01 ene 2015

Pensar en Chile

Al comenzar el nuevo año, el reto político que se plantea al gobierno y la oposición es crear condiciones para llevar adelante un diálogo provechoso sobre las principales necesidades del país. Ello supone desembarazarse del espíritu de bando y favorecer aquellas coincidencias que permitan que Chile supere las actuales dificultades económicas y retome la senda del crecimiento.

Los ciudadanos juzgarán la buena voluntad con que actúen tanto las fuerzas gobernantes como las opositoras. A la Presidenta Bachelet le cabe la mayor responsabilidad de propiciar un clima de entendimiento.

Ningún gobierno puede perder de vista que sus propuestas de cambio se hacen siempre en un contexto preciso y que no basta con que estén bien inspiradas, sino que deben conectarse adecuadamente con la realidad, interpretar a la mayoría y tratar de que su concreción no produzca efectos indeseados.

Los fines justicieros deben estar en concordancia con los medios que se proponen. Esa es la exigencia de gobernar una sociedad compleja, en la que, además, se ha extendido el espíritu crítico. A la luz de lo que muestran las encuestas, es evidente que el gobierno debió haber estudiado mejor el alcance de su plan de reformas.

La desaprobación ciudadana no es un detalle. Obliga a La Moneda a actuar con modestia y sentido autocrítico. Solo así podrá arreglar la carga en el camino. Quedan tres años de gestión que deben ser bien aprovechados, lo cual exige acotar la agenda con el fin de no dispersar los esfuerzos ni los recursos. Más vale hacer menos cosas, pero hacerlas bien.

Patricio Melero, diputado de la UDI, declaró el martes 30: “Si ganamos (las elecciones presidenciales), vamos a trabajar en deshacer las reformas que se están llevando adelante”.Esa es la ideología de la retroexcavadora, que lamentablemente parece estar ganando nuevos seguidores. Por ese camino, el país solo puede esperar perjuicios.

Nadie tiene derecho a imponer su criterio a cualquier precio. En democracia, vale por supuesto la regla de la mayoría, pero ni las mayorías ni las minorías están petrificadas. En consecuencia, para que los cambios sean duraderos, lo mejor es que sean el fruto de grandes acuerdos.

Hay que impedir que el clima político se degrade por efectos de la soberbia, la intolerancia y el espíritu dogmático. Para ello, es esencial que todos los líderes políticos trasciendan el partidismo y procuren actuar con sentido nacional, lo cual supone potenciar lo mucho bueno que el país ha logrado en el último cuarto de siglo. El país puede generar una corriente constructiva, que articule los aportes de todos los sectores para mejorar lo que tenemos.

Nuestras posibilidades de progreso dependen de que la política se vuelva respetable a los ojos de la mayoría. Los partidos necesitan renovarse profundamente para superar el descrédito que pesa sobre ellos. Tienen que hacerse cargo de los vicios que los han desprestigiado: el clientelismo, el tráfico de influencias, el caciquismo, etc.

Nunca estuvo Chile tan cerca de alcanzar el desarrollo. Sin embargo, si hace opciones equivocadas, se frustrará tal posibilidad. Esto impone la exigencia de no perder el horizonte. Se describe a veces al Estado como si fuera una entelequia que representa el bien. Y sucede que el Estado puede ser tanto protector como opresor. No debe desdeñarse incluso la posibilidad de que sea capturado por grupos dispuestos a hacer “negocios privados”. Hay que impedirlo, y asegurar que los recursos públicos se usen correctamente.

Para que Chile tenga una mejor democracia, hay que poner altas exigencias a la función pública.Y esto demanda una sociedad civil vigorosa, ciudadanos informados, una prensa que investigue y no se deje manipular, cumplimiento riguroso de las normas de transparencia.

Es valioso que tengamos una sociedad abierta, en la que pueden expresarse todos los sectores con plena libertad. Gracias a las tecnologías de la información, cada día son más numerosas las personan que opinan, juzgan y critican. Está a la vista que hoy circulan muy rápido los puntos de vista, pero también los prejuicios y las odiosidades. Tenemos que cuidar nuestra convivencia.

El país reclama leyes bien hechas. Pero no todo se reduce a elaborar nuevas leyes. Se trata de conseguir mejoras tangibles en la calidad de vida de la población, sobre todo de los sectores más vulnerables. Tenemos que derrotar definitivamente la pobreza y las condiciones precarias en que todavía viven muchos compatriotas. Hay que alentar el esfuerzo que hacen los sectores medios emergentes por consolidar sus propios logros. El país debe apoyar a los miles de emprendedores.

El gobierno necesita despejar los factores de incertidumbre, el más serio de los cuales se refiere a la Constitución. No tiene sentido mantener indefinidamente un signo de interrogación acerca de los principios del Estado de Derecho. Si el país requiere reglas claras en la economía y la educación, con cuánta mayor razón las necesita respecto de las bases de la gobernabilidad y la estabilidad.

Debemos tener muy presente lo aprendido desde 1990, cuando recuperamos la democracia, porque desde entonces nuestro país avanzó como nunca antes. Se trata de no olvidar que lo conseguimos gracias a la convergencia de las fuerzas del mercado y las fuerzas del Estado en una fructífera estrategia de progreso, la del crecimiento con equidad. Queda mucho por hacer, pero es clave construir sobre lo construido.

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31 dic 2014

Diplomacia reservada, USA – Cuba

Como un golpe a la cátedra podríamos definir el anuncio simultáneo efectuado por los Presidentes Barack Obama y Raúl Castro en su intento por normalizar las relaciones diplomáticas entre ambos Gobiernos, luego de más de 53 años de su ruptura, el pasado 17 de diciembre.

Cabe indicar además que este acercamiento fue patrocinado y apoyado por la Secretaría del Estado Vaticano y la Cancillería canadiense, instituciones que cooperaron en forma paciente y reservada con esta iniciativa.

Desde un punto de vista histórico, la decisión del mandatario norteamericano nos recuerda las de los Ex Presidentes Richard Nixon y su homólogo de China en los años setenta; la de “Jimmy” Carter y sus pares de Egipto e Israel (Acuerdo de Camp Davis) y la de Ronald Reagan y el ex Presidente de la URSS, Mijail Gorbachov.

Todos estos acercamientos se caracterizaron por el deseo de provocar, en dicho momento, un cambio de paradigma o modelo en la política exterior americana.

