Lo vi hace pocos días en una foto en el funeral del gran Vaclav Havel, me impresionó mucho, y me trajo muchos recuerdos, incluyendo una foto con el presidente Kennedy en los jardines de la Casa Blanca, acompañado por una docena de jóvenes estudiantes de esa época, principios de los años 60, conversando con el Presidente y, claramente, basta ver la foto para comprender la admiración que Bill sentía hacia el Mandatario. Al menos en eso nos parecemos con Clinton.
Clinton creció en Arkansas, un estado sacudido por la violencia en los años 60, cuando el Ku Klux Klan era muy poderoso allí y recurría a la violencia y a una serie de actos intimidatorios principalmente contra la gente de raza negra, quienes estaban siendo integrados a la sociedad norteamericana a través de una serie de iniciativas que promovía la administración Kennedy.
Es decir Clinton conoció de muy joven y de muy cerca el odio y la discriminación que quería evitar los cambios que terminaran con la segregación racial en su país.
Entonces viendo la foto, en que al lado de Hillary mostraba una genuina pena, por la partida de Havel, constaté que más allá de los defectos que todo el mundo conoce, Clinton siempre ha sido un luchador que defiende los derechos civiles de las personas independientemente de su origen, sexo, raza o ideas religiosas. Un auténtico liberal como lo fue Vaclav Havel.
Pero mas allá ha sido un líder genuino, que tuvo objetivos parecidos a los del Presidente Kennedy, no tuvo que lidiar con la guerra fría con el bloque soviético, pero sí con las tensiones del medio este donde logró significativos avances en conflicto Palestino-Israelí.
Su agenda pro derechos civiles se consolidó gracias a los significativos cambios que Kennedy había logrado en los años 60.
Pero también fue un visionario en materias económicas, entrego el país con superávit en las cuentas fiscales porque sabía los efectos del sobreendeudamiento muchos años antes que otros lideres de su país y de Europa, ni siquiera entendieran como el sistema que ellos defienden puede ser vulnerado por no comprender ese principio básico y por no poseer el liderazgo para corregirlo.
Su preocupación hacia los débiles y pobres queda plasmada en la organización filantrópica que hoy dirige: Iniciativa Clinton Global actualmente la red mas grande de organizaciones no gubernamentales.
Clinton ha dicho que la palabra globalización ha dejado de ser la más relevante en el siglo 21 simplemente porque los jóvenes ya comprendieron que la crisis financiera global está causando serios daños a ese conepto.
Ha dicho Clinton entonces que el concepto para describir el mundo actual es interdependencia porque lo que hagamos o no hagamos va a ir más allá de nuestro círculo inmediato, más allá de los límites de los países y por tanto se convertirá en un concepto global.
Destaca la desigualdad dentro de esas ideas e indica que la mitad del mundo sigue viviendo con menos de 2 dólares al día.
Subraya también la inestabilidad y la no sustentabilidad como los conceptos adicionales que explican esta interdependencia.
Ante esa realidad Clinton sostiene que la misión de la humanidad en el siglo 21 es reducir las fuerzas negativas y aumentar las positivas de la interdependencia, decidiendo cada día cuales son las fuerzas positivas de la interdependencia y reducir las negativas.
Las redes sociales ayudarán a ese objetivo y mostrarán de manera feroz las opciones entre fuerzas positivas que ayudan a reducir la desigualdad, la inestabilidad y la no sustentabilidad y aquellas que operan en sentido contrario.
Después de marcharse de la presidencia del hasta ahora país más poderosos del mundo, Clinton es el único Líder que he visto destacar, para mejorar el bienestar mundial, a las redes sociales, otros las usan.
Clinton las quiere para que se beneficien todos y el mundo se convierta en un mejor lugar para vivir.