El escritor chileno Roberto Bolaño es una fuente inagotable de sorpresas. Ya instalado para siempre en el Olimpo de los grandes talentos literarios del siglo XX y XXI, este creador múltiple sigue dando muestras que supo sacar partido a la vida.
Cuando se cumplen diez años de su muerte, en el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona se puede ver una exposición que reúne material de su archivo personal y en el que sobresalen obras aún no editadas, tales como novelas, cuentos, poemas, correspondencia, fotos, dibujos, además de libros que formaban parte de su biblioteca.
A la muestra se añaden audiovisuales que ofrecen una magnífica panorámica del universo de Bolaño y que dan al visitante la posibilidad de interactuar para descubrir el lado más humano del creador o conocer su cercanía con otros escritores.
En opinión de los comisarios de esta muestra, Juan Insua y Valerie Miles, el público que acude a la exposición asume el papel de detective ya que el material que allí se exhibe contiene las huellas de un genio y de un embaucador literario sin límites. Todavía más. El visitante puede sentir la sensación de ser protagonista de una de las obras emblemáticas de Roberto Bolaño: “Los detectives salvajes”.
Hay que destacar que esta exposición-homenaje ha contado con la colaboración de Carolina López, viuda del escritor.
En el recorrido por las salas donde se exhibe solo una parte del legado Bolaño , el visitante constata el humor y la ironía a la que siempre echó mano el escritor, al mismo tiempo que sus manuscritos ponen en evidencia su cuidada y hasta prodigiosa caligrafía.
La viuda de Bolaño,que desde hace seis años se ha dedicado a ordenar y clasificar los documentos que componen el archivo Bolaño, advierte que todavía queda mucho por analizar. Carolina López destaca el hallazgo de 26 cuentos.Algunos de ellos son: “Sepulcro de Vaqueros”, “Comedia del horror de Francia”, “Corrida” o “Dos señores de Chile”, además de poemas y cuatro novelas.
Ella advierte que sin pausa , pero sin prisa, con rigurosidad y precaución, se estudiarán los textos de esas novelas, cuentos y poemas y solo después de ser cuidadosamente revisados se publicarán en diferentes países. Entre ellos Estados Unidos, donde el fervor por el escritor chileno crece a raudales.
Entre las joyas expuestas se encuentra el manuscrito original de la novela “El espíritu de la ciencia ficción”, escrito en 1984.
Esta exposición-homenaje al autor de “2666” es sólo el comienzo de una empresa que promete muchas más sorpresas y que tardará años en ver la luz.
Del universo Bolaño faltan por conocer las grabaciones de entrevistas que el guardaba celosamente, la música que le inspiró, la correspondencia que acumuló , sus fotos personales o sus vivencias en las ciudades del mundo donde vivió. Ordenar todo esto exige un arduo trabajo.
Abarcar el mundo de Bolaño es todavía hoy, inalcanzable. Habrá que esperar.