Al caminar en la tramitación de la reforma tributaria, muchos han criticado el proyecto, y como siempre han salido en defensa de la Pymes, sólo manifestando que se perjudicaría a las micro y pequeñas empresas, sin la claridad necesaria, al entregar mucha desinformación y sin propuestas claras que permitan potenciar al sector.
Cobra más vida, entonces, el dicho “en boca de todos y en tierra de nadie”.
En esa perspectiva, considero prudente aclarar algunos puntos, acerca de lo que pensamos este sector de las Mipymes, respecto a la Reforma Tributaria, algo que planteamos como UNAPYME el pasado 17 de junio en la Comisión de Hacienda del Senado.
En primer lugar, creemos necesario crear un Fondo de Educación Tributaria (FET), iniciativa que influiría en 920.000 Mipymes formales con inicio de actividades, trabajadores por cuenta propia y los más de 800.000 estimados en la informalidad, mejorando el desempeño tributario y contable, para enfrentar la reforma.
Todo ello para contribuir a generar mejores prácticas para afrontar el régimen impositivo, por ejemplo, en el uso de factura y boletas electrónicas, promover y asistir en la formalización de los emprendedores, en la regularización de situaciones pendientes frente a organismos, como el Servicio de Impuestos Internos, Tesorería o Aduanas.
En segundo lugar, hemos realizado estudios y demostrado con ejemplos concretos que aquellas empresas, que ganan menos de $100 millones anuales el FUT no los afecta, entonces no comprendemos el por qué una y otra vez ciertos sectores se dedican a mal informar a la prensa y la opinión pública al respecto.El FUT es para nosotros, en estricto rigor, una deuda, un saldo sobre el cual no se ha pagado el impuesto global complementario.
Luego, lo relativo a impuestos de timbres y estampillas, proponemos que éste quede en costo cero para la pequeña y micro empresa hasta operaciones de 3.000 U.F. Así como aquellos emprendimientos, que se realicen por primera vez, pensamos que debiesen eximirse por tres años de impuestos de 1ª categoría y global complementario.
En cuanto a la renta presunta, creemos necesario aumentarla para las micro y pequeñas empresas, de 2.400 UF de ventas anuales, a 5.000 UF.
Respecto de las deudas tributarias, que esencialmente se adquirieron durante la crisis económica mundial a fines de los 90’, situación que dañó en especial a las empresas de menor tamaño, creemos que debieran condonarse. Muchas de ellas desaparecieron por ello y otras sobreviven hasta la fecha, pero con una deuda impagable.En consecuencia, planteamos que todas las deudas tributarias, de más de l0 años de antigüedad, debieran condonarse, por estimar que son un activo nominal y no real en las cuentas de Tesorería.
Finalmente, en relación a aquellas empresas sin movimiento durante tres años seguidos, estamos de acuerdo que el Servicio de Impuestos Internos (SII)pueda proceder a eliminarlas del registro de contribuyentes.
Chile se construye con sus actores sociales, desde una mirada unitaria y no excluyente, desde lo empírico y no lo teórico, de propuestas concretas y diálogo vinculante, considerando políticas públicas dirigidas a las Mipymes para disminuir la desigualdad y generar competencia con equidad, igualdad y agregando valor positivo en el desarrollo emprendedor.
Podemos progresar y dar un salto sustantivo al futuro, visibilizándonos con plena sustentabilidad, desde la particularidad, definiendo las bases de un sistema integrado y compatible con las transformaciones sociales que está sufriendo el mundo.
Sin duda que, para enfrentar este desafío, es importante considerar el protagonismo que le corresponde asumir a las organizaciones de hombres y, en especial, de mujeres que se incorporan con fuerza al mundo del trabajo y liderazgo,siendo fundamental el fortalecimiento gremial, y que el mundo político entienda que el desarrollo se construye sin mezquindades o intereses particulares, en desmedro de una gran masa de trabajadores y empresarios emprendedores.
De todos depende el éxito de iniciativas que disminuyan la brecha de desigualdad imperante en el país. La Reforma Tributaria da cuenta de ello y acude a disminuir esta brecha. ¡Ayudemos a que sea una realidad!