14 jul 2014

Algo sobre Palestina

Mi hijo Pablo ha escrito una columna de opinión llamando a la paz y dejando en claro que ser pro palestino no es ser antijudío.Yo agrego, de acuerdo con él, que mucho menos es, como dicen alguno en diversos medios, ser “antisemita”.Su mejor amigo es judío y también su tío más querido (mi cuñado) y por lo tanto sus primos. Pero así como tenemos un profundo respeto por el judaísmo y sus seguidores, por su religión y su cultura, no nos gusta lo que los gobernantes del Estado de Israel hacen en ese territorio.

Dicen algunos cronistas y “twiteros” que todo lo que allí pasa seguirá mientras los palestinos no reconozcan el Estado de Israel. Esto tiene dos lecturas.

La primera es que el hecho de que no haya reconocimiento oficial justificaría todo lo que sucede en términos de violencia o agresiones de distinto tipo por parte de las autoridades del Estado de Israel, cualquiera que sea su gravedad o las violaciones de los derechos humanos que ello implique.

La segunda es que no se han dado cuenta los que ello sostienen, que el Estado ha sido reconocido no sólo por los palestinos y demás árabes que viven allí, sino también por las actuales autoridades palestinas que han aceptado dialogar en igualdad de condiciones con las de Israel.

Y también lo han reconocido aquellos países – incluidos árabes – que mantienen relaciones políticas o diplomáticas con el Estado de Israel. Pero, además, hay un hecho real: el Estado existe y su situación está sólidamente respaldada por Estados Unidos y la mayor parte de la comunidad internacional que ha resuelto y aceptado la creación de un país dentro de otro país (1947) y no ha sancionado – o ha sancionado sin imperio – las violaciones a las normas que Naciones Unidas ha impuesto al Estado de Israel.

Para empezar, los límites, que el Estado en sucesivas guerras, ha conseguido extender más allá de lo que le fue concedido hace casi 70 años. Es verdad que ello se ha corregido algo a partir de la recuperación de Sinaí por parte de Egipto y del reconocimiento de la Autonomía Palestina para ciertos territorios (autonomía parcial, por los asentamientos de colonos que continúan cada día, por el muro que el Estado de Israel ha construido y por la presencia del ejército de Israel).

En este tema de los límites hay que señalar que en el Parlamento de Israel hay un mural con el mapa del territorio al que aspiran sus fundadores y gobernantes: El Gran Israel del reinado de Salomón y David, que incluye el Líbano, Jordania y Siria. Para evitar equívocos, un actual dirigente político de Israel ha sostenido que ésa es su meta y no descansarán hasta conseguirlo. Gracias a dios, él no tiene la mayoría.

El problema no se sitúa, como algunos han querido sostener, en la lucha contra los judíos por su religión. Eso no es cierto. Más aún, durante siglos los pueblos árabes, politeístas primero, cristianizados después o musulmanes mas tarde, han sido refugio y protección de otras religiones, incluida la religión judía. Más aún, los judíos sefarditas (árabes, semitas, de religión judía) fueron figuras significativas en el imperio musulmán, respetadas, veneradas, admiradas e incorporadas en su historia como grandes sabios.

Digamos las cosas por su nombre: los únicos que no quieren reconocer el Estado de Israel son ciertos grupos ortodoxos del judaísmo, pues ellos sostienen que no debe haber Estado Judío, sino cuando llegue el Mesías y sea él quien lo instale. La creación del Estado de Israel es, desde este punto de vista, un profundo pecado que ofende la confianza que el pueblo elegido debe tener en dios, pretendiendo apurar procesos que tienen un ritmo que el propio dios ha fijado y que, justamente la acción humana ha dificultado.

Tal vez habría que mirar un poco la historia.

El mundo semítico (no olvidemos que los árabes son semitas) tenía diversas religiones y una de ellas se alzó con mayor conciencia nacionalista al tener la convicción sus seguidores de que su dios era más poderoso que los dioses de los otros pueblos.

