27 abr 2014

Historia del terreno donde se construirá el estadio de la U

El nuevo presidente de la concesionaria Azul Azul ha anunciado que llegó a un acuerdo con el rector de la Universidad de Chile para edificar el estadio de fútbol del Club Deportivo de la U en un terreno de 34 hectáreas localizado en la comuna de Pudahuel que le pertenece a esa casa de estudios superiores. La futura magnífica instalación deportiva acogerá a 35.000 personas con una inversión del orden de los 50 millones de dólares.

El terreno de marras forma parte del Parque Metropolitano Laguna Carén, área verde que está listado en el Plan Regulador Metropolitano de Santiago (PRMS), el que cuenta con una superficie de 1.011 hectáreas localizadas fuera del límite urbano de esta región, según ese instrumento normativo y el predio más pequeño escindido para el estadio continuará bajo el dominio de la Universidad de Chile, la cual se lo arrendará por un largo plazo fijo a la concesionaria Azul Azul.

Ahora bien, este amplio predio clasificado como parque está situado a un costado norte de la Ruta 68 y hace muchísimos años le pertenecía a la Corporación de la Reforma Agraria (CORA), entidad pública que en 1978, en plena dictadura, se lo transfirió gratuitamente a la Dirección General de Deportes y Recreación (Digeder), estableciéndose que el nuevo titular debía respetar los derechos que beneficiaban a decenas de familias que vivían allí en calidad de ex asentados que no obtuvieron parcelas en el proceso de reforma agraria fijado para el proyecto de asignación Lo Aguirre.

Días antes de que el presidente Patricio Aylwin dejara el poder, el 28 de febrero de 1994, el Estado donó dicho terreno a la Universidad de Chile, teniéndose en cuenta que la Digeder dependía del ministerio de Defensa y su titular en esa fecha era el médico Patricio Rojas.

Éste, fuera del cargo, un año después, actuaba como vicepresidente ejecutivo de la Fundación Valle Lo Aguirre, entidad sin fines de lucro, que tuvo por misión iniciar posteriormente el proyecto de alto estándar denominado Parque Científico y Tecnológico por cuenta de dicha casa de estudios superiores.

Pero a las autoridades que le transfirieron gratuitamente este predio a la Universidad de Chile se les olvidó conservar en las escrituras públicas los derechos de los ex asentados, amnesia voluntaria que, lógicamente, favoreció al nuevo dueño. Por los apremios ejercidos por esa fundación, algunas familias han postulado a los subsidios habitacionales en otras comunas y ya han abandonado sus casas de madera construidas por ellos en esa zona rural.

Transcurrió el tiempo y la Fundación Valle Lo Aguirre le solicitó, en los inicios del año 2004, ya sea al alcalde de Pudahuel como al Seremi de Vivienda y Urbanismo, que se le permitiera acogerse a una disposición de la Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones (OGUC), mediante la cual se viabilizaba el proyecto científico en esa área verde.

A través del ORD. Nº 2183 del 2 de julio del 2004, la autoridad administrativa del gobierno central, por tratarse de una iniciativa de interés público, acogió favorablemente dicha solicitud trasladando a la Municipalidad de Pudahuel la responsabilidad de cursar los permisos de edificación respectivos.

Así las cosas, la fundación Valle Lo Aguirre, por cuenta de la Universidad de Chile, estaba en condiciones de ocupar el 20% de las 1.011 hectáreas en su proyecto tecnológico y para ello obtuvo un crédito por 20 millones de dólares con un banco alemán, vía intermediación de un banco privado nacional, y como el banco extranjero exigió garantías, se perfeccionó la operación crediticia con el aval del Estado, previa autorización del Congreso Nacional.

Con ese dinero ya se han ejecutado urbanizaciones en el 10% de la superficie de este pulmón verde, es decir en 100 hectáreas. En esa fracción del amplio terreno se han construido caminos y ejecutado loteos con luz y alcantarillado y aparentemente a esta fecha el proyecto científico tecnológico está paralizado.

En todo caso la legislación urbanística metropolitana admite la construcción del estadio de Azul Azul en el terreno elegido, ello conforme a lo dispuesto en el artículo 5.2.2. del PRMS, lo que nos alegra sobremanera porque así la ciudad de Santiago dispondrá de un nuevo y grandioso coliseo deportivo y los socios y seguidores del Chuncho tendrán a su disposición espaciosos recintos sociales de esparcimiento.

