Qué difícil es ser adulto mayor en nuestro país. Las cifras, nuestros discursos y los medios de comunicación, señalan la importancia que tienen y que tendrán, ya que en un futuro cercano, habrá en Chile tantos adultos mayores como niños. Toda esta expresión y reconocimiento de la realidad, sin embargo, no se ve en hechos concretos.
Según cifras del INE, el próximo año, el llamado Índice de Adultos Mayores, que mide cuántas personas de 60 o más años hay por cada 100 menores de 15 años llegará a 73, cifra que aumentará a 87,8 en el 2020. Incluso, en la Región de Valparaíso, el índice llegará a los 103 en el 2020.
En el último 21 de mayo, la Presidenta de la República informó sobre una importante decisión que beneficia a este segmento de la población: en dos años, desaparecerá el pago del 5% en salud para un grupo importante de pensionados. El primer año, la disminución será del 5% al 3%, eximiéndose totalmente el pago al segundo año. Con ello, obviamente, aumenta la liquidez de las pensiones.
Son 340 mil personas de nuestro país las que se beneficiarán con este proyecto que exime de la obligación de efectuar cotizaciones del 5% en salud a pensionados mayores de 65 años.
También, se facilita el proceso de solicitud de la prestación a todos los beneficiarios del Sistema de Pensiones Solidarias de Invalidez, ya que un atraso en presentar la solicitud, causa discontinuidad en sus ingresos muy frecuentemente. Esto provoca que una vez ingresada la solicitud, se demoren casi tres meses para el primer pago de la Pensión.
Por otra parte, casi 120.000 beneficiarios del Sistema de Pensiones Solidarias, por no estar adscritos a ningún sistema previsional, no son causantes de asignación por muerte y de cuota mortuoria, concluyendo que son alrededor de 300.000 beneficiarios del Sistema que no están cubiertos por este beneficio. Por lo anterior, el Proyecto garantiza que todos los beneficiarios del Sistema de Pensiones Solidarias que fallezcan, generen una asignación que ayude a solventar los gastos funerarios.
La Cámara de Diputados aprobó por unanimidad estas normas, esperamos que la tramitación sea igual de expedita en el Senado y así estos beneficios comiencen a ser sentidos al operar de manera automática.
Esta medida no exigirá postulación, se implementará automáticamente, con un costo estimado anual de $55 mil millones, beneficiará a los adultos mayores que tengan más de 65 años de edad, con residencia en Chile al menos por 20 años y que integren un grupo familiar perteneciente a los cuatro quintiles más vulnerables de la población.
Esperamos también que desde el año 2017 se incluya en forma gradual a quienes aún deben pagar el 7%, salvo a aquellos con rentas superiores a 20 UF equivalentes a cerca de 500 mil pesos.
De esta manera, legislamos sobre los temas que interesan a la gente y efectuamos un merecido reconocimiento y pagamos una deuda pendiente con nuestros adultos mayores.
Fueron ellos, o al menos su gran mayoría, quienes en la década de los 80 marcharon por nuestras calles y avenidas, se movilizaron, se inscribieron y con un lápiz dijeron chao dictadura y bienvenida democracia. Sin embargo, eso no pudo evitar la muerte de un sistema solidario de pensiones, Piñera lo sepultó, pero nuestro compromiso como Nueva Mayoría e Independientes, es que habrá un sistema más justo que el de Capitalización Individualista de hoy.
El rápido envejecimiento de la población, y todo lo que ello implica en términos de necesidades y demandas, representa desafíos especiales y no sólo en salud, sino en el desarrollo de servicios y ciudades que reconozcan esta realidad.
Para ello, mejorar nuestro sistema de pensiones es clave, tal como lo es, asumir este desafío de verdad, de tal forma que tengamos un colectivo que fomente su representación, participación y visibilidad. Hay buenas noticias, por cierto; pero, seguimos trabajando.