Un reciente estudio del retail reveló que los regalos de Navidad más deseados por los niños para este año son los smartphones y las tablets. Una tendencia mundial, en la cual Chile no es la excepción, como lo confirmó el reciente estudio efectuado por la consultora IDC, con el patrocinio de ACTI, donde se observó que sólo este año se han vendido más de seis millones de teléfonos inteligentes, mientras que las tablets triplicaron su venta.
Ambos equipos presentan características comunes: son móviles, nos permiten estar conectados las 24 horas del día, son fáciles de usar y permiten acceder a cientos de aplicaciones que van desde los juegos hasta medidores de calorías.
Por su gran facilidad de manejo, los niños de la actual generación aman las tablets, mientras que los adolescentes prefieren los teléfonos inteligentes, por el acceso a las redes y la comunicación con sus amigos.
Las peticiones hechas por los niños son para muchos sorprendentes, más aún cuando se ha visto que antes de caminar ya juegan con una tablet. Atrás quedaron las muñecas y los triciclos, los que fueron reemplazados por la tecnología, que se ha insertado en nuestras vidas.
Así lo demostró la consultora norteamericana Common Seense Media, en un estudio hecho en Estados Unidos, detectando que el 38% de los niños menores de dos años utilizan los smartphones y las tablets para jugar o ver vídeos y que el 70% de los niños usan con soltura estos dispositivos al ingresar al colegio.
Una situación que llama a la reflexión y a la responsabilidad de las familias, una de cuyas principales funciones es la de educar.Y en ello, esta tendencia los puede ayudar, pero no para usarla como una niñera virtual, sino que en un instrumento de aprendizaje, usando programas amigables y supervisados por los adultos.
Hay que pensar que cada día más y más niños van a mostrar una fascinación por tablets y teléfonos de última generación, y veremos cómo aprenden y manejan la tecnología con una facilidad que impresiona.
Estos nativos digitales vivirán otra realidad, deberán buscar soluciones a un mundo en crisis, pero a la vez tendrán una expectativa de vida mayor que nuestros antepasados, en la que sus cuerpos podrán cohabitar con adminículos tecnológicos que les facilitarán el trabajo, la actividad física y la comunicación, entre otras cosas.
Por ello resulta casi normal ver cómo las casas comerciales publicitan las tablets, smartphones y otros artículos TI, con una clara orientación al público infantil y pre-adolescente. La tendencia es mundial y Chile, estando a la vanguardia en el continente no podía estar ajeno a esta tendencia.
Es una nueva realidad que puede asustar a otras generaciones, pero que sin duda abre un mundo de oportunidades a nuestros niños, niñas y jóvenes.
Estamos viviendo la “revolución” de la tecnología, donde la movilidad, tanto en las conexiones como en el almacenamiento de datos, es acogida en forma transversal, porque nos conecta con todo el mundo en tiempo real y coloca el conocimiento al alcance de la mano, lo que ciertamente hará de nuestros nativos digitales unos ciudadanos más preparados para el futuro.