En solo cuatro meses fondos de pensiones pierden el 17% de los ahorros de los trabajadores y hacen bajar aún más las malas pensiones.
Hace unos días, en el programa El Café de la mañana, Edgardo Riveros, comentó las cuantiosas pérdidas que experimentaban los Fondos de Pensiones, por lo que los auditores de Cooperativa, una vez más, fueron los primeros en conocer la verdadera magnitud de los hechos que tan lamentablemente afectan a millones de trabajadores chilenos.
Pocos han sido los medios de comunicación que han informado al respecto.
El Mercurio publicó en esos días, que los Fondos experimentaban pérdidas por cerca de 2 mil millones de dólares, quedando corto en sus estimaciones.
De acuerdo a informes de la Superintendencia de Pensiones, estos recursos de los trabajadores alcanzaban a US$ 157.227 millones al 30 de abril de 2011 y sólo US$ 132.661 millones al 30 de septiembre de 2011, de modo que en cuatro meses, los Fondos de Pensiones perdieron más de US$ 25 mil millones de dólares, lo que equivale a casi la mitad del presupuesto de Chile para este año.
Para millones de chilenos esta es una noticia catastrófica, ya que ello implica que las personas que han jubilado recientemente y las que se jubilen en los próximos años, percibirán pensiones más bajas aún a las ya bajísimas que se pagan en la actualidad.
Hace algunos meses, el Mercurio advertía que ya se notaba una baja cercana al 10%, pero la reducción será superior al 15% de lo que se podría recibir en condiciones normales.
La publicación de la Superintendencia de Pensiones “Panorama Previsional”, correspondiente a septiembre de este año, señala que el monto promedio de las 887.255 pensiones que estas entidades pagaban a marzo del 2011 era de $176.456, en tanto que el ingreso imponible promedio de los cotizantes dependientes era en julio de este año de $ 507.948.
De modo que la pensión promedio equivale a un 35% de esta cantidad, muy lejos del 70% que José Piñera señaló como ventaja del sistema de AFP.
Las AFP, entre tanto, siguen cobrando las altas comisiones de siempre, ya que ellas ganan sin importar el resultado de las erradas decisiones de inversión que toman.
Un sector especialmente perjudicado lo constituyen los funcionarios públicos más antiguos, aquellos que cotizaron en Cajas de Previsión y luego se afiliaron a las AFP, ya que han recibido o recibirán en el futuro un Bono de Reconocimiento inferior, debido a la subcotización que sufrieron por parte de su empleador, el Estado chileno.
La mantención de esta situación resulta más injusta cuando recordamos que el año 1993, la ley 19.200, reconoció ese daño y lo corrigió para los funcionarios públicos que cotizaban en el INP.
En esa época, cerca de doscientos mil funcionarios públicos afiliados a AFP, no fueron considerados para beneficiarlos, en atención al hecho cierto entonces de que el Estado carecía de recursos para pagar la altísima deuda social creada en el período dictatorial y, además, porque muchas personas creyeron la propaganda engañosa de las AFP que anunciaban que pagaban pensiones superiores en un 40% a las del INP y que ellas serían cercanas al 70% de la última remuneración en el futuro.
Hoy Chile tienen una situación económica mucho mejor y nadie discute que las pensiones del INP son tres y cuatro veces superiores a las de las AFP, por lo que diversas organizaciones de trabajadores y nuestra recién creada Asociación de Consumidores ha solicitado el respaldo de Senadores de todos los partidos y pide pública y respetuosamente a todas nuestras autoridades políticas que den una solución urgente a esta grave injusticia.
Es el momento de agradecer a los Senadores de distintos partidos, tanto de gobierno como de oposición, la presentación de un Proyecto de Acuerdo que solicita al ejecutivo, quién tiene la iniciativa exclusiva en estas materias, el envío de un proyecto de ley con trámite de suma urgencia, para permitir el retorno al sistema del ex INP a todos los trabajadores que libremente opten por esta alternativa.
Asimismo, dada las cuantiosas pérdidas de los Fondos de Pensiones, se solicita al Gobierno que prolongue por varios años los estímulos a la desvinculación de funcionarios públicos, para permitir a los que puedan y así lo expresen, postergar su jubilación hasta que la situación cambie.
Mañana, la sala del Senado tomará una decisión sobre este proyecto que ya ha sido respaldado por cerca de 17 de los 38 Senadores.
Los trabajadores esperamos una bocanada de aire fresco para disipar el aire enrarecido que se respira en este ámbito.