Con esta normalización de relaciones americano-cubanas, ¿estaremos en presencia de una Segunda Caída del Muro de Berlín, cuyo aniversario recientemente celebramos? Dejemos que transcurra el tiempo para responder esta interrogante, ya que este proceso de acercamiento recién se ha iniciado, formalmente.

Con todo, una de las lecciones aprendidas es la vigencia de la denominada diplomacia reservada, como un mecanismo para propiciar y restaurar las relaciones bilaterales entre los Gobiernos.

Esta diplomacia reservada -con resultados concretos en este caso- , es distinta de aquella diseñada y ejecutada por la “Vieja Diplomacia” conocida como la diplomacia secreta, ya que esta última fue censurada y proscrita con el fin de la Primera Guerra Mundial. Sugiero a los interesados en esta materia lean “La Diplomacia” de Sir Harold Nicolson.

En consecuencia, más allá de la retórica o anuncios oficiales, en necesario comprender que la Política Exterior de los países es un asunto serio y complicado, y que en ocasiones se requiere especial precisión, mesura, paciencia y reserva, por estar comprometidos los intereses permanentes del Estado. 

Finalmente, el propio Papa Francisco celebró el resultado de las negociaciones como también, elogió a la función diplomática como tal, hecho que debe ponderarse y analizarse debidamente, pues esta actividad o profesión no es cabalmente comprendida ni menos valorada por la opinión pública.

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31 dic 2014

El chancho está mal pelado

Tres reformas fundamentales para tratar de mejorar la distribución del ingreso y de la riqueza, ha impulsado este 2014 el gobierno de la Presidenta Bachelet : que paguen más los que ganan más fue el objetivo de la reforma tributaria, no al lucro, al copago y la selección y el refuerzo de la educación pública es el horizonte de la reforma de la educación y por último, fortalecer la legislación pro trabajadores es lo que busca la reforma laboral.

La derecha, convencida que la dictadura había dejado suficientemente amarrado el modelo económico más extremadamente neoliberal del orbe (no hay otro parecido en ningún otro país) y a una política que sólo ponía esfuerzo en cambiar sólo aquello que no generara mucho ruido, ha reaccionado con total histeria ante estos cambios ahora sí modificadores  del fondo de la economía pinochetista.

Campañas tergiversando los objetivos, mintiendo respecto a los proyectos, proclamando el apocalipsis como antaño, han vuelto a ser su comportamiento habitual. No es extraño, cuando se tocan el bolsillo y los privilegios no se puede esperar recibir caricias de quienes son perjudicados.

En la coalición de gobierno,  que debiera tener una enorme coincidencia respecto a la urgencia de mejorar la situación del 80% de las personas, y que debiera tener unanimidad respecto a la pésima distribución del ingreso y la riqueza, no ha existido tal cohesión.

En las dos primeras reformas señaladas, sectores de la Democracia Cristiana se han alineado con el modelo neoliberal y bajo pretexto de defender la libertad  (paradigma de la derecha) y a una difusa clase media, se han opuesto toda clase de argumentos, la mayoría muy poco demócrata cristianos para atenuar y en varios casos impedir los cambios que los proyectos prometían.

Hemos descubierto una alianza de la Política y el dinero que ya no es patrimonio de los sectores neoliberales de derecha como fue tradicional en este país, sino que ha permeado el centro político. La defensa de intereses económicos propios se ha hecho manifiesta en el caso de los sostenedores y la reforma educacional, como también lo fue con el FUT y  el aumento de los impuestos directos.

A pesar de todo las reformas han continuado su desarrollo y pondrán término esperamos, a importantes fundamentos del modelo de la dictadura.

La reforma laboral, nuevamente es una oportunidad para mostrar una coalición unida ante una serie de cambios que no avanzan más allá de recuperar varios de los instrumentos que cercenó el régimen militar y que equilibran  adecuadamente las relaciones de empresarios y trabajadores, durante tantos años tan desequilibrada.

Quedan aún un conjunto de reformas pendientes, salud, previsión y las reformas políticas habrá que asumirlas en el futuro, por lo tanto no hay tiempo para descansos, la tarea aún está inconclusa, aunque puede mostrar avances significativos. Aún el chancho seguirá mal pelado.

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31 dic 2014

En 2015: si queremos, podemos

Se cierra un ciclo de nuestras vidas como personas, como país. Como sociedad. Esta medianoche  se abren las puertas al 2015, en pleno siglo XXI.

Como institución, la Compañía Chilena de Comunicaciones fue creciendo en los últimos años.Además de Radio Cooperativa, se sumó Radio Universo y el  diario electrónico www.cooperativa.cl , el sitio noticioso de Chile.

El 2014 que dejamos atrás nos impulsó a buscar un nuevo hogar, en un moderno edificio remodelado de 5 pisos en el corazón del barrio Yungay. Con equipo a la vanguardia electrónica y la última generación informática para el manejo de nuestros programas, un grupo humano de excelencia, altos estándares profesionales, fuimos recibidos con los brazos abiertos, por una comunidad santiaguina que mira el futuro con esperanzas, donde hay historia, donde hay futuro.

Así 2015 nos platea nuevos desafíos con crecimiento y desarrollo de creatividad y talento para servir a Chile y los chilenos.

El año que despedimos fue tremendamente noticioso.

El fallo de la Haya  a raíz de la demanda peruana.

Los Sudamericanos en Chile.

En marzo desapareció un avión malasio con 239 personas a bordo, del que aún nada se sabe.

En marzo murió Armando Navarrete, Mandolino y fue el terremoto que afectó la zona entre Arica y Antofagasta. Lollapaluza reunió a 150 mil personas.

Abril estuvo marcado por la trigésima estrella de Colo Colo y la tragedia en los cerros de Valparaíso con un dantesco incendio. Hubo  15 muertos, 2.500 casas destruidas y 11.000 damnificados.

Fue en el cuarto mes del año que muere Gabriel García Márquez;  Juan XXIII y Juan Pablo II son proclamados santos.

Ya en junio el presidente Santos es reelegido en Colombia y Chile vence a España en la Copa del Mundo, en Brasil. Clasifica a octavos de final.

En julio los alemanes se llevan la Copa del Mundo.

En agosto, la violencia sigue latente en la Franja de Gaza en el Medio Oriente y en Estados Unidos, la policía de Missouri asesina a un joven afroamericano.

Estamos en septiembre el mes de la patria con 4 días de asueto. Es el mes del homenaje de Chile a su poeta Nicanor Parra, que cumple 100 años.

