El crecimiento económico y la correcta aplicación de políticas públicas permitieron a Chile alcanzar en 20 años un nivel de desarrollo medio. Esto trajo consigo que un importante número de personas viera mejoradas sus condiciones de vida y tuviera acceso a adquirir bienes durables como casa propia y automóvil.
También les dio la posibilidad de enviar a sus hijos a la educación superior. Estas familias, todas de esfuerzo, donde es común que ambos padres trabajen sienten que el Estado no les reditúa como se merecen.
En la anterior campaña electoral, el actual Presidente de la República, Sebastián Piñera, prometió que el sello de su mandato sería hacerse cargo de la demanda de estos nuevos integrantes de las clases medias emergentes.
Lamentablemente esto no se ha concretado.
Me quiero detener en un sólo ejemplo que demuestra la escasa preocupación del Ejecutivo por estos sectores de la sociedad. Hace dos años presenté un proyecto de ley, de artículo único y fácil despacho que posterga el pago de los permisos de circulación desde el mes de marzo al mes de junio.
Esta iniciativa nace de las innumerables conversaciones que he mantenido con gente de las 21 comunas de mi circunscripción que visito todas las semanas y que me han expresado lo difícil que es enfrentar el mes de marzo cuando se pertenece a la clase media.
Esto lo avala un estudio de la Cámara Nacional de Comercio que determinó que en marzo es cuando los chilenos más dinero desembolsan, y por lo tanto más se endeudan. La cifra indica que el aumento es del 40%.
A los gastos corrientes de cualquier hogar como salud, alimentación, vivienda y servicios, se deben sumar útiles escolares, uniformes, y matrículas en algunos casos. A eso debemos sumar el mayor gasto por el período de vacaciones.
¿Qué esperamos entonces para aliviar esta carga y transferir el pago de las patentes para junio? El Ejecutivo estableció una comisión para estudiar el tema, sin embargo, aún no toma la decisión de patrocinar esta iniciativa que irá en directo beneficios de millones de chilenos.
Hay quienes han expresado su preocupación por las arcas municipales. Eso está resguardado en el proyecto a través de un anticipo del Fondo Común Municipal por parte del Ministerio de Hacienda, que será restituido una vez que se recauden los dineros en la nueva fecha.
Haber dilatado el patrocinio de este proyecto es una verdadera injusticia para los sectores medios de nuestra sociedad. El beneficio habría sido enorme para todas las familias chilenas que poseen un vehículo.
Espero que el Gobierno entienda esta situación y por fin en el año 2013 este proyecto sea una realidad. No existe ninguna razón técnica para que el pago de este tributo se haga en marzo, por lo tanto el cambio de fecha solo necesitaba y necesita de voluntad política, la que parece no existir en La Moneda, pese a sus promesas a la clase media.