01 jul 2011

¿Y si el centro se corrió a la izquierda?

Históricamente en Chile, la matriz sociopolítica ha estado dominada por el Estado en desmedro de la sociedad civil y en materia electoral, el que conquista el centro gana las elecciones.

Dos supuestos que han caracterizado el comportamiento político y electoral de los/as chilenos/as en los últimos años, que hoy parecen estar en cuestión a la luz de la masividad del paro nacional convocado por los estudiantes universitarios y secundarios -que ya adquirió el carácter de movilización multisectorial-, y de otras señales que podrían anunciar un cambio de paradigma.

Como la previa de la presidencial son las municipales y ya se empiezan a generar movimientos en torno a ellas, en estos días hemos visto al gobierno coquetear nuevamente con la DC, como si ella efectivamente representara al centro (y también con el PRI y los radicales, ofreciéndoles cargos gubernamentales que rechazaron).

Se ha dicho que quien interprete los requerimientos del centro, ganará las próximas elecciones presidenciales. Pero con un reordenamiento de fuerzas y una crisis política en ciernes, el esquivo centro tal vez no tenga un domicilio conocido, esté repartido entre distintos partidos que buscan apropiarse de ese segmento o, tal vez, el centro se corrió a la izquierda.

Es posible que la transversalidad de actores sociales que han hecho suyas las demandas por el fin del lucro, por un efectivo derecho a la educación y por impulsar cambios estructurales al modelo económico, hoy representen a la mayoría.

Por ende, si tradicionalmente la mayoría ha estado en el centro, podríamos decir que hoy el centro está lejos de ser de derecha.

Es cierto que en las últimas elecciones presidenciales la Concertación perdió votos de centro, pero ello no significó que la mayoría fuera de derecha.

Se podrá argumentar que quienes salen a las calles a protestar no representan a la mayoría, pero sumemos a las manifestaciones masivas más importantes en los últimos 20 años, el 65% de rechazo al gobierno en la última Adimark, la crisis de conducción política que han denunciado los propios partidos oficialistas y la puesta en la agenda pública de temas impensados hace algún tiempo (matrimonio homosexual, reformas al binominal, nueva Constitución, etc.).

Chile no es de derecha, sino de centroizquierda y a poco más de un año de gobierno se nota cada vez más.

Cuando se instala un debate sobre derechos (a la educación, a la salud) versus el lucro; sobre lo insuficiente que resulta la democracia representativa para el creciente anhelo de participación ciudadana; cuando a la luz de la estafa de La Polar lo que se critica es el retail en su conjunto, el cobro de intereses sobre intereses y la usura, el cuestionamiento de fondo es a los principios que han inspirado el modelo económico por tres décadas.

En una lectura de ciclos históricos, no deja de ser sintomático que los mismos que desde la dictadura militar desbarataron al Estado, lo minimizaron y desacreditaron en extremo la política, hoy enfrenten una crisis del modelo neoliberal.

Será que en un Chile que no es de derecha, que el gobierno actual sí lo sea viene a evidenciar con mayor fuerza los excesos que la derecha económica viene perpetrando desde que se impulsaron las reformas estructurales durante la dictadura.

Las promesas incumplidas que la ciudadanía hoy se le achaca a este gobierno, son más que las de su gestión: a los representantes de la derecha, este país (que no lo es) les reclama el incumplimiento de las promesas del modelo económico.

La municipalización de la educación secundaria en los 80s, treinta años después arroja como resultado una inequidad que las políticas sociales no han logrado revertir; la privatización de la salud a través del modelo de isapres ha generado una salud para ricos y otra para pobres; el modelo de capitalización individual de las AFPs finalmente entrega pensiones más bajas y el Estado se sigue haciendo cargo de la gran mayoría de ellas; una reforma laboral que terminó por debilitar al movimiento sindical y la posibilidad de negociación colectiva, precarizó el empleo a tal punto que hoy el propio trabajo -otrora medio privilegiado de movilidad social- es el que empobrece a quienes lo ejercen.

El grito es por la recuperación de lo público. Por el bienestar social y no particular, porque sean los beneficios los que se extiendan a la mayoría y no los costos (dado que hasta ahora una minoría concentra los beneficios del crecimiento y la mayoría sufre sus costos).

Quizás no resulte tan aventurado pensar que la forma en que la sociedad chilena se ha definido a partir de las relaciones entre el Estado, los partidos políticos y la base social, esté cambiando.