Azul Azul tendrá que someter su proyecto al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA), vía un “Estudio”, ya que la edificación tendrá una carga de ocupación superior al mínimo fijado en el Reglamento correspondiente y como se contemplan más de 1.500 estacionamientos, la institucionalidad tendrá que revisar y aprobar un Estudio de Impacto sobre el Sistema de Transporte Urbano (EISTU) conforme a la exigencia de la reglamentación (OGUC) de Vivienda y Urbanismo.

Esperamos que estos análisis técnicos, sobre todo el EISTU, se aprueben pronto porque no se puede obtener un permiso de edificación sin que exista el anterior y si los consultores que se harán cargo de estas exigencias proceden con profesionalismo, la inauguración del estadio se podría realizar en marzo de 2017.

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  • ivan mora toledo

    para este troyecto no hay debate manos a la obras.

  • Ana Merillan

    Mis primos y tias y tios viven ahi, que pasara con ellos ??? llevan muchos años …. hace mucho les prometieron casas y aun nada

  • walter

    ¿Que
    esperamos los pudahuelinos de sus autoridades?

    Que esperan los Pudahuelinos de sus
    autoridades, que piensen y se desvelen por ellos. Por mejorar la Salud y la
    Educación Municipal, la situación de nuestros deportistas y la falta de canchas
    para su práctica, espacios para el desarrollo de la cultura y de nuestros
    jóvenes, así como de nuestros adultos mayores, así los Pudahuelinos esperan su
    apoyo para la situación que afecta a nuestros allegados, mejorar los espacios
    públicos, recreativos, deportivos y viales, esto debe ser parte de la
    preocupación fundamental de nuestras autoridades comunales…

    Por eso cualquier determinación que tomen
    ellos e involucre mejorar o no la calidad de vida de nuestros vecinos en por lo
    menos los próximos 45 años según lo que dice el Sr. Carlos Heller en sus
    últimas declaraciones públicas….. Requiere de parte de nuestras autoridades
    comunales no pensar solo en cuantos votos le puede reeditar la decisión en uno
    u otro sentido, ni pensar solo con la camiseta de un Club puesta sea esta Azul,
    Blanca, Roja. Verde o Listada, sino que tomar la determinación con la camiseta
    de Pudahuel puesta…. porque para eso los eligieron los Pudahuelinos. Para
    pensar en Pudahuel.

    Y con la mano en el corazón y la cabeza
    fría deben ser capaces de decirle a los Pudahuelinos mirándolos a los ojos, que
    están seguros que la construcción del proyecto inmobiliario de Azul Azul,
    no traerá problemas viales a la Comuna, ni de seguridad ciudadana en las calles
    de acceso y barrios del entorno entre los barristas de los equipos que se
    enfrenten cada 15 días como sucede en otros estadios y comunas , ni de
    transporte público por tratarse de un estadio para 35 mil personas que deben
    llegar al lugar , ni de desvalorización de las viviendas en las zonas que
    estarán en torno a este proyecto. Y fundamentalmente como se compensara la
    pérdida de 1011 hectáreas de un terreno que estaba destinado a ser un parque
    metropolitano protegido por tratarse de un Humedal……

    Si nuestras autoridades Comunales
    le aseguran a todas y todos los Pudahuelinos que el proyecto de Azul Azul y el
    Sr. Heller tiene todo esto claro, tendremos una parte importante del problema
    resuelto, y que bueno que lo hayan hecho por nosotros todas y todos los
    Pudahuelinos.

    Dejamos para otro análisis la
    segunda parte del problema, o tal vez la parte más importante, que es cómo fue
    que un terreno donado por el Estado de Chile a una entidad sin fines de Lucro
    como es la Universidad de Chile para la construcción de un Parque Científico y
    Tecnológico, un terreno de 1011 Hectáreas [ que era un Parque o área
    Protegida en el momento de la donación ], termina siendo entregado por 45 años
    ¿ en forma gratuita ? a una Sociedad Comercial que se transa en la Bolsa y que
    tiene fines de lucro, para que desarrolle un proyecto inmobiliario, dentro del
    cual se encuentra la construcción de un Estadio…….. Importante pregunta, pero
    más importante será la respuesta que las autoridades que correspondan nos deben
    dar a los Pudahuelinos, a la Región y al País.

    Por: Walter González
    Miranda, Consejero Sociedad Civil de Pudahuel y Dirigente Cultural de
    Pudahuel