A Yorgos Papandreu Jr., su padre y su abuelo también fueron primeros ministros, se le acaba de ocurrir (¡vaya ocurrencia!) que los estados son soberanos y que la soberanía reside en la nación.
Es griego.
Ante la ocurrencia ardió Troya, como sucedió con sus antepasados.
Los dos más grandes empleados bancarios de Europa – la Sra.Merkel y el Sr. Sarkozy- le pidieron explicaciones, le recordaron sus deberes y le señalaron que la estabilidad de la moneda de los grandes bancos europeos – el euro- era más importante, lejos, que su soberanía y que los viejos principios de la democracia.
Grecia, como estado, debe someterse al gran capital financiero –que nunca paga sus errores porque tiene la manija- y los ciudadanos griegos –que se oponen a perder trabajos, previsión e ingresos- deben aceptar lo de las ganancias bancarias o ser reprimidos. Así es la vida.
Le chantajearon con un imprescindible “apoyo” de 8 mil millones de euros y Papandreu parece haber entendido, de una vez, los nuevos principios del mundo libre y moderno, que había olvidado por una iluminación libertaria.
De la deuda griega son acreedores los grandes bancos alemanes y franceses, esos que manejan la economía de los países en que laboran, por un breve tiempo más, Merkel y Sarkozy.
Grecia no es un paisito de segunda categoría en Europa, como suelen informar (desinformar) los grandes medios.
Según nos informa recién las Naciones Unidas, con su Índice de Desarrollo Humano, Grecia ocupa el lugar 22 en ese índice de calidad de vida, por encima de Italia (23), Luxemburgo (24), Austria (25) y, afírmese…Reino Unido (26).
El puntaje que le da a Grecia su per cápita, su expectativa de vida y sus servicios, es superior al de la mayoría de los países europeos.
De vez en cuando los especialistas de la ONU develan las grandes mentiras –reiterativas- de los que mandan el mundo. Al poco tiempo, sí, tiende a olvidarse.
El “Índice de Desarrollo Humano” de la ONU parece estar confeccionado “por los comunistas” y seguramente va a ser archivado o tergiversado.
En él aparece Cuba en el lugar 51, por encima de Rusia que ocupa el lugar 66.
Como se sabe en Cuba sigue habiendo una economía centralmente planificada y unos servicios de salud y educación estatales, mientras en Rusia ha habido una renuncia al comunismo y una radical apertura al desarrollo capitalista. El ex país de los soviets ha dejado de ser la segunda potencia mundial y en este índice está donde está: 66. ¿En qué queda lo del espectacular desarrollo ruso de los últimos años?
La calidad de vida en Cuba, en este estudio de Naciones Unidas, es sólo superada en América Latina por Chile, Argentina y Uruguay.
Está por encima de México, Brasil, Costa Rica, Colombia y todos los demás.
Otra cuestión significativa es la evaluación de Libia.
El país de Kadafy – prácticamente destruido en los últimos meses- ocupa en el estudio de Naciones Unidas el primer lugar de África (53), y está por encima de Arabia Saudita (55) y de más de un centenar de países.
Libia es el país que se nos mostró, a través de los grandes medios, como tribal, subdesarrollado, sin expectativas y con una juventud que, sin horizontes, deambulaba por ciudades desérticas.
Mientras Libia es 53, Túnez es 94, Jordania 95, Argelia 96, Egipto 113 y Marruecos, que está muy cerca y al que nunca se ha pensado bombardear a pesar de tener un rey dictador y una pobreza extrema extendida, figura en el 130. “Es muy bonito” suelen decir sus visitantes. Es posible.
La publicitada Sudáfrica – muchos se refieren a ella como el más desarrollado país africano- está en el número 123.
Y Vietnam, que ha ido cambiando su política económica y se ha abierto a los capitales norteamericanos, figura en el número 128.
Finalmente, Haití, para muchos el arquetipo de la miseria y el atraso, tiene, a pesar de sus inmensos problemas, por debajo suyo a Angola, Yibuti, Tanzania, Costa de Marfil, Zambia, Gambia, Ruanda, Malaui, Sudán, Afganistán, Guinea, Etiopía, Sierra Leona, República Centroafricana, Mali, Burkina Faso, Liberia, Chad, Guinea Bissau, Mozambique, Burundi, Níger, República Democrática del Congo y Zimbawe.
La inmensa mayoría de ellos estuvieron por siglos bajo dominio europeo, como colonias o protectorados, y hasta hace pocos años.
El listado allí no habla bien de Haití. Habla mal del mundo.
Los grandes medios de comunicación intermedian, manejan, educan a su amaño.
Cuando son manejados por mano monopólica – como sucede en el planeta y en Chile- moldean al antojo.
Los grandes medios suelen estar en las mismas manos de quienes manejan el poder económico y el poder militar.
Cuando tergiversan crean una civilización de la oscuridad y del engaño.