El cantante Gustavo Ceratti, muere después de 48 meses en estado de coma.

Un atentado terrorista en el subcentro Escuela Militar genera inquietud y polémica.

La Presidenta Michelle Bachelet, promulgó la Ley de Tránsito conocida como “Ley Emilia” que endurece las penas para los conductores ebrios y que estará vigente durante las fiestas.

El secuestro de 43 futuros profesores mexicanos enciende las alarmas mundiales, ante la sospecha de un crimen masivo.

En el noveno mes  la Presidenta Michelle Bachelet promulgó la reforma tributaria, después de una pugna de intereses en intenso debate.

En septiembre estalla el escándalo del caso Penta que involucró al grupo con la UDI  y Andrés Velasco.

Ya estamos en octubre cuando  el Sínodo de obispos en Roma aprobó el documento final que propone una acogida a homosexuales y divorciados.

El Ex alcalde de Providencia, Cristián Labbé, es detenido por casos de DD.HH. y en Brasil la Presidenta Dilma Roussef es reelecta mandataria de 200 millones de habitantes.

Ya en noviembre la escritora Isabel Allende recibe la medalla de la libertad de manos del Presidente Obama. Fallece el actor y guionista mexicano Roberto Gómez Bolaños y la Teletón supera la meta con el apoyo de la gran mayoría de los chilenos.

Noviembre es el mes de condena para un cura pedófilo: el sacerdote Legionario de Cristo,  John O’Reilly es declarado culpable de abusar sexualmente de una menor alumna de la escuela de la cual era director espiritual mientras la niña tenía entre 4 y 6 años.

El veredicto, dado a conocer en octubre, fue un balde de agua fría no sólo para su congregación, sino para muchos de los principales empresarios y políticos chilenos, de quienes O’Reilly se había convertido en guía espiritual y amigo. La sentencia, cuatro años y un día de presidio menor en su grado máximo, con el beneficio de libertad vigilada.

Y en el último mes del año, la Universidad de Chile, se adueña de la estrella 17 en el fútbol profesional.

Nuevas grabaciones se conocen en el caso Penta, un escándalo de defraudación al fisco que la justicia seguirá investigando el 2015.

Estados Unidos se abre a una nueva etapa en la relaciones con Cuba, en lo que se considera el último fleco de la Guerra Fría.

Y después de 77 capítulos se despidió de las pantallas de televisión la exitosa serie de televisión Los 80.

La absolución de Martín Larraín por atropellar y dar muerte a Hernán Canales y darse a la fuga, desata polémica en la redes sociales, donde se cuestiona a la justicia.

Cerrando el año, miles de jóvenes revisan los resultados en la PSU y se matriculan en la educación superior.

Y en el penúltimo día de 2014 la ministra de Salud, irrumpe en la Segunda, con sus declaraciones sobre el aborto, que provocan su renuncia al cargo.

2014 fue un año intenso ya que a partir de marzo, con la asunción de la presidenta Michelle Bachelet, se inició una serie de reformas incluidas en su programa de gobierno y comprometidas con el país.

Aquellos que pretenden centrar el año en unas cuantas frases se inscriben en el marketing político y abandonan el sentido del periodismo de calidad.

Los que pronuncian frases rimbombantes se transforman en mercancía, sin quererlo. Retroexcavadoras, políticos que hacen fila, sin identificar a nadie en particular y otros terminachos, distorsionan el sentido de la política responsable. Frasesitas hay muchas en 2014 y que traicionan el sentido del leguaje.

Heidegger decía que “la palabra es la morada del ser”. Cuando se hace mal uso del lenguaje y se pierde la preocupación por la palabra, se afecta lo más interno del ser y repercute negativamente en la sociedad.

Este instrumento mágico que es la palabra, merece mejor trato especialmente de los que ostentan el poder de hablar en público y sobre todo los que tienen mandato ciudadano.

Entender la responsabilidad social como un compromiso ha sido nuestra tarea permanente como radio Cooperativa. Arrancar del rumor y la conjetura, debería ser la máxima para un periodismo de calidad.

Y  la responsabilidad debe ir de la mano de la claridad en torno a que se quiere hacer en 2015.

La excelencia en la entrega informativa, es algo que los chilenos valoran. Por eso el liderazgo sostenido que nos dan los habitantes de este país, que cada día trabajan por un Chile mejor.

2015, está a la vuelta de la esquina. Queremos que cada palabra de buenaventura, la sintamos en lo más profundo de nuestros corazones. Que pensemos en los demás, que pensemos que podemos hacer por los demás más allá de nuestros prejuicios y egoísmo. Somos criaturas pensantes y si queremos, podemos.

Cada chileno y chilena, palpita en nuestras mentes. Con los mejores augurios, seguiremos trabajando para ti, para ti y para ti, para los miles que nos siguen, porque queremos a Chile, porque somos parte de Chile.

Un abrazo fraterno del equipo humano y técnico de Radio Cooperativa, la emisora más importante del país. Usted y tú lo dicen. Nosotros lo asumimos como un deber para un periodismo responsable y de calidad. Felices fiestas audiencia desde el norte grande hasta la región antártica. Chilenos a través del mundo. Hasta la vista.

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30 dic 2014

Por un 2015 de Paz mundial

Se va el año 2014 y debemos hacer un balance de lo bueno y lo malo. Para todos aquellos que luchamos por la inclusión y la tolerancia, en todas sus formas, este fue un año negro.

Este año  nos han sorprendido los fundamentalistas como Al Qaeda, el Estado Islámico, Boko Haram y otros, nos sorprenden con sus prácticas de persecuciones religiosas, matanzas, asesinatos,  decapitaciones, crímenes y torturas, hechos que nosotros no podemos seguir permitiendo. Sólo se ha recalcado lo ocurrido en más de 50 días de conflicto en Medi Oriente.

En esta especie de renovación de intenciones y deseos que es el Año Nuevo, deseáramos no enfrentar NUNCA MÁS situaciones tan violentas como éstas. Y no sólo quisiéramos  dejar atrás la tremenda herida de Medio Oriente, también que México deje de sangrar, que Colombia respire paz, que Venezuela encuentre acuerdos, y así, una larga lista de tareas pendientes que sería bueno resolver de una vez y no heredar un mundo lleno de rabia y donde otras generaciones -lejanas a esta parte de la historia- tengan que hacerse cargo de este capítulo triste.

