pedirle a nuestro Padre Dios que los acompañe y los bendiga, que los colme de su amor y los defienda en el camino dándoles abundantemente esa fuerza que nos mantiene en pie: esa fuerza es la esperanza, la esperanza que no defrauda, gracias. Y, por favor, les pido que recen por mí.”

Es admirable constatar la similitud de pensamiento y acción del Cardenal Silva y el Papa Francisco, genuinos representantes de la Iglesia Santa de todos los días.

Junto al Papa Francisco y al Cardenal Raúl Silva Henríquez digamos:

No a una economía de exclusión.

No a la inequidad.

No a la supremacía del dinero.

No a una economía que mata.

No a una economía que destruye la Madre Tierra.

Pero también junto con ellos digamos.

Sí a la encíclica Laudato SI.

Sí a la protección de los pobres.

Sí a la justicia social.

Sí a la colaboración respetuosa con los movimientos sociales y populares.

Sí a una economía al servicio de los pueblos y sus anhelos de justicia y paz.

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22 jul 2015

Sin renuncia

Supongamos que Chile es un país con autoridades de gobierno y con muchas oposiciones. Varios grupos políticos con vocación de poder. Supongamos que ni uno de estos grupos tiene intereses creados en esto de la educación. Que ninguno quiere hacerse del poder para seguir protegiendo el negocio de ellos o de los amigos de ellos.

Supongamos que se puede imaginar algo distinto.

Me voy a dar ese gusto y voy a pensar una manera de dar una solución a este tremendo enredo de la No reforma a la educación. Este engendro frankestiano que ya uno no sabe cómo sigue parado. Donde si no estás en paro estás en paro igual, porque es un paro mental, donde ya ni se esta pensando. Y no voy a poner ni una cita, no voy a hacer mención a ningún experto. Voy a pensar no más. Perdonarán que en general tienda a meterme más en el tema de la educación superior, porque es ahí donde estoy y el tema de la educación secundaria lo conozco menos, pero ese es problema mío, no podría ser problema de la reforma.

Propuesta.

Se acaban ahora, sí ahora, todos los endeudados en la educación superior. Nadie paga ni un peso más a ningún banco, chao, váyanse, aléguenle a quien quieran, se acabó. No existe, adiós. Nadie debe nada, nadie sigue pagando nada. No hay endeudados Corfo, ni fondo solidario ni CAE ni ninguna cuestión inventada. Ah y pedimos perdón, perdón a todos los que pagaron, esto fue el robo del siglo, qué indignante, pero ahora lo haremos bien.

Y la gente sigue estudiando eso sí, no es que se acabe el mundo. No es la anarquía tampoco. Se sigue estudiando en las escuelas y los institutos.

¿Dónde? Donde mismo están estudiando ahora. En los mismos lugares. En colegios, liceos, en universidades e institutos buenos, malos, más o menos, ladrones, menos ladrones, casi no ladrones, grandes, chicos, súper chicos.

Ah no pero tú quieres entregarle un cheque a la gente para que estudie en universidades malas, tú lo que quieres es financiar el sistema privado.¿Qué no te das cuenta que esta reforma es un avance?

No. Yo no quiero que ningún empresario se llene los bolsillos con la plata del Estado pero no por eso voy a quitarle del bolsillo la plata a los estudiantes. ¿Qué hacer? Hacerse cargo del caos que tenemos entre las manos, quedarse con la papa caliente.

Un plazo se me ocurre. Dos años de plazo. ¿No se llenaron la boca con la palabra transición? Hagamos de verdad una transición a un sistema de educación serio, digno.

En esos dos años nos dedicamos a discutir sobre calidad, estándares, a pensar. Porque hay que pensar cosas muy serias, por ejemplo.

¿Cómo cree usted que debe ser la oferta en educación superior? ¿Pocas Universidades, para que estudien los mejores, muchos institutos para que estudien los peores?

