Es el tercer bombero voluntario en ejercer la presidencia nacional de Bomberos de Chile, cargo que ocupa desde el año 2006.
Ingresó como voluntario del Cuerpo de Bomberos de Florida en su región natal a los 22 años de edad, y tras un receso a partir de 1973, regresó a las filas de ese cuerpo en 1978, donde llegó a alcanzar el cargo de superintendente, el que ejerció durante 27 años.
Durante ese lapso, su progresivo interés en aportar al desarrollo del bomberismo voluntario en su región y en el país, lo llevaron a desempeñarse como Asesor Jurídico del Cuerpo de Bomberos de Concepción, del Consejo Provincial y del Consejo Regional, siendo también Vicerrector de la Sede Bío-Bío de la Academia Nacional de Bomberos, Inspector Nacional de Asuntos Jurídicos, Director Nacional y Vicepresidente Nacional de Bomberos de Chile.
Entre las tareas destacables de su quehacer como Oficial Nacional, queda de relieve haber sido el gestor del ingreso a la institucionalidad bomberil de los procedimientos sustentados en proyectos, abriendo el bomberismo chileno a todas las posibilidades que, sobre esa base, permiten financiar infraestructura y equipamiento para el servicio, por ejemplo, a través del acceso al Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) que resuelven los Gobiernos Regionales del país.
Con esta finalidad, activó fructíferos contactos con los organismos públicos y privados que se encontraban a la vanguardia en este tema.