En estos días se publican noticias que dan cuenta de la gravedad de la crisis que afecta a muchos países desarrollados, especialmente en Europa.
Sólo algunos fanáticos del liberalismo chileno se atreven a culpar al sistema de pensiones de reparto en Europa como el responsable de la gran crisis, ya que las personas serias saben que ha sido provocado por el capitalismo salvaje que crea instrumentos financieros para favorecer la especulación jugando a que la deuda la paguen los millones de personas comunes en el mundo como ha seguido ocurriendo, generando déficit enormes que han puesto en jaque los equilibrios financieros y provocando crisis políticas en varios países del primer mundo.
Es efectivo que allá entre las medidas adoptadas está la de postergar la edad de pensionarse y algunos recortes a las jubilaciones más altas, pero entre muchas otras medidas, ya que es la sociedad en su conjunto la que responde. En Chile, sólo pagan los costos los trabajadores.
Es verdad que no tenemos déficit fiscal generalizado por las pensiones, excepto los dos mil millones de dólares anuales que nos produce el sistema especial de las Fuerzas Armadas, que representa una parte importante del 5% del PGB que gastamos en previsión, casi 4 veces más de lo que se gastaba en 1981.
Pero así ocurre en cerca de 180 países en el mundo, dónde el sistema de reparto es la base también para los civiles de modo que no se trata de quitarles un beneficio, sino de abrirlo a otros que también se lo merecen.
Para financiarlo, tendrán que aportar más los empleadores, como sucede en casi dos centenar de naciones . Es verdad que no hay alarma pública por las pensiones, pero debiera haberla, por lo que está ocurriendo en Chile con los Fondos de Pensiones de los trabajadores, que no sólo sufren por las caídas de las Bolsas mundiales y chilenas, sino también por los turbios e ilícitos negocios que se urden a nuestras espaldas, como en el caso de La Polar y otros.
500 mil chilenos pensionados de las AFP por retiro programado han visto bajar sus pensiones entre un 10 y un 20% este año y el próximo también bajaran.
En Panorama Previsional de este mes, publicación oficial de la Superintendencia de Pensiones se señala: “En Chile, el número de pensiones pagadas en el mes de marzo de 2012 ascendió a 931.243 con un monto promedio de $176.663″. Pero los 464.289 pensionados en la modalidad de retiro programado han disminuido de $123.951 en septiembre del 2011 a $121.906 en marzo de este año, casi al valor de la pensión mínima garantizada por el Estado y seguirán bajando con este sistema. Y las rentas vitalicias se están haciendo más caras.
¿Para eso les pagamos a las AFP un 20% de nuestro ahorro previsional? Para las mujeres el sistema de AFP es más dañino aún, como explicaremos en otra ocasión.
Entre tanto, los uniformados, que permanecen en dónde debiéramos estar todos, el sistema de reparto, y que obtienen pensiones más de 10 veces superiores no sufren efecto alguno de la crisis. ¿Y que ocurre con nosotros, los civiles?
Veamos lo que nos dice el informe de la SP respecto al valor y rentabilidad de los Fondos de Pensiones al mes de abril de este año.
El valor de los Fondos de Pensiones alcanzó a $ 74.351.932 millones al 30 de abril de 2012, con una variación real negativa respecto a igual fecha del año anterior, de -1,2%. Casi nada, excepto que el 1, 2% de $ 74.351.932 millones son $ 743. 519 millones de pesos.
Si lo calculamos en dólares a $ 500 pesos, equivalen a unos US$ 1.500 millones de dólares, una vez y media los ingresos estimados de la Reforma Tributaria que actualmente se debate.
¿No sería bueno preocuparse en serio para resolver esta situación?
Miremos otro antecedente que muestra la urgencia de un debate sobre estos temas.
La misma Superintendencia de Pensiones ha publicado en estos días un cuadro muy decidor:
Rentabilidad Real de los Fondos de Pensiones
% DEFLACTADA POR U.F. Fondo
Pensiones abril 2012 may 2011-abr 2012 Promedio anual sep 2002-abr 2012
Tipo A – -1,21 -7,96 7,15
Tipo B – -0,70 -5,21 6,05
Tipo C - -0,23 -2,68 5,30
Tipo D – 0,02 -0,38 4,70
Tipo E- 0,49 2,76 3,86
No olvidemos que estos datos no incluyen los costos. Si comparamos estos antecedentes con las utilidades que obtienen las AFP, después de pagar todos sus costos e impuestos, vemos que ellas son más de 400% superiores al promedio de rentabilidad de nuestros fondos.
¿Cómo ocurre esto, si el 90% de sus utilidades los obtienen de las comisiones que les pagamos y si nuestros Fondos pierden y pierden?
Los peligros de la inversión en el exterior los recuerda la propia Superintendencia de Pensiones en su reciente boletín, dónde informa en una nota explicativa “que la rentabilidad (negativa) de los Fondos de Pensiones Tipo A, B y C se explica principalmente por el retorno negativo que presentaron las inversiones en instrumentos de renta variable nacionales y extranjeros“. Luego agrega: ” La rentabilidad (positiva) de los Fondos de Pensiones Tipo D y E se explica principalmente por el retorno positivo que presentaron las inversiones en instrumentos de renta fija nacional”.
Y concluye. “En el caso del Fondo Tipo D, la rentabilidad positiva de la renta fija nacional fue parcialmente contrarrestada por el retorno negativo de las inversiones en el extranjero y en renta variable nacional.”
Más claro echarle agua: Las inversiones en el exterior son un mal negocio para los trabajadores y un gran negocio para los grupos que los manejan.
¿No sería mejor invertir los cerca de 50 mil millones de dólares que hoy están en el exterior en Chile, para dar empleo, desarrollar las regiones y así evitar los estallidos como los de Aysén y otros lugares de Chile? El puente de Chacao, plantas desalinizadoras de agua de mar para el Norte dónde las napas se están secando, túneles para unir Chile con Argentina, carreteras y ferrocarriles modernos, hospitales adecuados, empresas que den empleo pueden hacerse realidad con nuestros fondos en Chile.
Hasta financieramente sería lo correcto, para que decir lo bueno que sería cuando se piensa en mejorar la calidad de vida real de los chilenos, vivan donde vivan.