¿Qué es ser los mejores? ¿sacar una buena PSU? ¿tener buenas notas en el colegio? ¿para qué sirve la universidad? ¿la educación superior es sólo para los cabros que vienen saliendo del colegio? ¿y los más viejos?

¿La universidad sirve para lo mismo que los institutos? ¿Es decir para tener un título que me permita trabajar? ¿títulos cortos los institutos y títulos largos las universidades? ¿sirve para otra cosa la universidad? (me da un poco de risa, pero ahora que muchas universidades están en paro, en mi familia y varios amigos me han preguntado más de una vez si acaso no estoy de vacaciones ya que los estudiantes están en paro. Ojo con eso, que las Universidades se han transformado en el sentido común en máquinas de hacer profesionales y por ende, los académicos, en docentes de aula, o sea si no estamos en el aula, no hacemos nada.)

Y otras preguntas cada vez más peludas. ¿y si a todos se les ocurre seguir estudios superiores? ¿los vamos a seleccionar cómo? ¿Ah y podríamos  no seleccionarlos? ¿podríamos recibirlos a todos? ¿los académicos están dispuestos a recibirlos a todos?

¿Van a crecer las Universidades estatales para recibirlos a todos o lo vamos a hacer con las privadas también? ¿o no? ¿y el gobierno universitario? ¿cómo se produce la participación en la educación superior? ah ¿y qué relación tiene la educación superior con la educación secundaria? Ah no es que ahí te pusiste muy atadosa, ahora resulta que todo quieres conectarlo con todo, entonces tenemos que resolver el tema de los profes de colegio ahora también.

Claro. O sea pensar la educación superior sin la educación secundaria es como extraño ¿no?

Hay mucho que resolver. Pero se puede resolver. Si uno quiere, claro. Si está dispuesto a asumir los costos.

Plazo y estructura. Una reforma en la que participamos todos. Los profesores, los académicos, los estudiantes, con comisiones (también les gustaban las comisiones a la gente del gobierno) que sacaran propuestas, congresos resolutivos. A lo mejor toda la gente que anda pensando la asamblea constituyente podría ayudarnos, porque  han de saber ustedes que no hay nada más constituyente que el sistema de educación de un país.

Por mientras que no se endeude nadie más. Gratuidad señores, gratuidad ahora, es urgente.

Finalizado ese plazo habrá que tomar decisiones. Decisiones radicales. Subirle el sueldo a todos los profes secundarios, cerrar Universidades, claro que sí. Privadas y públicas privatizadas. Dejar de financiar otras, claro que sí. Hacer crecer otras. Y el compromiso del Estado tendría que ser radical. Ofrecer movilidad a los estudiantes que están en universidades e institutos que se cierran. Son tan buenos, son de tanta calidad los académicos de las buenas universidades, que por supuesto que ellos podrán recibir a esos estudiantes y entregarles una buena formación. Y por supuesto que los estudiantes no se opondrán a tener compañeros de todos lados, porque la educación es para todos, para eso fuimos a marchar.

Y por supuesto que los equipos académicos de las buenas universidades y de los institutos tendrán que sacar a los malos profes que tienen y habrá académicos buenos pudiendo hacer su trabajo en universidades e institutos serios que impartan educación pública, gratuita y de calidad. Por que el estudiante no es de buena o mala calidad. El estudiante es estudiante. Y es la educación superior la que debe entregarle lo mejor.

Ahí se los dejo. Eso es sin renuncia.

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22 jul 2015

Diez argumentos para avanzar en nuestra legislación antitabaco

Chile avanza en materia de legislación antitabaco. Los progresos no han sido fáciles, pues continuamente han sido obstaculizados por la poderosa industria del tabaco; de hecho, British American Tobacco amenazó con cerrar sus instalaciones en Chile en caso de prosperar la última iniciativa legislativa (empaquetado genérico y prohibición de aditivos). Y es entendible, el éxito de su negocio depende de sumar nuevos consumidores, lo más precozmente posible en sus vidas, y mantener cautivos a quienes ya fuman, en lo posible hasta su muerte. Entremedio se sitúan los consumidores, quienes han perdido importantes grados de libertad en su decisión de fumar, por cuanto padecen una poderosa adicción (aunque muchos la nieguen).

