La idea de convertir la provincia de Ñuble en Región entró en tierra derecha. La decisión de enviar el proyecto de ley es sólo voluntad del Ejecutivo.
Y, en este sentido, resulta alentador que antes de fin de año el Gobierno espere contar con una propuesta técnica sobre la prefactibilidad para que Ñuble sea Región.
El objetivo es disponer de la información necesaria para analizar y evaluar los criterios de desarrollo económico, social, ambiental, cultural y el costo para el Estado que significará la creación de una nueva institucionalidad independentista.
Alcaldes de diferentes tendencias políticas se comprometieron recientemente en Chillán con apoyar la iniciativa que entra en esta etapa clave.
Lo hacemos porque estamos convencidos de que es uno de los principales caminos para alcanzar el desarrollo de una población que supera las 500 mil personas, las cuales esperan con ansias solucionar la pobreza rural y problemas tan básicos como la falta de conectividad, abastecimiento de agua, electrificación, alcantarillado y tratamiento de aguas servidas, entre otros.
El Gobierno de Sebastián Piñera Echeñique, ya se había comprometido el 30 de octubre del 2009 en Chillán a cumplir la voluntad de la ciudadanía en cuanto a que Ñuble sería Región.
Y, la prueba más concreta es la decisión de realizar las transferencias de fondos a la municipalidad de Chillán para agilizar el proceso del llamado de licitación y convocar a empresas y universidades a postularse para la ejecución del estudio técnico de prefactibilidad. Una vez conocido el informe técnico , deberá redactarse el consecuente Proyecto de Ley para que el Parlamento se pronuncie al respecto
En este proceso, el Senador Víctor Pérez, de la Unión Demócrata Independendiente, UDI, ha jugado un rol fundamental, gracias a su cercanía con La Moneda, ya que logró instalar con rapidez en la agenda del Gobierno tanto la idea de Ñuble Región como la creación de una provincia nueva en la zona.
En tanto que también han sido clave las gestiones del senador DC, Hosain Sabag, quien ya en octubre del 2010, en su calidad de presidente de la Comisión de Gobierno de la Cámara Alta, acordaba en el Congreso realizar gestiones ante el Ejecutivo para evitar que se continuara postergando la legítima aspiración de que Ñuble sea Región.