El día de la fiesta de la Transfiguración del Señor la Fundación Paternitas vio la luz. El 6 de agosto, cumplimos 20 años de existencia.
Corría el año 1992 cuando me informaron que se había firmado el Decreto en la que se erigía esta Institución que tenía por tarea atender, capacitar, acompañar y reinsertar social y laboralmente a personas, hombres y mujeres, que habiendo delinquido buscaban afanosamente una nueva oportunidad para sus vidas.
Fue significativo el que la Fundación adquiriera Personalidad Jurídica en una fecha tan importante como es la Transfiguración del Señor.
Los discípulos de Jesús al verlo refulgente y con sus vestidos blancos esplendentes concibieron la naturaleza de quien estaba con ellos y comprendieron lo que esto significaba y la misión que les esperaba.
En este sentido nos acicatea el objeto de la Transfiguración, cual es, devolver el rostro humano a quienes víctimas de las llagas de la indolencia social y las injusticias, del maltrato y la violencia, de la pobreza y del estigma se han, equivocadamente, ocultado en la venganza, la soberbia, la droga y la delincuencia.
Trabajamos arduamente y con equipos multidisciplinarios de profesionales, para devolver a quienes delinquieron la esperanza y limpiar la escoria del alma que se ha pegado en el camino.
La Transfiguración, símbolo del hombre eterno y libre, marca el nuevo recorrido de las personas que han podido reformularse en sus vidas y seguir el camino del esfuerzo noble y no sin sacrificios de la rehabilitación, a través de las capacitaciones que podemos ofrecer gracias al apoyo de múltiples empresas y del ministerio del Trabajo.
Invitamos tanto a los ministros del Trabajo, Justicia, de Desarrollo Social, Sernan y otras Instituciones para que creemos una gran alianza, ya que sin ustedes nada podemos hacer, pero sin nosotros, ustedes tampoco, en estas materias tan sensibles y necesarias, pueden avanzar de manera efectiva y eficiente.
Tenemos una basta experiencia que ofrecer y una gran oferta programática que entregar.
Trabajemos juntos por la grandeza y futuro de Chile. En estos días de chilenidad y de profundo sentido patrio aunemos fuerzas, para crear el país que todos queremos; en donde todos nos sintamos incluidos, acogidos, protegidos y respetados, donde se destaque, en todos sus aspectos, la justicia y el derecho, el bien común y la convivencia fraterna.