El año 2013 nos sitúa en el arcano de La Fuerza, la domesticación de las contradicciones. Es la hora de que se asuma, por parte de la sociedad y de sus dirigentes, el control de los acontecimientos.Este tiempo nos llama a mirar las cosas de modo diferente, tratar de comprender los puntos de vista ajenos y recoger los frutos de lo que se ha sembrado.
En Chile existe un descontento que no es fácilmente comprensible por las autoridades, puesto que los índices económicos parecen estar bien.Sin embargo, la población no está satisfecha ni contenta y existen muchas críticas pues los problemas van más allá de lo inmediato y diario.
Habrá decisiones, ajustes, tendencias a buscar las formas de manera privilegiada sobre los contenidos, en un marco que tiende a la estabilidad económica y a un futuro que parece promisorio.El descontento, sin embargo, puede ser entendido desde una perspectiva afectiva y anímica más que del cumplimiento o no de las expectativas macroeconómicas.
Continúa la importancia de las mujeres. Es probable que tiendan a dominar mujeres con más don de mando que dulzura, es decir, que aún conservan resabios de lo que significa que estén en el terreno de los hombres.
Será tiempo de iniciar proyectos nuevos y levantar propuestas que permitan creer en que los problemas están terminando. El discurso de la nueva mirada, del entendimiento, del amor, será sostenido por figuras probablemente jóvenes, tanto femeninas como masculinas.
Frente a los temas de la naturaleza, los chilenos tendremos reacciones adecuadas. Chile es un país sísmico y eso se notará aún más durante 2013.
Será un buen año para el trabajo mancomunado de distintos sectores en las actividades vinculadas a la naturaleza, con buena producción de la tierra tanto en agricultura como en minería.
En algunas zonas habrá problemas serios en los temas de clima y medio ambiente, que serán resueltos con cierta prontitud. Habrá una cierta sensación de agobio, como que se da una cosa tras otra.
Será el año del agua, tanto para lavar las heridas de larga data, como en los procesos naturales.Más lluvias, más inundaciones, aguas marinas y lacustres activas. También los volcanes estarán activos.
El año será agitado en lo social y en lo emocional, probablemente con campañas políticas muy pesadas.Aunque no habrá violencia en el lenguaje, los egos competirán sin tregua.
Para Piñera este año será más liviano, especialmente porque se sentirá más valorado y más querido. Mirará a su pasado personal para buscar aliados en el último tiempo de su mandato.Tendrá un buen último año, sobre todo en lo personal.
Michelle Bachelet se siente segura, sólida y sus ideas y decisiones serán vistas como gestos de seguridad personal.
Algo parecido pasa con Ximena Rincón, quien se da cuenta que debe fortalecer su presencia, no arriesgarse a negociar demasiado y mantener posiciones con entereza.
Claudio Orrego interpreta todo como victoria y se siente triunfante.
Para José Antonio Gómez, es el inicio de una nueva etapa en la que se sentirá más entusiasta con la gente que lo rodea.
A Marco Enríquez-Ominami se le ve peleador, a veces excediendo sus límites. Está más belicoso de lo que fue en su campaña anterior.
Allamand y Golborne no consiguen posicionarse correctamente en las encuestas.El resultado de la primaria de la derecha no parece resuelto e incluso no deberíamos descartar la posibilidad de que apareciera un tercero en la discordia.
El próximo jefe del Estado será una persona con un intenso pasado, con mucho dolor en su vida, de gran capacidad de comunicación. Hombre o mujer, el gran peso será el de la energía masculina. Si es mujer estará rodeada de hombres, quienes marcarán la fuerza de su gobierno.
En La Haya, Chile tendrá sensación de triunfo, aunque hay cosas que aún debe comprender. La política internacional de Chile deberá revisarse a partir de este fallo, especialmente en cuanto a la posición que se ha mantenido sobre la relación con América Latina y con sus vecinos, si no quiere sentirse muy aislado.
Perú tendrá globalmente una derrota aunque obtenga concesiones pequeñas. Se dará cuenta de sus errores y reacciona con madurez. Las relaciones entre ambos países manifestarán solidez en áreas comerciales y económicas y mejorías importantes en la comunicación.Presenciaremos acciones conjuntas en las más variadas materias.
Bolivia, al contrario, experimentará rencillas internas que rebotarán en ciertos remilgos, reclamos, quejas y muchos intentos de conflictuar situaciones con Chile que ya están resueltas.