Hoy he recibido una carta de mi abuela. Ella está de viaje visitando a una sobrina que vive en La Haya. Ayer me escribió por Whatsapp diciéndome que el resultado del partido de fútbol entre el equipo del Canciller y el del personal de la embajada terminó 3 x 2, por cierto, a favor del equipo de Heraldo. En ese mensaje me anunciaba que estaba terminando una carta que me enviaría por email. Esa es la que ahora les quisiera compartir.
Querido nieto:
Hoy es un gran día, pues se han se conocido, por fin, los títulos de los informes que el ministro del Interior Rodrigo Peñailillo preparó para la Empresa de Giorgio Martelli y por los cuales recibió una considerable suma de dinero.
Son tres informes con “sugerentes títulos”: “Crisis económica internacional; consecuencias y medidas en la Unión Europea”, “Flexibilidad laboral en la Unión Europea” y “Las políticas ante la crisis en el Reino Unido”.
Martelli, como él lo declaró hace algún tiempo atrás en un seminario de la Fundación Chile 21, es un “operador político” que se ha especializado en temas de financiamiento de campañas electorales.
Martelli y su empresa, por lo que se conoce hasta ahora, recibió cuantiosas sumas de dinero de parte de SQM, las cuales serían el origen de los pagos a Peñailillo, Jorrat y, como dice el diputado Andrade, los “amiguis” de éstos.
La prensa transcribe una declaración de nuestro ( todavía) ministro del Interior en la que dice a propósito de haber mostrado los estudios, a unos periodistas del diario La Tercera: “si había alguna duda, ha quedado claro”.
La he leído varias veces y he revisado otras fuentes periodísticas para ver si hay algún error en la transcripción de dicha declaración. Lamentablemente, todas las fuentes confirman ese texto.
Yo, por lo pronto, y parafraseando la declaración ministerial “ya no tengo dudas”.El punto es claro: nos están faltando el respeto. Están convencido que somos unos estúpidos.
Lamentablemente quienes suscriben la tesis de que estos estudios fueron pagados por una empresa que los compró a Martelli sólo pueden hacerlo desde la ingenuidad absoluta o la tontera desatada. Declaro solemnemente que lo de la “ingenuidad” es un punto que agregué a último minuto en mi carta con el sólo motivo de proteger a algunas autoridades que respaldan las declaraciones del ministro.
Pasando a otro tema. Hoy pude ver, usando la web, la entrevista que don Francisco le hiciera al ex Presidente Lagos. ¡Qué pena que se termine Sábados Gigantes!
El ex Presidente hizo un mea culpa por el diseño del Transantiago y dijo que estamos en una crisis política: “No es una crisis económica, ni social; es política”. Y luego sentenció: “de aquí se sale con la verdad”.
Si lo que plantea el ex Presidente es la clave para salir de la crisis, lamento decirte que parece que nos queda aún camino por recorrer.
Para terminar, te cuento que me quedaré un par de semanas por aquí gozando de las flores, los arenques y de unos quequitos fantásticos que me comí cuando fui a conocer el museo de Van Gogh en Amsterdam.
Ah. No te olvides de preguntar a tus amigos si tienen alguna seña sobre si nuestra presidenta cree en la versión de los “escribidores de informes”.
Cariños, Carmela.