Sinceramente estoy muy desconcertado y apelo a la claridad de los lectores a ver si me ayudan.Hay clara unanimidad de que necesitamos mejorar la educación en Chile, pero hay decisiones tomadas que sinceramente no entiendo.
Primero, se parte legislando sobre la educación subvencionada. Sin desconocer que en este ámbito había grandes temas por resolver, el mayor problema de calidad está en los establecimientos Municipalizados y a la fecha sobre la desmunicipalización no se sabe nada.
Tampoco nada se habla de la Educación Media Técnico Profesional la cual requiere una profunda revisión para generar competencias reales que les permita alcanzar una mejor inserción laboral, cosa que hoy por lo general no ocurre. He realizado estudios al respecto y en éstos el sector empresarial se queja de que no están preparados para la función técnica que dicen conocer. Para que decir del absurdo de la no existencia de un claro sistema de continuidad de estudios bien estructurado y concatenado, entre Enseñanza Media Técnico Profesional y Enseñanza Técnica Superior.
Segundo, se legisla para generar una educación universitaria gratuita, por ahora, para los primeros 5 deciles. Sin embargo se envían dos señales muy contradictorias. La gratuidad se da en la educación universitaria y en la técnica solo becas que no cubren el 100% de los aranceles.
Cuando en el país hoy está egresando el mismo número de técnicos que profesionales y para nuestro desarrollo necesitamos al menos 6 técnicos por 1 profesional, esta decisión no tiene lógica alguna, porque al final se sigue incentivando la educación universitaria por sobre la técnica y muchos que querían estudiar una carrera técnica prefieren ingresar a una profesional porque le resulta gratuita y la otra no.
Por otra parte, los alumnos que provienen de la educación municipal generalmente optan por carreras técnicas, incluso algunas de continuidad con la que han seguido en la Enseñanza Media Técnico Profesional, por lo mismo es ahí donde se concentra el mayor número de personas correspondientes a los 5 quintiles más pobres. Es también muy sabido que dado los bajos resultados que obtiene este sector en la PSU, son las universidades privadas, las que por sus menores exigencias, acogen a un importante porcentaje de este quintil, muchas de las cuales hoy no tienen acceso a la gratuidad.
Tercero, se prefiere optar por el sistema de asignación de los recursos al oferente y no al demandante. Esta experiencia viene de vuelta en el mundo porque está probado que en definitiva se torna un manejo ineficiente de los recursos. Vale la pena estudiar el caso de Suecia. Si se hicieran serios estudios de la forma como se administran estos recursos en las universidades públicas, no cabe duda que se mostraría que no son todo lo eficiente que debieran ser. Al respecto hay variados indicadores que lo demuestran, pero que por extenso del análisis queda para otra reflexión.
Cuarto, el centro de todo este proceso es mejorar la educación en el país. Sin embargo poco o nada se han planteado los temas de fondo, cómo mejorar la calidad. Esto no se logra solo con un nuevo estatuto docente. Chile hoy debe explorar nuevas metodologías educativas que responda a las tecnologías del presente y a la necesaria formación de técnicos y profesionales con capacidad de innovar y emprender. Esto es un imperativo para el país porque sin una capacidad innovadora no estamos en condiciones de generar mayor valor a nuestra producción de bienes y servicios, cosa que es imperiosa si queremos dar el salto al desarrollo.
Naturalmente esto implica nuevas formas de educar, desde el pre básico hasta la educación superior. Nuestra acentuación está en la educación colectiva y no individual, cuando está demostrado que cada persona tiene tiempos y ritmos distintos de aprendizajes. Seguimos centrando gran parte de ésta en salas de clases y en la típica relación del profesor que enseña y el alumno que aprende.
Un ejemplo, de muchos existentes en el mundo a estudiar al respecto, es el de Salman Kahn, que creó “La Escuela al revés”, donde los niños deben aprender en sus casas, a través de videos que bajan de internet y en las aulas ejercitan, aplican y complementan los conocimientos adquiridos con el necesario apoyo del profesor.
¿Las nuevas tecnologías no nos dicen nada o muy poco?
¿La forma como el niño aprende hoy a manejar un celular desde pequeño no nos está mostrando caminos y lógicas diferentes de aprendizajes?
Quinto, en el ámbito técnico y universitario se requieren profundos cambios metodológicos que posibiliten formar un capital humano con capacidad innovadora. Es sabido que esto no se logra solo con conversar sobre el tema de la innovación o invitar a innovar, sino que hay que hacerlo una práctica permanente en todo el proceso de aprendizaje. Naturalmente que significa partir por los propios académicos que tienen que reformularse en su manera de enseñar. Por lo mismo es un proceso largo y complejo.
Mientras tanto, el país necesita con urgencia más técnicos que profesionales y todos con capacidad innovadora y lamentablemente no los tenemos. Si esto no se aborda con la urgencia necesaria, sinceramente estamos hipotecando nuestro desarrollo. Sin embargo en la reforma de la educación de esto poco o nada se habla.
Es imperioso lograr, en este campo, que el pragmatismo supere al ideologismo.Quizás son muchos en nuestro país, los que al igual que yo, exigen una explicación.