En el contexto de un gobierno de derecha, la sociedad civil está apelando al Estado a recuperar su papel en la defensa de lo público, porque el mercado como asignador de recursos ya probó que incurre en múltiples fallas, que justifican una intervención más activa del Estado y su rol regulador.

Las fallas del mercado son cada vez más profundas: mercados poco transparentes como el de isapres, AFPs y claramente el retail; externalidades negativas como la contaminación ambiental; inequidades en la provisión de bienes que incrementada las desigualdades.

El mercado falla y cada vez más seguido, generando crisis económicas y financieras a nivel mundial.

Chile suele estar en contra de las tendencias regionales: durante los 80 impulsó el experimento del modelo neoliberal y en la actualidad es de los pocos países del continente que tiene un gobierno de centro derecha.

Pero, al parecer, con la sociedad civil no está ocurriendo lo mismo: la ciudadanía está en sintonía con reivindicaciones globales que apelan a la insuficiencia de un régimen democrático meramente representativo y con procesos sociales, reivindicativos y redistributivos que nuestros vecinos han sabido impulsar.

Hace un tiempo anunciábamos que las manifestaciones ambientales y sociales eran la punta de iceberg del malestar y que la política estaba de vuelta.

A ello habría que agregar que si efectivamente la matriz sociopolítica está evolucionando hacia la predominancia de la base social y si el centro se identifica con reivindicaciones de izquierda, para quienes sepan leer los cambios y conquisten el poder, ya nunca será lo mismo.

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  • http://pulse.yahoo.com/_CAVKHMRE44W4DMJDSQQHEJO57E Pablo

    Me parece un muy certero análisis, la política está de vuelta, y el misterio es que quienes deben re- construirla son los mismos que la denostaron durante años, que  aprovechando un sistema binominal, leyes de amarre y una constitución inconsulta fueron “legalizados”  por una ciudadanía que a luz de los hechos expresa y  busca profundizar su  legitimidad, mediante cambios estructurales y no sólo un maquillaje superficial. Pablo Z.

  • http://pulse.yahoo.com/_CAVKHMRE44W4DMJDSQQHEJO57E Pablo

    Me parece un muy certero análisis, la política está de vuelta, y el misterio es que quienes deben re- construirla son los mismos que la denostaron durante años, que  aprovechando un sistema binominal, leyes de amarre y una constitución inconsulta fueron “legalizados”  por una ciudadanía que a luz de los hechos expresa y  busca profundizar su  legitimidad, mediante cambios estructurales y no sólo un maquillaje superficial. Pablo Z.

  • http://www.facebook.com/profile.php?id=1275385957 Lorena Ester Lazo Muñoz

    Sí , de vuelta la Política, pero sin políticos. La izquierda y el centro hicieron lo mismo que la derecha ,asegurarse un buen sueldo y puestos de trabajo, olvidando que la gente luchó para derrotar la dictadura. Si somos mayoría centro- izquierda ¿cómo se explica que ganará Piñera?. Ahora que gobierna la derecha , quizás ella misma verá el inicio del fin del modelo neoliberal, sería por decir lo menos, anecdótico.Pagarán sus culpas ,las consecuencias de lo que instalaron en este país. Pero ya no más la gente ,todos nosotros.Después de tanto tiempo vemos aún los tremendos daños causados por la dictadura de Pinochet. Las manifestaciones involucran a toda la ciudadanía, todos queremos que esto cambie para bien. Lo importante, ahora, es motivar , impulsar a los jóvenesa inscribirse y votaren todas las próximas elecciones, así podremos verlos cambios reales que queremos : nueva constitución , nuevos deberes y nuevos derechos…o sino seguiremos viendo marchas.

  • http://www.facebook.com/profile.php?id=1275385957 Lorena Ester Lazo Muñoz

    Sí , de vuelta la Política, pero sin políticos. La izquierda y el centro hicieron lo mismo que la derecha ,asegurarse un buen sueldo y puestos de trabajo, olvidando que la gente luchó para derrotar la dictadura. Si somos mayoría centro- izquierda ¿cómo se explica que ganará Piñera?. Ahora que gobierna la derecha , quizás ella misma verá el inicio del fin del modelo neoliberal, sería por decir lo menos, anecdótico.Pagarán sus culpas ,las consecuencias de lo que instalaron en este país. Pero ya no más la gente ,todos nosotros.Después de tanto tiempo vemos aún los tremendos daños causados por la dictadura de Pinochet. Las manifestaciones involucran a toda la ciudadanía, todos queremos que esto cambie para bien. Lo importante, ahora, es motivar , impulsar a los jóvenesa inscribirse y votaren todas las próximas elecciones, así podremos verlos cambios reales que queremos : nueva constitución , nuevos deberes y nuevos derechos…o sino seguiremos viendo marchas.