Para tener un debate en serio, es indispensable contar con argumentos serios.  En esta oportunidad, quiero compartir 10 argumentos para apoyar todo avance en nuestra legislación antitabaco. Los invito a juzgarlos y formarse una opinión informada sobre este tema.

En Chile, la prevalencia de fumadores actuales en población de 15 y más años es 44,2% en varones y 37,1% en mujeres. Chile es el país con la prevalencia más alta de consumo de tabaco en toda la región de las Américas, tanto a nivel de adultos como en jóvenes, siendo éste un problema de Salud Pública.

En el año 2013, 16.532 muertes fueron atribuibles al consumo de tabaco, representando el 18,5% de todas las muertes (45 muertes diarias). Anualmente 7.881 personas son diagnosticadas de un cáncer provocado por el tabaquismo, siendo el tabaquismo también responsable de 20.191 infartos e internaciones por enfermedad cardíaca.

En escolares chilenos entre 13−15 años, 1 de cada 3 mujeres y 1 de cada 4 varones fuman cigarrillos. A nivel mundial (157 países) las escolares chilenas entre 13−15 años poseen un triste récord: somos el país con el mayor consumo de cigarrillos en el mundo.

Los aditivos introducidos al cigarrillo (ej. mentol) se utilizan para aumentar su apetencia, especialmente entre las personas más jóvenes. La disponibilidad de cigarrillos mentolados aumenta la experimentación y la progresión hacia el hábito tabáquico regular, al igual que aumenta la probabilidad y el grado de adicción en fumadores jóvenes. Más de 100 de 599 aditivos reconocidos poseen acción farmacológica.

El empaquetado genérico ha demostrado: (I) reducir el atractivo de la cajetilla y del producto, haciendo parecer las cajetillas menos atractivas y de menor calidad, y debilitando la identidad positiva del fumador y atributos de personalidad asociados a cajetillas con marca; (II) aumentar la prominencia de las advertencias de salud, en términos de mejorar el recuerdo, seriedad percibida y credibilidad de las advertencias; y (III) reducir la confusión sobre el daño asociado al producto que puede resultar del uso de cajetillas con marca. También se percibe probable que el empaquetado plano tenga un efecto disuasivo en el inicio del hábito tabáquico en jóvenes, y  que aliente a los fumadores actuales a dejar de hacerlo.  

Los fumadores producen humo de tabaco, el cual es inhalado en forma pasiva por terceras personas. Existe evidencia suficiente para inferir una asociación causal entre la exposición al humo de tabaco ajeno y las siguientes enfermedades: cáncer pulmonar en no–fumadores, mayor riesgo de enfermar y morir por patología coronaria, síndrome de muerte súbita del lactante, bajo peso de nacimiento y enfermedades respiratorias bajas en lactantes y niños, entre otras.

El 28% de las embarazadas chilenas fuman durante su embarazo, siendo un factor de riesgo conocido de enfermedad y muerte perinatal. Sus efectos sobre el recién nacido son múltiples, incluyendo un rol en la génesis de bajo peso al nacer, complicaciones respiratorias y muerte súbita del lactante.

El costo directo en el sistema de salud atribuible al tabaquismo es de $1.081.898.801.395 pesos chilenos (2013).

Avances en la norma antitabaco ponen a Chile al día respecto a compromisos adquiridos internacionalmente. El 25 de septiembre de 2003 el país suscribió el Convenio Marco de la Organización Mundial de la Salud para el Control del Tabaco (CMCT), ratificándolo el 13 de junio de 2005. Este tratado establece obligaciones vinculantes a todos los países firmantes.

La libertad de un individuo termina donde comienza la de otro. La legislación antitabaco no impide a las personas fumar: simplemente regula el ejercicio de este derecho, protegiendo la salud de terceras personas. Asimismo, busca desincentivar la adquisición de esta dañina adicción.

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