Hoy tenemos una nueva oportunidad. La invitación es a unirnos y trabajar no sólo para luchar contra el antisemitismo, sino que para construir y aportar juntos a nuestra sociedad, porque una de nuestras fortalezas es precisamente la diversidad, el diálogo, la discusión, el entendimiento, y el respeto mutuo por sobre todo.

Tal como lo hicieron los primeros inmigrantes que llegaron a nuestro país, también nosotros nos ponemos a disposición para el intercambio de ideas, de buenas prácticas, y de trabajo en conjunto para hacer de nuestro Chile un lugar más pluralista, más inclusivo e igualitario, donde se respete y valore  la diversidad, para que con  este enfoque construyamos un país  más justo, solidario, y con más oportunidades para todos los chilenos. Ese es el único camino para vivir en paz.

Feliz Año 2015

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30 dic 2014

Ministerio de la Mujer y la equidad de género

Nuestro país ha venido dando pasos sostenidos, aunque aún insuficientes, para conseguir la igualdad de género y con ello la plena inserción de la mujer en todos los ámbitos de nuestra sociedad.

En lo institucional, un hito sustantivo lo representó la creación, en el Gobierno del Presidente Patricio Aylwin, recién recuperada la democracia, del Servicio Nacional de la Mujer, entidad a cuya titular se le confirió rango de Ministra de Estado y que buscó dar a estas temáticas mayor visibilidad y un tratamiento especializado.

Durante las décadas transcurridas, el SERNAM ha tenido importantes logros, tanto en materia legislativa, como en lo social y cultural, destacando por su permanente labor en contra de la violencia intrafamiliar y la búsqueda de transversalidad en las políticas a favor de la mujer.

Sin embargo, resta mucho por hacer. Las mujeres todavía son postergadas en muchos ámbitos y deben enfrentar poderosas barreras económicas, sociales y especialmente culturales.

La discriminación persiste en diversas materias, como la salud, donde se castiga la maternidad haciendo recaer su mayor costo y riesgo sólo en las mujeres. En el trabajo, donde subsiste la odiosa diferencia de remuneraciones entre mujeres y hombres que realizan labores semejantes.

Es necesario terminar con estas prácticas y fomentar políticas que apunten a potenciar las condiciones de desarrollo de la mujer, mejorando la capacitación laboral, abriendo espacios a emprendedoras y generando, paralelamente, mecanismos de apoyo a la maternidad y la crianza, como la creación de nuevas salas cuna.

Lo anterior no se agota allí. Debemos seguir empujando cambios en la normativa civil y familiar donde existen aún deficiencias graves como en materia de cobertura y apoyo a las víctimas de violencia intrafamiliar, agilización y control de medidas cautelares y los obstáculos a la administración de los bienes de la mujer casada en sociedad conyugal.

También es urgente continuar impulsando un cambio cultural que avance en la erradicación de roles distintivos y estereotipos y procure, en cambio, una coparticipación de la pareja en las obligaciones derivadas del hogar y de la crianza de los hijos. En este punto, es imperativo fortalecer el apoyo a las mujeres jefas de familia que conforman buena parte de los hogares chilenos.

El Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet contempla, con este objeto, la creación de un nuevo ministerio de la Mujer y la Equidad de Género, cuya finalidad esencial será proponer políticas, normas, planes y programas orientados a la equidad de género, a la igualdad de derechos y a procurar eliminar toda forma de discriminación contra las mujeres, coordinarlos y velar por su implementación, a fin de garantizar el cumplimiento de sus objetivos y evaluar su aplicación transversal en la actuación del Estado.

El eje de ese trabajo será un Plan Nacional de Igualdad y se dispondrá de un Comité Interministerial a cargo de su coordinación. El actual SERNAM seguirá existiendo, pero asumirá un rol más concreto, en la implementación de estos programas y políticas.

La creación de este Ministerio acaba de ser aprobada en general por el Senado.Esperamos que en las próximas semanas concluya su trámite.

Se trata de una exigencia para un país que garantiza el derecho de cada mujer a desarrollarse y elegir su proyecto de vida y que comprende, además, que ello es una variable esencial para contar con un país moderno, pujante e inclusivo.

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30 dic 2014

La noticia del 2014: normalización de las relaciones Cuba-EEUU y el comienzo del fin del embargo

Pocos saben que los estadounidenses de la llamada “Sección de Intereses” de La Habana enfrentan un doble aro de restricciones provocadas por su propio país. Primero, les estaría vedado poder viajar a Cuba de no ser por su calidad de diplomáticos estadounidenses. Con ese tema ya resuelto, caen en otro perímetro de prohibición: no pueden abandonar el casco urbano de la capital cubana sin autorización del gobierno de la isla.

Es decir, el paraíso bellísimo de Varadero está a varias horas de peticiones justificadas de esos funcionarios y el criterio del gobierno de Cuba. ¿Qué otra justificación puede haber sino simplemente rogar por un fin de semana de regocijo de la vida en las olas de Varadero?

Dejar a esos funcionarios con el castigo de la ausencia de arenas blancas y el disfrute de la compañía siempre bienvenida de la cubanía y sus cubanos refleja, sin embargo, la añosa ley de reciprocidad que gobierna los gestos políticos diplomáticos.

Todo comenzó con la orden un tanto no placentera ni elegante del presidente Bush (el hijo, aunque adjudicárselo al padre es un poco lo mismo) de no permitir a los diplomáticos cubanos de la Sección de Intereses de Washington DC traspasar el límite geográfico que marca la carretera 495, un aro concreto, cual muro berlinés en plena capital de Estados Unidos, que circunvala más o menos el Distrito de Columbia. Claro que no es lo mismo perderse las aguas tibias del Caribe cubano que las aguas frías de la Bahía de Chesapeake.

Este hecho, de juego de restricciones mutuas, que quedarán pronto quizás para la historia como parte de un anecdotario curioso o ridículo de pueblos a solo 90 millas de vuelo, representa el estado de relaciones sui generis entre la potencia del norte y la isla revolucionaria.

Lo fundamental: el anuncio histórico del presidente Obama este reciente 17 de diciembre marca en rigor no un cambio de política de Estados Unidos hacia Cuba, sino más bien el reconocimiento obligado de parte de Washington de las circunstancias reales de la situación de esas relaciones.

Lo más importante, viene a reconocer la normalidad de Cuba frente al planeta, solo negada a ser vista por Washington debido a las anteojeras ideológicas del anticastrismo acérrimo de los pasillos políticos de DC y Florida, cada vez más aislados en su posición contra la integración.

