Cuando se cumplen 50 años desde su creación, la comuna de La Reina, atractiva por permitir un estilo de vida cercano a la naturaleza, en cuyo diseño se promovió la integración social y el desarrollo industrial, donde proliferan “comunidades” de vecinos en que conviven profesionales, artistas e intelectuales, donde vivieron Violeta Parra y Delia del Carril, y cuyo lema ha sido por años el de ser una “comuna parque”, se encuentra hoy día amenazada.
Con el correr de los años, su cercanía a la montaña, la existencia de numerosas parcelas y la tranquilidad de sus calles abrieron un espacio para las inmobiliarias y centros comerciales, perdiendo lugares tradicionales de diversión como La Brujas, Casamilá y Las Perdices.El centro comercial que reemplazó a Las Brujas sigue siendo una herida traumática para los vecinos. Por otra parte, su ubicación entre las Condes y las comunas del sur la han transformado crecientemente, junto con Peñalolén, en una comuna de pasada.
El plano regulador vigente, aprobado con insuficiente participación ciudadana, generó condiciones para una mayor penetración de proyectos inmobiliarios y se han multiplicado los condominios y edificios –una gran cantidad se encuentra en ejecución- sin ninguna consideración al impacto vial que tienen y tendrán.
Las bellas calles arboladas se hacen totalmente insuficientes para recibir la cantidad de automóviles y camionetas 4×4 de los nuevos moradores creando tremendos atochamientos y dificultades en la vida cotidiana de los y las reininas.
La aprobación de la construcción del Mall en Plaza Egaña, ampliamente resistido en la comuna, ha generado no sólo increíbles molestias a las y los vecinos, sino también la realización de obras de mitigación del impacto vial que se traducen en numerosos desvíos del tránsito por calles pequeñas dentro de las comunas de La Reina y Peñalolén que no dan a basto. La expansión de actividades del Cine Hoytts hace casi intransitable -en las tardes- el cruce Vespucio con Simón Bolívar y los vecinos del sector no tienen donde estacionar sus vehículos. El acceso a la comuna se hace más y más difícil.
Sólo la movilización ciudadana ha frenado el proyecto del MOP que hacía pasar la Autopista Vespucio Oriente por calles interiores de las comunas de La Reina y Peñalolén elaborado a espaldas del Municipio. Se consiguió un compromiso con las actuales autoridades de que dicha autopista irá por la actual Avenida Américo Vespucio en túnel minero. Sin embargo, no se han reunido las comisiones técnicas comprometidas y se ha llamado a licitación para la construcción del tramo El Salto-Príncipe de Gales en forma separada, sin contar con una definición para el tramo Príncipe de Gales–Avda. Grecia. Ello hace dudar a los vecinos de que se respete lo comprometido.
Aprovechando estas indefiniciones y los temores de muchos vecinos, las inmobiliarias ya han comenzado a hacer ofertas de compra a las casas que podrían ser expropiadas, con lamentables consecuencias para la conservación del estilo y calidad de vida en esos sectores.
Paralelamente, y sin consideración de los vecinos y del mismo municipio, el MOP está licitando el ensanche de la calle Vicente Pérez Rosales y Pepe Vila, desde Bilbao. Sería otra vía de pasaje entre las comunas de Las Condes y el sur. Las calles Carlos Ossandón y Padre Hurtado ya son rutas de pasaje en las que se han multiplicado los semáforos y deteriorado las condiciones de seguridad para los vecinos por la velocidad y volumen del tránsito. Se dificulta así la vida vecinal, el libre tránsito de peatones, y también el desplazamiento en bicicleta.
Frente a la creciente destrucción de la comuna de La Reina, a su patrimonio material e inmaterial y a su calidad de vida, bajo la presión de las inmobiliarias y del crecimiento del parque automotriz, sólo cabe la movilización ciudadana y la acción coordinada con las autoridades locales.
En los Diálogos vecinales organizados por el Municipio se ha escuchado el clamor de los vecinos y sin duda, este subirá de tono y formas de expresión. Como vecina he asumido un compromiso con las organizaciones vecinales y continuaré apoyando la defensa de La Reina.