Recientemente la Comisión de Seguridad Ciudadana y Drogas presidida por la diputada Marcela Sabag, ha propuesto una modificación al proyecto de ley, para que incluya a quienes se encuentran con antecedentes penales, en las opciones laborales que ofrece la administración pública.
Sin duda que es una iniciativa inédita y singular, ya que nunca hemos sabido, cuál es la razón de fondo, por qué estas personas, una vez cumplida la pena saldando así la deuda con la sociedad, no puedan ser contratadas por el Estado. En todo caso este proyecto, sólo es un primer paso, ya que falta la aprobación de ambas cámaras.
La Comisión formada para indagar al respecto realizó varios sondeos de opiniones y en ese sentido fuimos invitados como Fundación a expresar nuestra visión.
Desde hace muchos años hemos manifestado la urgencia que el Estado de Chile se abra, como en los países desarrollados, a quienes cometieron delitos y cumplida su pena puedan ser incluidos laboralmente en las distintas áreas de la cosa pública.
Con todo, nuestra larga y vasta experiencia de inserción social, laboral y familiar con ex privados de libertad, nos señala que estos procesos serán exitosos, en la medida que previamente se considere un apresto que incluya -además de la capacitación en oficios- la profundización en las habilidades blandas, entendiéndose por éstas: tolerancia ante la frustración, disciplina y responsabilidad, diálogo respetuoso, apertura a lo desconocido, honestidad, juicio, adaptación al grupo, manejo responsable del dinero, etc.
Consecuente con lo anterior queremos recalcar que la situación del que delinque es altamente compleja y atraviesa la cultura de la desadaptación, involucrando muchas veces a varias generaciones, por lo tanto esto requiere un “desaprendizaje”, es así como entonces amerita un proyecto que considere las distintas vías que les permitan socializarse en diferentes ámbitos que van a requerir en su próximo quehacer.
No podemos olvidar, que la inmensa mayoría de los que delinquen y optan por dejar de hacerlo, su único “oficio” era aquel, desconociendo por completo las normativas requeridas para desenvolverse como un buen trabajador y muchas veces en un entorno con características contrarias a la reinserción laboral.
Dado lo anterior, cualquier proyecto para que tenga éxito, debería incluir:bono anticipado para el período de apresto, considerar remuneración económica rentable, estabilidad en el tiempo, posibilidades de surgimiento a futuro, tomando en cuenta que la actividad laboral actúa como un mecanismo de integración único al medio social.