Quiero partir señalando que lo más parecido, que he visto en Chile, a un piloto de un Spitfire, que se baja irónico, relajado y justo para la hora del té, luego de derribar a diez Messerschmitt nazis, como si nada, es Patricio Bañados.
No tengo el gusto de conocerlo, pero lo escucho desde 1986 en su radio de música, mal llamada, docta. Jamás lo he visto por la calle, ¿irá al supermercado?, ¿vivirá en su locutorio? Debe, concluyo, domiciliarse en la “península de los bacanes”.
Espero exista Bañados. Pinochet fue real desgraciadamente. Lo vi de lejos una vez y siempre tuve la esperanza que hubiera sido un holograma, diseñado por nazis esotéricos de Colonia Dignidad.
Ojalá sea real Bañados, pues se matriculó hace décadas como el tipo aristócrata, en el buen sentido de la palabra, con licencia para decir las cosas que la elite no permite le digan los mandos medios.
Por su reciente entrevista ampliamente difundida en la red, en la que dice las cosas por su nombre, de seguro ahora lo querrán ningunear. Habría que recordar, entonces, o informar, quien es, porque debe ser uno de los profesionales que más sabe de televisión en nuestro país.
Fue un pionero al conducir los primeros noticieros como Primer plano (1961) y Chile TV (1962), ambos del Canal 9 de la Universidad de Chile.En 1962 hizo la primera transmisión del discurso presidencial que se realiza cada 21 de mayo y de la transmisión de la Copa Mundial de Fútbol realizada en nuestro país. Luego, en 1963 fue contratado en Holanda, y trabajó para BBC de Londres (1966), la Agencia Informativa de Estados Unidos en Washington DC (1968) y en Radio Suiza Internacional (1972).
Cuando regresó a Chile durante la dictadura militar, fue marginado de los medios de comunicación, pero se las ingenió para ser presentador del concurso El gran jurado Ahorromet, leer noticias en Teleonce entre 1979 y 1980, además de conducir en UCV Televisión el premiado programa Por los caminos del inca.
Se lució con su pluma en la columna dominical que le publicaban en la revista de viajes del diario que miente, pero diciendo la verdad, sobre sus experiencias y anécdotas de viajero consumado por el mundo.
Bañados sufrió también el hostigamiento directo de la represión, cuando renunció a un noticiero en dictadura, debido a las mentiras que otros deseaban que leyera y lo amenazaron a través de “lo que le podría pasar a sus hijas”.
Desde 1990, los que han cogobernado con la derecha se incomodan con su prestancia y olvidan que fue aquella la que permitió darle credibilidad a la franja del NO.
Menos mal que existe Bañados, sobre todo ahora, pues vemos a la elite del duopolio de la política saliendo feliz del cine tras ver su película NO, fruto de lo cual han dicho que a Pinochet se le derrotó con un lápiz, una de sus metáforas más gastadas.
Dice hoy Bañados en entrevista al respecto: “Me gustaría puntualizar que en el plebiscito del 88 ganó el Sí. Hubo más gente que votó que No, pero ganó el Sí. No sospechábamos que había un acuerdo. Un acuerdo para que nada cambiara, o sea, el “gatopardo”.
Nadie podría calificar a Bañados de resentido, de respirar por la herida, ser marxistoide, trasnochado o nostálgico.Continúa: “Yo era un desagradable recuerdo de que alguna vez los compadres, con los que ahora salían abrazados en las páginas sociales de El Mercurio, eran sus enemigos, se suponía. Ahora no; eran todos amigos.Pinochet, de dictador sangriento, había pasado a ser una especie de abuelito de Heidi. Un abuelo bondadoso que, en palabras del propio Aylwin, ayudó mucho a la democracia”.
“Te voy a decir que No / ¡Oh, Oh! /”, parodiaron en el 2008 por la web los chicos de Difamadores, para “conmemorar” y no celebrar los 20 años del plebiscito. Busquen el clip en Youtube, es muy cómico.
