La sociedad chilena, en las encuestas y en las calles, ha mostrado su molestia con las profundas desigualdades sociales y contra los abusos empresariales. Hoy los estudiantes han reaparecido en las calles reclamando por una educación de calidad para todos y que no siga esta educación mala, cara y que se funda en la búsqueda del lucro.
Construir una sociedad con menos desigualdades requiere una profunda Reforma Tributaria y que las grandes empresas y los millonarios del país paguen más impuestos y no los eludan como ocurre hoy.
Hoy tenemos un sistema tributario injusto donde los ricos y grandes empresarios tienen diversas fórmulas para eludir el pago de impuestos y proporcionalmente pagan más las personas de trabajo en los impuestos de 2ª categoría.
Se requieren eliminar las exenciones tributarias regresivas e injustas y derrotar las resistencias de la UDI y de los empresarios quienes para defenderlas impulsan “una campaña del terror” con el discurso de que estas medidas afectarían la inversión y el empleo.
Los abusos y las desigualdades requieren una Reforma tributaria que apunte a que los ricos y las grandes empresas paguen más impuestos, se acaben diversas exenciones y se logre recaudar para el Fisco un 3% del PIB para implementar nuevas políticas sociales.
Chile tiene una baja carga tributaria –sólo 20% del PIB- mientras que los países desarrollados y con buenos sistemas educativos y de protección social recaudan entre 30% a 35% del PIB como ocurre en la mayoría de los miembros de la OCDE.
Proponer una mini Reforma Tributaria que recaude sólo 0,3% del PIB y rebajas tributarias que favorecen al decil más rico como es la disminución total del impuesto de timbre y estampilla o que se rebaje de impuestos el gasto en educación del 7% más rico del país es la demostración de que Piñera sólo propondrá un ajuste tributario.
La derecha sólo hace “reformas de macetero” y cree que con el despliegue comunicacional convencerá a la comunidad de que es un avance.
Chile necesita recaudar más: un 3% del PIB para desarrollar mejores bienes públicos en educación, salud y pensiones.
Como Piñera no lo hizo, este tema será un eje principal de la futura campaña presidencial porque un gobierno distinto a la derecha debe hacer la Reforma tributaria que la mayoría pide y que es necesaria para avanzar hacia un Chile más equitativo.