  • http://www.facebook.com/people/Pato-Márquez/589090162 Pato Márquez

    Es interesante la forma en que plantea el cambio, en el sentido del análisis partidista que se hace. Pero me parece equivocada la forma en que se ideologiza políticamente problemas que tienen su fundamento en los derechos humanos. Desde 1948, la Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948), Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre (1948), Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (1966), entre otros, TODOS suscritos por Chile, hacen mención al Derecho a la Educación, y en partícular a los derechos de la segunda generación les hace una salvedad; cual es que serán progresivos según lo permita el desarrollo económico, por tratarse precisamente de derechos y garantías en las que el estado debe actuar de manera subsidiaria. Ahora bien, en estos momentos, en los cuales Chile ha tenido un desarrollo económico sostenido por muchos años, y que la OCDE nos refriega en la cara tener uno de los índices de desigualdad más grandes en el mundo, es necesario redistribuir esa riqueza aumentando el sueldo mínimo a por lo menos el doble, y modificar la ley de impuestos con el fin de recaudar más y destinarlo al subsidio de servicios básicos: la educación y la salud. De esta forma, asegurar la dignidad y el nivel de vida adecuado que se prometió promover al suscribir y ratificar los tratados internacionales antes citados. Saludos.

  • http://www.facebook.com/people/Pato-Márquez/589090162 Pato Márquez

    Es interesante la forma en que plantea el cambio, en el sentido del análisis partidista que se hace. Pero me parece equivocada la forma en que se ideologiza políticamente problemas que tienen su fundamento en los derechos humanos. Desde 1948, la Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948), Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre (1948), Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (1966), entre otros, TODOS suscritos por Chile, hacen mención al Derecho a la Educación, y en partícular a los derechos de la segunda generación les hace una salvedad; cual es que serán progresivos según lo permita el desarrollo económico, por tratarse precisamente de derechos y garantías en las que el estado debe actuar de manera subsidiaria. Ahora bien, en estos momentos, en los cuales Chile ha tenido un desarrollo económico sostenido por muchos años, y que la OCDE nos refriega en la cara tener uno de los índices de desigualdad más grandes en el mundo, es necesario redistribuir esa riqueza aumentando el sueldo mínimo a por lo menos el doble, y modificar la ley de impuestos con el fin de recaudar más y destinarlo al subsidio de servicios básicos: la educación y la salud. De esta forma, asegurar la dignidad y el nivel de vida adecuado que se prometió promover al suscribir y ratificar los tratados internacionales antes citados. Saludos.

  • http://twitter.com/planetaerrante Jose Miguel Queirolo

    Marisol: Te felicito por tu análisis y conclusiones al tema. Por eso, la responsabilidad ineludible de las directivas políticas es preparar adecuadamente a las nuevas generaciones de líderes y darles paso.
    Como viejo profesor, ya jubilado,creo en la política como el ejercicio del bienestar social y por eso, creo en los jóvenes, plenos de ideales. De no ser así caeremos en el caótico caudillismo en que han caído algunos de nuestro pueblos hermanos.

  • http://twitter.com/planetaerrante Jose Miguel Queirolo

    Marisol: Te felicito por tu análisis y conclusiones al tema. Por eso, la responsabilidad ineludible de las directivas políticas es preparar adecuadamente a las nuevas generaciones de líderes y darles paso.
    Como viejo profesor, ya jubilado,creo en la política como el ejercicio del bienestar social y por eso, creo en los jóvenes, plenos de ideales. De no ser así caeremos en el caótico caudillismo en que han caído algunos de nuestro pueblos hermanos.