Reconocer lo ya existente

Por ejemplo, está el tema del anuncio del presidente Obama sobre la reanudación de relaciones diplomáticas. Pero hay que aclarar que siempre han existido representaciones diplomáticas en La Habana y Washington, con sus respectivas edificaciones, enormes.

Aunque, claro, el sinsabor y sinsentido de la guerra fría las hizo llamarse “secciones de intereses” y no “embajadas”, simulando estar bajo el protectorado de Suiza. Pero ambas representaciones, sus inmuebles y personal, están ubicados en el respeto geográfico que marca la diplomacia, es decir, gozan de inviolabilidad y son un rezago de soberanía en sus respectivos países, como es el caso de todas las embajadas del mundo.

Ambas embajadas (es decir, “secciones de intereses”), pertenecen a sus respectivos países, no a Suiza, como mucha gente cree. Ambas naciones han estado conviviendo de esa forma eufemística “sin relaciones diplomáticas”, nombrando embajadores (que no se llaman embajadores en el papel frío), realizando trámites consulares cotidianos (sí, se llaman “consulados”), cobrando en dólares o en pesos cubanos a los respectivos nacionales de uno u otro país, emitiendo visas de viaje de todo tipo, y un largo etcétera de cotidianeidad.

Es decir, gerenciando de forma más o menos expedita todo lo que implica una frontera compartida (en este caso, marítima y aérea, a un paso de distancia entre ambas costas). El anuncio de Obama de “iniciar conversaciones para reanudar las relaciones diplomáticas y establecer embajadas mutuas” es, en ese sentido, simplemente el anuncio público de una dinámica de facto que ha matizado por décadas las relaciones entre ambos países.

Obama también anunció la eliminación de Cuba de la lista de países que apoyan el terrorismo.En este punto no hay casi nada que comentar, pues la integración a esa lista de forma unilateral de parte de Estados Unidos es un completo absurdo político, con un criterio puramente ideológico.

Ya lo sabe el propio gobierno de Estados Unidos, que puso al Iraq de Sadam Hussein en la lista en los setenta, para sacarlo luego en los ochenta cuando el mismo Iraq fue útil contra la revolución iraní.

O cuando puso a la Libia de Kadafi en la lista para sacarla posteriormente bajo el gobierno de Bush cuando se convirtió en “aliado” de Estados Unidos. Asimismo, Obama ha ampliado los viajes de cubano-estadounidenses a la isla, y estrechó la mano de uno de los pocos presidentes a nivel mundial que estuvieron invitados al funeral de Mandela: Raúl Castro.

Cuesta pensar que Obama quiera ampliar los viajes de cubano-estadounidenses a una isla “que apoya el terrorismo”, o que la presidencia de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños,CELAC, sea transferida desde el derechista Piñera a Raúl Castro, presidente de Cuba, “país que apoya el terrorismo” según Estados Unidos.

O que EEUU apoye las históricas conversaciones de paz entre Colombia y las FARC en suelo cubano, que sirve de anfitrión y veedor del proceso de reconciliación junto a Noruega, Chile y Venezuela. Incluir a Cuba en esa lista unilateral que confecciona Estados Unidos era claramente una aberración de diplomacia internacional que Obama simplemente cumple con resolver definitivamente.

Obama le habló al pueblo estadounidense

Otro factor para el análisis. Obama pareció en su discurso marcar una nueva apertura de Cuba hacia el mundo. Pero esto es solo ilusorio, el embargo ha sido condenado de forma casi unánime por todo el planeta (solo el propio EEUU e Israel votaron a favor este 2014, es decir, 2 votos contra 188 países en contra) y Cuba ha mantenido relaciones normales, comerciales, turísticas, deportivas, médicas, políticas,  de forma normal con el orbe, excepto en lo concerniente a los efectos del embargo contra empresas que tienen intereses estadounidenses.

En ese sentido, el discurso del presidente de EEUU debe entenderse como un discurso interno, dirigido a la sociedad estadounidense. En varios pasajes le habló directamente al anticastrismo, y de forma más amplia, al pueblo estadounidense. O más exactamente a un tercio de la población.

En efecto, según un gran abanico de sondeos, aproximadamente 3 de 4 estadounidenses considera el embargo ineficiente y una política fracasada, y una cifra similar está de acuerdo con iniciar relaciones diplomáticas formales con la isla.

Incluso en Florida, bastión fundamental del anticastrismo, donde se ha refugiado con completa impunidad el connotado terrorista internacional Luis Posada Carriles, hay una clara división generacional y de posiciones respecto al embargo y la política general de EEUU hacia Cuba.

La Universidad Internacional de Florida ha hecho varias investigaciones respecto a este tema, y la conclusión es clara: pese a que el porcentaje de cubanos que salieron de Cuba como efecto directo del triunfo revolucionario de 1959 aún mantiene sus posiciones inclaudicables, las nuevas generaciones de forma mayoritaria están de acuerdo con cambiar la política hacia la isla.

En 1991, un 87% de los cubano-estadounidenses de Miami-Dade apoyaba el embargo. En 1997, ese respaldo bajó al 78%. Luego, en 2004 a 66%. En 2011, ya iba en 56% y este 2014 llegó por primera vez por debajo de la cifra de apoyo. Es decir, 48% apoya el embargo, 52% lo rechaza.

Asimismo, como claramente mostró la prensa, ante el anuncio de apertura de Obama, un pequeño grupo de cubanos de mayor edad se reunió en el restaurante Versailles, antiguo enclave de protestas multitudinarias, para expresar su desazón con las medidas. Claramente, Obama simplemente ha representado la realidad concreta del cambio de opinión de los estadounidenses en este tema.

Cuba, a la Cumbre de las Américas

Cuba está integrada al mundo. Como lo señaló el propio Obama, colocándose el parche antes de la herida, Cuba y Estados unidos se sentarán en la mesa continental de presidentes en la Cumbre de las Américas en Panamá en 2015. El país anfitrión recibió presiones de todo tipo para retirar la invitación a la isla.

Pero desde antes de que la OEA en 2009 cancelara la suspensión que sufrió Cuba desde 1962 en esa organización, la isla ha participado activamente en todas las instancias de integración latinoamericana creadas a partir del bolivarianismo venezolano, incluido el Grupo de Río, UNASUR, y ahora la más consolidada CELAC, en la que el presidente Raúl Castro ocupó recientemente la Presidencia como señalamos con anterioridad.