Un dios fuerte, guerrero, los escogió como suyos. Los objetivos no quedan claros, pero les dijo que les daría una tierra para instalarse. En los libros bíblicos, Yahvé reprende las infidelidades de su pueblo diciéndoles que él les ha dado la tierra que pertenecía a otros pueblos, pero ellos no han respondido como se esperaba.

Queda claro que la tierra que Yahvé les ayuda a conquistar no era un terreno baldío, sino un lugar donde otros grupos humanos vivían cultivando la tierra y pastoreando, desarrollando la tradicional hospitalidad de la región y adorando sus propios dioses.

Este pueblo que llega a instalarse en esas tierras lo hace mediante una guerra de ocupación, pero la rica y generosa tierra de Palestina era un pasillo ansiado por muchos, no sólo para el comercio, sino para el paso de ejércitos en una y otra dirección. Una tierra regada con sangre por el uso de guerreros que querían conquistar el mundo.

Y no se trata sólo de pueblos salvajes, sino también de otros que se autodenominan civilizados. Asirios, Persas, Griegos, Romanos, Árabes de varios reinos, Turcos, Ingleses y Franceses. Todos ellos convirtieron, por su ambiciones de distinto tipo, esta tierra en campo de batalla para dirimir sus ambiciones.

Cuando los ingleses quieren obtener apoyo para su expansión en esa zona, logran aliarse con los árabes que estaban oprimidos por los turcos, con la promesa de que esa sería una “guerra de independencia”. Falso: era una guerra para instalar una nueva colonización.

En medio de eso, obtienen apoyo de organizaciones vinculadas al judaísmo, básicamente grupos de judíos no semitas (eskenazi, se les denomina) que tenían gran poder en la economía mundial. Los ingleses prometen satisfacer las aspiraciones de esos grupos, consiguiendo un territorio para que se instale el Estado de Israel. Ofrecen – como si fueran dueños – sus territorios coloniales en África y también, sin derecho alguno, la Patagonia.

Ante el rechazo de sus interlocutores, prometen darles una parte de la Palestina que ellos ocupaban, creando primero un “Hogar Judío”. No son los judíos religiosos, no son los seguidores de Yahvé, no son los semitas: son grupos económicos poderosos que imbuidos de sus propios objetivos organizan los mecanismos militares, políticos, económicos, para fundar un Estado en el territorio de otro Estado.

Por cierto, luego se incorporan otros grupos vinculados a la tradición y a la religión judía, a la cultura que se desarrolla en torno a esta religión. Y nace el Estado. La misma noche en que los ingleses se retiran, las fuerzas militares del naciente Estado atacan el territorio de los árabes y se apoderan de una parte de el. Eso se extiende en 1956, con la ayuda de franceses e ingleses que estaban resentidos con Egipto por la nacionalización del canal de Suez. Y luego en 1967 ocupan toda Palestina.

El objetivo de los palestinos es recuperar su identidad nacional, su país. Hoy se habla de dos Estados: Israel y Palestina. Antes se soñaba con un solo Estado, en el que pudieran convivir personas de distinta raza, religión e ideas, con plenitud de derechos. Como sucede en otras partes, donde las discusiones no cruzan esos parámetros, sino otros muy diversos, pero sin desconocer el derecho a vivir en el territorio y transitar por el. La violencia terrorista de algunos sectores palestinos no es el origen de las agresiones, sino al revés. La guerrilla palestina y también sus seudo ejércitos, tiene más que ver con una respuesta que con una iniciativa antojadiza.

Hay que reconocer la realidad. Es lo que hacen las autoridades palestinas cuando quieren dialogar y conseguir la instalación y reconocimiento de dos Estados. Cuando ello suceda, tendrán la autoridad para controlar a los grupos partidarios de la violencia. El camino de la paz pasa por allí, porque si no, cada vez que haya gestos, como el encabezado ahora por el jefe católico Francisco, los violentistas de lado y lado desarrollarán acciones para impedir que se logre la concordia y ellos puedan seguir haciendo su negocio. Y que es negocio de los vendedores de armas y de tantos que lucran con este conflicto.

