Se acaba de dar un paso importante en la descentralización del país y también en la participación ciudadana. Después de largos años de tramitación y desacuerdos, se ha aprobado un mecanismo para elegir democráticamente a los Consejeros Regionales, también llamados “CORES”.
Con ello, ha quedado despejado el camino para que en noviembre próximo, junto con decidir quién será nuestra próxima Presidenta o Presidente de la República y quienes serán nuestros diputados y senadores, usted pueda definir, también, quiénes serán los Consejeros Regionales.
Nuestra región elegirá a 16 consejeros, que durarán cuatro años en sus cargos. La forma de elegirlos estará basada en las provincias. Cada una de las tres provincias de nuestra región, Elqui, Limarí y Choapa, elegirá 3 de ellos como base. Los restantes 7 se distribuirán según la proporción de cada provincia en el total de habitantes.
La relevancia de este hito radica en que muchas inversiones que se ejecutan en nuestras comunas y de las que depende la vida cotidiana de los vecinos, como el mejoramiento de establecimientos de salud, educación, pavimentaciones, iluminación, programas de agua potable y electrificación rural, habilitación de cuarteles policiales, construcción o reparación de espacios públicos y recintos deportivos, pasa por la decisión de los “CORES”.
Del mismo modo, hay grandes inversiones públicas, como aeropuertos, carreteras y hospitales, cuya inversión se materializa a través de convenios de planificación, entre los ministerios y el Gobierno Regional, lo que también involucra la decisión de estos Consejeros.
Su elección democrática permitirá que rindan cuenta de sus actos y decisiones y que la ciudadanía pueda, por la vía del voto, orientar las decisiones que se toman.Especialmente importante es la posibilidad de avanzar en la descentralización interna de cada Región, evitando que las decisiones se concentren en las ciudades más pobladas.
En los próximos años debemos profundizar este logro. Como ha propuesto la ex Presidenta y candidata, Michelle Bachelet, deberíamos elegir, también, los Intendentes Regionales. Ellos deben ser líderes locales y tener la fuerza de su elección popular para enfrentar al gobierno central, exigir soluciones o alertar sobre decisiones equivocadas.
Asimismo, hay que continuar con el traspaso de más recursos y atribuciones a los Gobiernos Regionales. Las decisiones deben tomarse cada vez más cerca de la gente. Para ello, debe descentralizarse el Estado y dotarse de capacidad técnica a las regiones.
Del mismo modo, tenemos que impulsar más decididamente la participación.Por ello es que luchamos por una nueva Constitución donde se pueda incorporar herramientas tan potentes como las consultas y plebiscitos, nacionales o locales; la iniciativa popular de ley y ampliar los órganos de gobierno municipal. Por sobre todo terminar con el binominal.
El centralismo y la falta de participación ha impedido que Chile crezca armónicamente y que la ciudadanía se sienta representada e incluida en las decisiones, tal como ha sucedido en nuestra región en el marco de la sequía, donde hemos quedado cautivos de las decisiones que vienen desde La Moneda.
La elección directa de consejeros regionales, es por cierto un paso importante para ir rompiendo el centralismo. Estamos dando pasos en el sentido correcto. De todos depende que sigamos avanzando.