Cuba nunca ha dejado de pertenecer al alma e ideario latinoamericano, pese al embargo. Lo mismo ocurre con Puerto Rico, que pese a su carácter de protectorado de Estados Unidos, nunca ha dejado de ser parte de la familia latinoamericana cuando se le mira desde el sur.

En ese sentido, EEUU se ha visto obligado a reconocer esa integración plena, y a escuchar a decenas de asesores “latinoamericanistas” que insistían en que la mejor forma de acercarse al continente luego de varios años de desinterés por reforzar lazos, era dar gestos concretos de eliminación del embargo. De ahí la gran celebración que se dio a la medida en boca de todos los gobiernos latinoamericanos, la ONU, el Vaticano y otras organizaciones relevantes.

Fin del embargo: el interés comercial

La neutralización a través de medidas ejecutivas del embargo también refleja la presión que en EEUU ejerce hace años la clase financiera, bancaria, petrolera, agropecuaria y de servicios contra el gobierno estadounidense.

La Cámara de Comercio ha organizado visitas a la isla, como también el Consejo de las Américas (Council of the Americas), que representa los intereses de cientos de empresas de todo el continente, organización con sede central en Estados Unidos. El Council of the Americas fue quien organizó hace pocos meses la firma de una carta pública de decenas de personalidades políticas, de derecha y progresistas, contra el embargo, y ha escrito varios artículos contra el bloqueo estadounidense a la isla.

Por supuesto, es obvio que las empresas estadounidenses no apoyan terminar el embargo necesariamente para aliviar el efecto nefasto en el pueblo cubano o enmarcarse dentro de la justicia del derecho internacional, sino en el más puro interés comercial. Muchas empresas estadounidenses no entienden por qué el gobierno que lucha por la “libertad” en todas sus formas, incluso a través de la acción militar en terceras naciones, no deja que sus inversiones sean libres de traspasar unas pocas millas del Mar Caribe.

Cuba y sus reformas económicas profundas

La pregunta clave antes del anuncio de Obama fue ¿qué da más ventaja política para quienes desean cambios políticos en Cuba? La balanza a favor del embargo para estos fines, tuvo siempre una fuerza mayor hasta que, ya consabidas hace años la ineficacia de esas medidas, surgen ahora a raíz del proceso de apertura económica de la isla.

Esa oportunidad, que no había existido en el pasado, provocó una avalancha de análisis en las unidades internas del gobierno, los think tanks y el Congreso, aunque en público la administración de Obama continuó calificando las profundas reformas como “insuficientes”. Sin embargo, en los pasillos de Washington uno podía escuchar directamente a quienes tuvieran contacto directo con la Presidencia reconocer que el embargo ya no tenía ningún sentido.

Luego vino Hillary Clinton a revelar en su autobiografía su recomendación directa a Obama sobre el fin del embargo, saliendo ya de su puesto de canciller.

En ese sentido, suavizar el embargo tiene un doble filo: permite reforzar y acelerar los cambios económicos en la isla para a) potenciar el área de iniciativa privada e inversión extranjera que viene implementando el liderazgo de Raúl Castro desde noviembre de 2010 cuando dio a conocer su “Proyecto de Lineamientos de la Política Económica y Social”, y b) al mismo tiempo deja expuesta a la isla a la influencia desbordante que puede tener la economía capitalista más grande del planeta, a vuelo de pájaro de cientos de miles de contenedores llenos de manufacturas, cientos de miles de turistas estadounidenses, cientos de millones de dólares.

Por ello, durante la primera etapa de reformas decididas en Cuba para agilizar la economía y aumentar el papel de la iniciativa privada para los cubanos que viven en la isla, el embargo fue muy funcional al crear una barrera a la influencia desequilibrante que puede implicar Estados Unidos en la economía interna.

En ese sentido, el timing es perfecto para Cuba, considerando que las medidas por decreto para suavizar el embargo tomarán incluso más meses, y la eliminación por acción legislativa seguramente años (Obama enfrenta un Congreso hostil controlado completamente por el Partido Republicano), el país podrá aún mantener control de las reformas a un paso más moderado que permita ir haciendo ajustes que no provoquen externalidades indeseables.

Entre ellos una diferencia abismante del ingreso entre los cubanos, distorsiones en el proceso de cambio gradual a una moneda única (en este momento, existen dos monedas paralelas con distinto poder de compra), inflación por una hipotética invasión de dólares ante la aún baja oferta de productos manufacturados, la “invasión” instantánea de cientos de miles de turistas estadounidenses ansiosos de visitar la “exótica Cuba revolucionaria” y disfrutar playas, ron y habanos, etc.

Por consiguiente, los republicanos anti-castristas y su embargo le han hecho en rigor un favor a las reformas económicas cubanas, al crear un manto protector que bloqueó a sí mismo a Estados Unidos y su influencia potencialmente desbordante en el ritmo de esos cambios en los últimos cuatro años.

La presión, sin embargo, existe. La Habana bulle de actividad, los negocios privados de pequeña y mediana empresa se multiplican, los cubano-estadounidenses hacen fila en el aeropuerto de Miami con sus carros cargados de electrodomésticos día a día para transportarlos a Cuba, las remesas en dólares llegan a cientos de miles de cubanos cada mes.

La gran cubanía (los periodistas, los intelectuales, los artistas, las enfermeras y doctores, los estudiantes y los viejos funcionarios, el pueblo todo) celebra las reformas, e incluso las querrían a un ritmo aún más acelerado. Pero es una presión interna, de cubano a cubano, no inyectada a presión desde Estados Unidos.

El desafío principal para Cuba, no cabe duda, es cómo generar un mercado más dinámico interno que permita extraer parte del peso subsidiario que soporta el Estado y traspasarlo al sector privado, abrirse más a la inversión extranjera, e incluso permitir la operación comercial de compañías estadounidenses, como han anunciado las medidas de apertura de Obama.

Todo esto, sin afectar las bases morales y políticas de la Revolución Cubana. De especial preocupación son los 3 pilares fundamentales que han mantenido inquebrantable el contrato social entre el pueblo cubano y los líderes históricos de la revolución: el sistema de salud, el sistema educativo (ambos gratuitos y universales), y la soberanía política, moral y geopolítica de Cuba frente a Estados Unidos.

El cómo mantener este equilibrio de fuerzas en esta coyuntura histórica pondrá a prueba a Cuba y sus líderes, nuevos y veteranos, en los próximos años. Si estas reformas económicas repercuten en reformas políticas, no cabe duda que será una decisión que emane de la propia institucionalidad y pueblo cubanos, no desde la presión de Estados Unidos.