No quiero extenderme en otra faceta, que sólo insinúo: la desproporción de la respuesta del ejército de Israel ante las acciones de grupos guerrilleros. La semana culminó con el llamado a la población civil a desalojar sus casas, pues ya sea por tierra o por aire, el ejército atacará las ciudades. Eso es para otro comentario.

Lo único que puede parar esta violencia es la decisión de caminar hacia el reconocimiento de dos Estados independientes, que puedan relacionarse como vecinos. Y que los palestinos – o sus descendientes – que vivan en Israel, tengan los mismos derechos y obligaciones que otros habitantes del lugar y recíprocamente los israelíes que vivan en Palestina, reconozcan a la autoridad local y reclamen sus derechos como contrapartida de sus obligaciones. Estado abiertos, comunicados, plurireligiosos, pluriraciales, pluriculturales, abiertos.

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  • boconazo

    El problema es quién detiene el genocidio israelí. Este Estado militarizado se ha transformado en un agresor permanente del Pueblo Palestino y no hay Organización Internacional ni Estado que logre detener la expansión y la política criminal del Estado de Israel.

  • Alejandro

    DESPUES DE 6 HORAS QUE ISRAEL NO ATACA Y HAMAS SIGUE ATACANDO… HAMAS NO QUIERE UN ALTO EL FUEGO, ISRAEL FIRMO UN CESE DEL FUEGO UNILATERAL, ASI COMO UNILATERALEMENTE SE RETIRO DE GAZA HACE YA MUCHOS ANIOS Y ESTE ES EL RESULTADO.

    35 misiles disparado desde GAZA desde las 9 AM

    LES PIDO A TODOS LOS JUSTOS DEL MUNDO QUE DEFIENDEN A LOS PALESTINOS DE GAZA… QUE HAGAN SILENCIO PORQUE HAMAS NO QUIERE UN CESE DEL FUEGO.

    DESPUES DE 6 HORAS QUE ISRAEL NO ATACA Y HAMAS SIQUE TIRANDO INCESANTEMENTE CONTRA TODO ISRAEL YO DIGO UNA SOLA COSA: QUE LOS HAGAN MIERDA. POR TIERRA POR AIRE POR MAR. SI ELLOS NO QUIEREN FIRMAR UN CESE DEL FUEGO QUE SE HAGAN CARGO Y QUE A ELLOS SE LES ADJUDIQUEN LAS MUERTES QUE PASARON Y QUE VENDRAN. SEGUIREMOS DANDOLES EL GUSTO Y LAMENTABLEMENTE PARA NOSOTROS PERO AFORTUNADAMENTE PARA ELLOS TENDRAN MUCHOS JAHIDIM MAS.

    Les copio del medio antijudio y anti israeli lo que obviamente no es un tituar sino un sub titular muy abajo de que Egipto propone un cese del fuego.

    …Tras varias horas reunido, el gabinete de Benjamin Netanyahu ha aceptado la propuesta egipcia, según ha comunicado en una declaración el gabinete….

    El rechazo de Hamas

    Sin embargo, Hamas no parece dispuesta a aceptar la propuesta de ‘alto el fuego’ procedente de El Cairo. Así lo recoge la agencia France Presse, que cita al portavoz del movimiento islamista, Fawzi Barhoum. “Un alto el fuego sin alcanzar un acuerdo [que incluya las exigencias de Hamas] está descartado. En tiempos de guerra, nosotros no cesamos el combate ni siquiera para negociar”, ha sentenciado al medio.

    Horas más tarde, el brazo armado de Hamas, las brigadas Ezzedine al-Qassam, también ha rechazado el plan propuesto por Egipto a través de un comunicado e, incluso, ha amenazado con intensificar su ofensiva contra Israel.

    La información procedente de El Cairo ha coincidido con un nuevo ataque aéreo israelí en Gaza y el lanzamiento de varios proyectiles de tipo Grad contra una zona cercana a la ciudad de Beer Sheeba. Dos hermanas beduinas han sido gravemente heridas.

    fuente el mundo.es