La discusión en torno a la reforma laboral, claramente seguirá calentando los ánimos. Pese a que públicamente he manifestado estar a favor de esta discusión, creo que hay aspectos fundamentales de la actual ley que se han pasado por alto y que son fundamentales de revisar si queremos realizar cambios sustanciales en esta materia, y que por supuesto, contribuyan a la justicia laboral.
Uno de los puntos que no contempla la reforma, es alguna modificación con respecto a la indemnización planteada por la Sofofa, postura que fue rechazada de modo inmediato por la CUT.
Pese al descontento manifestado ante esta propuesta, es de suma importancia realizar cambios en este aspecto, ya que todo lo relacionado con la actual indemnización del trabajador refleja un carácter perverso de una ley que debiese favorecer y recompensar los años de servicio de los trabajadores de nuestro país y finalmente termina imponiendo ciertas “exigencias”.
Dicho lo anterior, me gustaría compartir algunas de las razones por las que creo imprescindible realizar modificaciones en el tema en cuestión.
La actual ley referida a la indemnización posee un alto grado de injusticia. ¿O acaso usted cree correcto que sólo aquel trabajador que sea despedido pueda ser favorecido de un beneficio monetario por los años de servicio en alguna empresa? ¿Acaso un trabajador que se retira por voluntad propia no tiene los mismos derechos?
En el mundo económico, muchos utilizan el concepto de movilidad laboral. Sin duda esto no es efectuado por muchos trabajadores, ya que el hecho de cambiarse por decisión propia de un lugar de trabajo, les hará perder el beneficio de la indemnización.
Esta situación, provoca un congelamiento laboral, ya que el trabajador preferirá mantenerse en el lugar hasta que lo despidan. De acuerdo a ello, su productividad se verá afectada y puede adoptar una postura negativa para generar su salida, lo que puede traer problemas en el desempeño de la persona o en el clima laboral.
Cabe destacar que este “congelamiento”, también afecta en muchas ocasiones a las remuneraciones de los trabajadores, puesto que hay empleadores que no realizan frecuentemente alzas de sueldo porque esto finalmente alterará sus indemnizaciones.
El tope económico que existe con respecto a los años de servicio, también es otra injusticia que presenta la actual ley, ya que después de un determinado tiempo, a cualquier trabajador le convendrá retirarse en vez de continuar ejerciendo.
¿Qué propongo?
Teniendo en cuenta que considero esencial que todos los trabajadores sean recompensados por los años de servicio, lo más justo, sería efectuar una cuenta individual para cada trabajador con la finalidad de que este pueda tener acceso a ella cuando se retire de su empleo.
Este método, ya ha sido implementado en algunas empresas, y de acuerdo a las impresiones obtenidas, los resultados han sido sumamente positivos. Bajo este sistema, no me cabe duda que se evitaría la perversidad que tiene actualmente la ley con respecto al tope de años de trabajo y de remuneración.
No discuto con quienes dicen que la indemnización es un derecho histórico que no puede ser suprimido, sólo recalco que ese derecho va de la mano con condiciones que no siempre benefician a los trabajadores. Quizás hay muchos que todavía no leen la letra chica de un sistema que puede ser optimizado.
Jonas Edward Salk, médico estadounidense, manifestaba que “la recompensa del trabajo bien hecho es la oportunidad de hacer más trabajo bien hecho”. Demos esta oportunidad a nuestros trabajadores, quizás muchos de ellos se mantienen en sus lugares del trabajo sólo por no perder los beneficios que les otorgarán sus años de trayectoria, pero les aseguro, que con menos limitaciones legales, podrán seguir haciendo una buena tarea donde ellos deseen, pues con estas restricciones, sólo están finiquitando su productividad.
Y bueno, para evitar un nuevo round en materias laborales entre los sectores implicados, lo más justo sería implementar un método de indemnización electivo en donde el trabajador pudiera elegir entre el sistema vigente o un sistema nuevo, pues ellos sabrán que es lo que más les conviene y con el cual sentirán que sus años de esfuerzo valieron la pena.