Libertad para los Cinco de Cuba y Alan Gross

No hay que olvidar, en toda esta historia, un factor humano importantísimo. Comenzar el fin de la guerra fría (a 20 años de la caída del Muro de Berlín ya esa afirmación es increíblemente extemporánea), los anuncios conjuntos entre Obama y el presidente Raúl Castro dejan un gusto amable dentro del cinismo que puede caracterizar a las relaciones políticas entre países.

Los presidentes acordaron intercambiar prisioneros, liberando Estados Unidos a los agentes cubanos Gerardo Hernández (condenado a dos cadenas perpetuas),  a Antonio Guerrero, sentenciado a 22 años de reclusión, y Ramón Labañino Salazar, a 30 años. Ellos se unieron en Cuba a los ya liberados René González y Fernando González, que ya habían cumplido sus condenas.

A su vez, Cuba otorgó la libertad al agente de USAID Alan Gross, condenado a 15 años por trabajo encubierto de esa agencia estadounidense en la isla, y a otro espía estadounidense, cuya identidad sería la de Rolando Sarraff Trujillo, según varias informaciones de prensa.

Pese a estos gestos de buena voluntad, el proceso no será fácil. El alcalde de Miami ya anunció que se negará a abrir un consulado cubano en esa ciudad, donde vive una gran parte de los 2 millones de cubanos que residen en Estados Unidos.

Además, los republicanos más conservadores del Congreso, entre ellos el derechista Marco Rubio, amenazan con no financiar la embajada anunciada por Obama en La Habana, o a mantener congelado el nombramiento del futuro embajador.

Todas estas medidas serán, sin embargo, solo un gesto político que no logrará frenar lo ya desencadenado a ambos lados de la frontera marítima tras los discursos de Obama y Castro. No hay duda que un gran porcentaje de la cubanía, la castrista y anticastrista, tanto en la isla como en Florida, celebraron con una gran emoción la reanudación de las relaciones diplomáticas y las medidas contra el embargo anunciadas por Obama.

En ese sentido, el futuro disfrute libre y caribeño en Varadero de los funcionarios estadounidenses desde su enclave en pleno malecón de La Habana será un pequeño detalle, aunque placentero, en esta larga historia de sinsentido de pueblos vecinos, unidos (y ya no separados), por solo 90 millas de transparente océano.

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30 dic 2014

Pragmatismo político en favor de la asamblea constituyente

La frase es del tejano Lyndon B. Johnson. La dijo luego de asumir el cargo que quedó vacante en noviembre de 1963 tras el asesinato de quien se mantiene como ejemplo de lo mejor de la política estadounidense, el presidente John F. Kennedy: “Prefiero tenerlo meando desde la carpa hacia fuera que desde fuera hacia dentro”.

Fue su campechana y pragmática respuesta a quien le recomendó despedir al eterno -y peligrosamente bien informado- director del FBI J. Edgar Hoover, según reseñara en 1972 el periodista del New York Times ganador del Pulitzer David Halberstam, en su libro “Los mejores y más brillantes”.

La obra, dicho en sencillo, relata cómo a pesar de reclutar a los intelectuales y académicos más destacados de su generación, por seguir sus consejos Kennedy arrastró a su país a una de las, para ellos, más desastrosas guerras que había enfrentado su país hasta ese momento: Vietnam.

Pongo sobre la mesa esta anécdota para recordar que en política no existen las verdades reveladas. Hay análisis y proyecciones más o menos certeras, es cierto.  Pero solo de tecnocracia inmediata no se construye la sociedad. Se hace mirando el horizonte, también.

La siguiente historia se la escuché a un destacado constitucionalista chileno.

Una de las principales propuestas del programa del ex presidente Barack Obama cuando se postuló en 2008 fue la Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible, conocida en Estados Unidos como Obamacare.  Esta fue aprobada por el Congreso en marzo de 2010 y obliga a todos los estadounidenses a contratar un seguro de salud, con multa en dinero de no hacerlo.

La discusión sobre la constitucionalidad de la ley era clave. Al ser EEUU un Estado federado, la legislatura nacional tiene limitaciones para imponer a sus Estados o ciudadanos determinados comportamientos.  En este caso, comprar un seguro de salud.

Los republicanos confiaban en que la Corte Suprema echaría por tierra el proyecto aprobado por el Congreso, declarándolo inconstitucional.  Cinco de los 9 jueces son conservadores, incluido su presidente John Roberts.Sin embargo y contra todo pronóstico, este magistrado se alineó con los progresistas (demócratas) y respaldó la ley. 

Contradictoriamente, gran parte de su argumentación fue de rechazo al proyecto y en particular a la posibilidad de que el Congreso obligara a los ciudadanos a contratar un seguro.  Pero votó a favor porque lo calificó de impuesto, algo para lo cual los congresistas sí tienen atribuciones.

¿Por qué optó por esta vía, cuando pudo haber desechado la iniciativa sin más?

Aunque hay varias interpretaciones, la revista Forbes explica que una de las consideraciones fue que de rechazar el principal proyecto de ley de Obama habría quedado en evidencia la marcada alineación partidista conservadora de la Corte Suprema.  Y esto habría trasladado la discusión desde el plan de salud hacia el cuestionamiento de la labor del máximo tribunal.  Incluso los demócratas ya estaban reuniendo pruebas para iniciar una batalla político-legal.  Y eso era un gusto que Roberts, como presidente de la Corte Suprema, no se podía dar.

Volvamos a Chile.

Ante las reformas que el gobierno ha anunciado (tributaria, educacional, constitucional y, hoy por hoy, laboral), quienes se oponen amenazan en todo momento con recurrir a esa instancia contra mayoritaria que es el Tribunal Constitucional.  Especial esfuerzo ha puesto en ello el partido celador de la Carta Fundamental de Pinochet que es la Unión Demócrata Independiente.

Y desde la vereda opuesta cunde la molestia por tanto afán bloqueador, inmovilista.Sin embargo, quizás habría que tomar distancia.

Quien de verdad busque  un cambio trascendental, no cosmético, debiera confiar en que los opositores a las reformas mantengan su empeño.  Es  más, que lo refuercen. E incluso que tengan éxito. Que el Tribunal Constitucional les dé la razón y las propuestas de Bachelet no puedan avanzar más allá de lo que permite el corsé que el dictador encajó al país en 1980.  Y que el duopolio remendara en 1989 y 2005.