A Bañados le dijeron NO apenas comenzó el cogobierno: “Llegué a Televisión Nacional en agosto de 1990, porque me llamó Eduardo Tironi y me dijo que me hiciera cargo del área cultural. Propuse, por ejemplo, que se me entregara toda la tarde del sábado para hacer una serie de programas de contenido. Me dijeron que no”, sostuvo.
Remata Bañados: “En TVN a Pinochet no se lo tocaba; a los detenidos-desaparecidos tampoco. Eran temas tabú, no existían. Si a Pinochet no lo pescan los ingleses, yo creo que se muere con toda clase de honores en este país; y la tortura y las maldades no existen”, indica.
“Cuando estuve en TVN presenté una vez un proyecto de un programa para mayores de cincuenta años. Desde luego, me contestaron que agradecían mucho mi interés, pero que me fuera a la cresta, en otras palabras. Resulta que en Estados Unidos están creando un canal para mayores de cincuenta años, que son un grupo etario que crece cada vez más en proporción a la población, en todo el mundo”, ilustra.
Luego de 22 años, en la pantalla siguen ganando inmoralmente millones los rostros de la dictadura y las radios FM fueron fagocitadas por “voztros” que vienen desde esa TV a desplazar a los profesionales de ese medio.
Por otro lado, tenemos un lindo duopolio en la prensa escrita y a las radios comunitarias, la Concertación las convirtió en corderitos.
Esta cultura medial chilena, continuista de la dictadura, era muy necesaria para convertir a los chilenos de ciudadanos en consumidores. Hoy los compatriotas casi no leen, pero sí saben mucho de esta democracia de mercado, donde les regalan chapitas y la Concertación tendió puentes dorados hacia el empresariado, porque un senador en campaña cuesta mínimo 600 millones de pesos.
Una noche quedé pasmado frente al televisor, cuando un “voztro” comentarista deportivo, siempre sobre expuesto en los medios y desde su tribuna que llega a millones de personas, dio una arenga diciendo que “eso de la educación en la TV era cosa de los años sesenta”, pues “la tele era y debía ser sólo entretención”. Un ego descontrolado, sin duda.
Versus Patricio Bañados, que conoce de medios en países democráticos y la historia de esta cajita que debía informar, educar y entretener en equilibrio, ¿Sabrá este “voztro” que en Inglaterra la clase media privilegió luego del trabajo, una serie inspirada en una novela policial como el Inspector Morse y todas sus secuelas denominadas “Lewis” y ahora “Endeavour”?
En el mismo horario, en Chile la clase media y obrera enciende su plasma para ver Morandé con Compañía. Un programa legítimo, pero patético, donde en una sección denominada “Oli Nights” se burlaban de personas con discapacidad mental. “Hacer programas con contenido y bien pensados es mucho más difícil que realizar programas faranduleros. No porque se requiera más dinero, sino porque necesitan mucha más inteligencia y creatividad”, reflexiona Bañados.
“Lamento que mi experiencia, así como la de muchos otros, no sea considerada para nada en la televisión pública actual. Yo veo como fundamental una conexión constante, de ida y vuelta, de la televisión pública con muchos estamentos de la sociedad. Que se sintieran acogidos por la televisión, que supieran que esa es su televisión”, agrega en la entrevista.
Pero no todo está perdido ciudadanos, gracias al Creador, el mismo del Discovery, Natgeo, Home & Health, Animal Planet, Travel & Living, ARTV, Tierra Adentro, Enlaces, Teleduc, Creaciones, Utilísima, El Mirador, 31 minutos, Mira Tú y Los Ochentas, existe en Chile un Patricio Bañados que quiere que esa TV de calidad sea para todos en señal abierta, porque sólo si hay democracia en los medios, seremos país y no el mero paisaje que somos hace 22 años.
Bañados, todos los días desde 1986, nos habla desde su emisora con ironía sobre estas cosas, haciéndole el quite primero a la dictadura y hoy al fatalismo, ojo y desde una radio conservadora. Todo, mientras esperamos nos anuncie una de Debussy, diciendo:
Patricio Bañados: “A continuación interpreta la Orquesta Revolucionaria y Romántica… (suspiro)…hoy denominada “Renovada y Rentable”,… dirigida por John Elliot Gardiner”.
CONTROL- CORTINA Y MÚSICA.