  • http://twitter.com/elciruela Manuel Bravo Hidalgo

    Marisol: Creo que tu análisis es bastante certero, nuestro pueblo fue vilmente engañado por la Concertación, que utilizó todos los recursos para transmitir un discurso de “centro-izquierda”, pero entre gallos y media noche siempre sus decisiones políticas, económicas y sociales apuntaban a enraizar aún más en Chile el libre mercado de los Chicago Boys.
    Pasaron 20 años y, Chile cansado de tanta desigualdad optó por la derecha, que dicho sea de paso se disfrazó de “centro”, pero gran sorpresa gran; es más de lo mismo. Nuestro pueblo tardó un poco más de un año desde el cambio de gobierno, para comprender que la concertación fue un gobierno de “centro-derecha”, y empezaron las movilizaciones ciudadanas exigiendo más ESTADO y menos MERCADO.
    Ahora viene un largo camino en que los ciudadanos converjan  en distintas agrupaciones ciudadanas, políticas y sociales para crear un camino distinto para nuestro país.
    Lamentablemente los lideres que conduzcan a Chile hacia una sociedad de centro izquierda no han aparecido, la sociedad se auto-conduce lejos de los partidos políticos.
    Creo fervientemente que nuestro pueblo NO será engañado nuevamente, que los políticos al servicio del dinero NO verán un nuevo amanecer y que vendrán nuevas generaciones de lideres capaces de cambiar desde sus cimientos a nuestro país, creando una nueva Constitución Política que nos garantice a todos los mismos derechos y los mismos deberes.  
    La política está de vuelta.

  • http://twitter.com/elciruela Manuel Bravo Hidalgo

    Marisol: Creo que tu análisis es bastante certero, nuestro pueblo fue vilmente engañado por la Concertación, que utilizó todos los recursos para transmitir un discurso de “centro-izquierda”, pero entre gallos y media noche siempre sus decisiones políticas, económicas y sociales apuntaban a enraizar aún más en Chile el libre mercado de los Chicago Boys.
    Pasaron 20 años y, Chile cansado de tanta desigualdad optó por la derecha, que dicho sea de paso se disfrazó de “centro”, pero gran sorpresa gran; es más de lo mismo. Nuestro pueblo tardó un poco más de un año desde el cambio de gobierno, para comprender que la concertación fue un gobierno de “centro-derecha”, y empezaron las movilizaciones ciudadanas exigiendo más ESTADO y menos MERCADO.
    Ahora viene un largo camino en que los ciudadanos converjan  en distintas agrupaciones ciudadanas, políticas y sociales para crear un camino distinto para nuestro país.
    Lamentablemente los lideres que conduzcan a Chile hacia una sociedad de centro izquierda no han aparecido, la sociedad se auto-conduce lejos de los partidos políticos.
    Creo fervientemente que nuestro pueblo NO será engañado nuevamente, que los políticos al servicio del dinero NO verán un nuevo amanecer y que vendrán nuevas generaciones de lideres capaces de cambiar desde sus cimientos a nuestro país, creando una nueva Constitución Política que nos garantice a todos los mismos derechos y los mismos deberes.  
    La política está de vuelta.

  • Juan Plaza

    Bien y ahora que? Los chilenos nos estamos acostumbrando a votar por personas y no por ideas y programas. Ninguno de los partidos politicos le quiere poner los cascabeles al gato, estan comodos con la constitucion dictatorial maquillada por la concertacion. Se requiere de una asamblea constituyente que nos de una constituccion democratica con la posibilidad de plesbicitar las grandes decisiones a nivel nacional y las menores a nivel regional y comunal, inscripcion automatica y voto obligatorio (con la posibilidad que aquellos que no estan interesados en el futuro del pais, su famila y descendientes se borren de los registros). Este seria uno de los primeros pasos para cambiar la actual situacion de inequidad, ya se demostro que el neoliberalismo fracaso a nivel nacional e internacional, las crisis son cada vez mas frecuentes y los capitales engordan con maniobras abusivas contra las mayorias.Por eso hay que poner todos los esfuerzos en orientar a nuestros ciudadanos a votar por ideas y no por personas. Ojala aparezcan los lideres que tomen las banderas correctas con ideas claras y en beneficio de las mayorias.

  • Juan Plaza

    Bien y ahora que? Los chilenos nos estamos acostumbrando a votar por personas y no por ideas y programas. Ninguno de los partidos politicos le quiere poner los cascabeles al gato, estan comodos con la constitucion dictatorial maquillada por la concertacion. Se requiere de una asamblea constituyente que nos de una constituccion democratica con la posibilidad de plesbicitar las grandes decisiones a nivel nacional y las menores a nivel regional y comunal, inscripcion automatica y voto obligatorio (con la posibilidad que aquellos que no estan interesados en el futuro del pais, su famila y descendientes se borren de los registros). Este seria uno de los primeros pasos para cambiar la actual situacion de inequidad, ya se demostro que el neoliberalismo fracaso a nivel nacional e internacional, las crisis son cada vez mas frecuentes y los capitales engordan con maniobras abusivas contra las mayorias.Por eso hay que poner todos los esfuerzos en orientar a nuestros ciudadanos a votar por ideas y no por personas. Ojala aparezcan los lideres que tomen las banderas correctas con ideas claras y en beneficio de las mayorias.