Así, la discusión de fondo se elevará por sobre las indiscutiblemente necesarias reformas del gobierno y se trasladará a esa cárcel institucional que es la Constitución,  donde su cambio en lo esencial sería parte del debate.  Incluida la posibilidad de una asamblea constituyente, ante la incapacidad del sistema vigente de resolver los baches del modelo de sociedad de mercado.

Si la UDI reflexionara como John Roberts, pensaría dos veces los pasos que da en pro de bloquear a todo evento las reformas de Bachelet.

Esto es parte de la discusión pública que se dará el próximo año, más aún cuando el debate constitucional esté en la mesa producto del cronograma legislativo.  El resultado dependerá de la claridad política no solo de los políticos sino de todos los actores involucrados.  Tanto de los que buscan triunfos cortoplacistas como de los que ponen la vista mucho más allá.

Adiós 2014. Bienvenido 2015.

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29 dic 2014

Libertad de Expresión e Internet, según Orwell 1984

Una moción de la Comisión de Ciencia y Tecnología de la Cámara de Diputados, deja en jaque a los diarios electrónicos, redefiniendo “por secretaría” la categoría de diario, impidiéndoles así, la publicación de todo tipo de información, a través de sus portales Internet. La moción a la Ley N° 19.733, sobre libertad de opinión e información, ya ingresó a primer trámite constitucional (Boletín 9461-19).

De esta forma, se vulnera un derecho constitucional y esencial como “la libertad de expresión y la de informar sin censura previa, en cualquier forma y por cualquier medio, sin perjuicio de responder de los delitos y abusos que se cometan en el ejercicio de estas libertades…”, como reza el artículo 12, capítulo III, de nuestra Carta Fundamental.

¿Acaso no funcionan las instituciones respectivas ante situaciones de injurias o calumnias, que debe optarse por generar prohibiciones en Internet?

¿Y qué vendrá después? ¿Impedir a Facebook?¿Qué se pretende con este sigiloso orden Orwelliano?

En el mundo digital con los sistemas y mecanismos adecuados se puede asegurar al 100% quién firmó un documento electrónico. En el mundo del papel, no. Y ya sabemos de conocidísimos casos al respecto y que están en plena investigación, con la atenta mirada de la ciudadanía.

Si se quiere legalizar que dos más dos es igual a 5, este no es el país.

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29 dic 2014

Jesucristo vive

El Cardenal Martini, Arzobispo de Milán confesó que desde niño tuvo algún problema con la imagen de Cristo Crucificado. Se comprende, un hombre que muere clavado a dos maderos es una imagen triste e impresionante. Así lo fue para los discípulos cuando históricamente vieron morir a su maestro y profeta.

Después ha habido un proceso de rehabilitación y aún exaltación de la imagen del crucificado. Se ha dicho que fue un hecho necesario para satisfacer a Dios los pecados de los hombres, pero decir esto es una barbaridad porque Dios no es cruel, es un padre misericordioso que nos ama y nos perdona.

Decir que Cristo nos “redimió” significaría que “pagó un precio” para rescatarnos del castigo que merecíamos por nuestros pecados. Esto supone que Dios exige un “precio”, un “pago” para perdonarnos. No es esta la actitud de un Dios que nos ama y nos salva sin exigir compensaciones.

Hay oraciones y liturgias que ven en la muerte de Jesús un sacrificio expiatorio semejante a los sacrificios de corderos y otras víctimas en expiación por nuestros pecados. No podemos quedarnos con estas imágenes primitivas. No hay que decir que Jesús nos salvó por su sangre derramada o por su muerte sino por el amor con que entregó toda su vida por la salvación de la humanidad.

Aclaradas las ideas podemos reconocer en la imagen del crucificado, el amor de Jesús y del Padre por nosotros. Amor que nos entregó la salvación.

Nuestra salvación consiste fundamentalmente en que Dios nos acoge como hijos adoptivos otorgándonos una participación en su vida eterna. Dios acogió a Cristo resucitándolo de entre los muertos y a nosotros nos toma como hijos adoptivos en su Hijo unigénito (prescindimos de las discusiones teológicas sobre las relaciones “trinitarias”).

Cristo vive resucitado dice S. Pablo, en un cuerpo inmaterial. Vive en nosotros ya desde ahora y después por toda la eternidad gracias a nuestra unión con Él. Y nuestra unión con Él se hace por la fe, creyendo en Él.

Pero tomemos nota –es muy importante .

La fe que nos unirá radicalmente con Cristo no ha de ser una fe intelectual, sino una fe de abandono, de entrega amorosa. Es el Cristo del evangelio pero viviendo el hoy en la coyuntura actual. Puede haber momentos en la vida en que Dios nos toca haciéndonos sentir esta presencia de Cristo, otras veces es un tranquilo querer creer el que alimenta nuestra fe. Siempre es el llamado de Jesús en sus diversas formas: “se ha cumplido el reino de Dios”, “convertíos y creed en el evangelio”.

Esta motivación es ante todo individual. La conciencia personal es el centro donde se escuchan las voces y se responde con las decisiones. En la conciencia resuena esa voz de Dios que exhorta, ilumina, reprende, aplaude, y tantas veces llena de gozo y satisfacción el espíritu.

Pero también ha de haber una fe colectiva que inspira a la comunidad de fieles y los inspira ante todo en la línea de esa “co-munidad”, esa tarea común que los une, que los orienta, que constituye un alma que anima el cuerpo.

Nos preguntaremos ahora dónde están esos cuerpos animados por el Espíritu de Jesús, dónde están esas comunidades aunadas por la vocación del Espíritu, dónde están esas comunidades que juntas constituirían la comunidad del pueblo de Dios.

Voy a tratar de entregar algunas respuestas desde una experiencia indudablemente limitada, la mía. Existen esas comunidades donde palpita el Espíritu de Dios. Pienso espontáneamente en una comunidad que se titula Cristo Vive, la conocemos en Santiago orientada por Carolina Meyer, bien conocida en Chile y en el extranjero.

Tengo la impresión de que en esta comunidad realmente Cristo vive. Estarían aquí las comunidades de base que la iglesia chilena ha tenido y que en alguna forma subsisten en diversas partes.

En muchas parroquias evidentemente está ausente el espíritu que los debería aunar. Parroquias donde se juntan fieles que tal vez viven del Espíritu pero no se comunican a través de Él, no forman comunidad.

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