28 ene 2014

¿Qué rima con Eyzaguirre?

A los pocos minutos de que Michelle Bachelet anunciara su gabinete, las redes sociales comenzaron a llenarse de la misma pregunta con tono de broma, ¿qué rima con Eyzaguirre? Imaginando ya las marchas que vendrán este 2014 y los gritos criticando a quien será el interlocutor natural del movimiento estudiantil, asumiendo por tanto que se convertirá en una especie de enemigo.

¿Tiene sentido ese escepticismo y esa mala reacción frente a su designación?

Analicemos su nombramiento desde el punto de vista de las razones de Michelle Bachelet.

No por razones antojadizas, sino porque una y otra vez se ha insistido que es ella quien tiene el timón del gobierno y de la Nueva Mayoría, armada en torno a ella.Por lo tanto, resultan relevantes las (escasas) señales que entrega para saber qué esperar, en especial en un área tan relevante como la educación y donde las promesas de campaña fueron tan ambiguas.

Es muy tentador y razonable criticar a Eyzaguirre por su pasado, en especial por haber sido un ministro clave en la aprobación del nefasto CAE, y por sus permanentes lazos y relaciones con el gran empresariado, antes, durante y después de su participación en el gobierno de Lagos.

El Rector de la UDP, Carlos Peña, hace una crítica profunda a Eyzaguirre por su supuesta “conversión” respecto a su visión en educación. Pero hagamos el ejercicio de olvidarlo. Al fin y al cabo, la propia Presidenta electa ha dicho que en sus 4 años en Nueva York “evolucionó”. ¿Por qué no puede haber ocurrido el mismo fenómeno con sus nuevos Ministros?

La mala noticia es que al olvidar su pasado, es poco lo que queda. La única postura que se le conoce en educación es una columna escrita “curiosa” y “coincidentemente” pocas semanas antes del anuncio del gabinete.

En ella, reafirma que está a favor de la gratuidad en educación superior, pero sin explicitar si está pensando en simplemente aumentar la cantidad de becas -y así mantener intacto el modelo en términos gruesos-, o si se tratará de aportes directos a las instituciones, para que así puedan funcionar en pos de la generación de conocimiento y no de la competencia por las lucas.

Menos aún sabemos su opinión sobre la contradictoria promesa bacheletista de “fin al lucro en todo el sistema educativo” y el permitir que se lucre si se renuncia a recibir fondos públicos, y así podríamos seguir con las diversos ejes que necesariamente deberá contener una reforma educativa profunda.

Los desafíos de Eyzaguirre no serán menores. Y frente a tanta ambigüedad, tanta impostura y tanta contradicción, hay algo que se reafirma de manera clara: la participación protagónica del movimiento estudiantil y sus organizaciones es la única garantía posible de que la reforma educativa sea coherente con las movilizaciones de estos últimos años.

En un área tan sensible, democratizar la discusión y las resoluciones no es una cuestión procedimental, es la única forma de hacer una transformación sustantiva en educación y no simplemente un ajuste parche más.Devolver la política a la gente no es simplemente un gusto, es una necesidad.

La educación ha sido anunciada como el área más prioritaria para promover transformaciones estructurales. Y al respecto, el programa de Bachelet fue siempre abundante en titulares rimbombantes pero pobre en contenidos sustantivos.

De ahí que la designación del Ministro era una señal importantísima para saber cómo vendrá la mano.Lamentablemente, con la designación de Nicolás Eyzaguirre las ambigüedades se mantienen, y recurrir a su pasado sólo empeora tal percepción.

Es de esperar que la señal no sea un anticipo de lo que viene, que el ejercicio de inventar gritos sea superfluo y que el nuevo Ministro esté a la altura de lo que los estudiantes y las familias chilenas venimos exigiendo hace tanto tiempo: una reforma educativa, construida en forma democrática y que erradique al mercado de la educación para que ésta pueda ser un derecho garantizado por el Estado.

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  • Felipe Estrada

    Al final, el moviemiento logrará obstaculizar lo que él mismo proclama, la concreción de la educación gratuita. Si Bachelet sale dando un discurso con un lapiz “bic” en la mano entonces eso seguro será un signo de apoyo al capital. Cortémoslo por favor, ganó una candidata que pretende cambiar el modelo, pero parece que es más rentable para la imagen criticar eternamente, sin saber realmente si este proyecto prospera o no.

    • Camilo Martinez

      Felipe, una cosa es estar dispuesto a cambiar, pero cómo, ¿Loce por LGE?

    • Ramón

      Bachelet, ¿CAMBIAR EL MODELO? Qué manera de autosugestionarse y no querer ver la realidad. Bachelet es de derecha, profundamente neoliberal. Su “programa” es una sumatoria de ambigüedades y contradicciones, HUMO.

  • Sergio Terán

    Eyzaguirre fue elegido para cumplir con el programa de Gobierno de la Nueva Mayoría, encabezado por la Presidenta Bachelet, programa que, al parecer, el columnista no leyó.

  • César Cuevas

    Me resulta bastante lógico que exista incertidumbre sobre muchos temas, después de lo desconcertados que nos dejó la concertación validando el modelo de la derecha pinochetista. SIn embargo, creo que cuando se elige un gobierno por abrumadora mayoría en LAS URNAS (los que no votan no cuentan en ninguna parte, ni siquiera en la elecciones universitarias eso lo sabe el columnista), el programa de gobierno merece un voto de confianza. Concuerdo que no es sano, ni sabio comenzar con premoniciones obstaculizadoras antes que siquiera asuma el nuevo gobierno. Muchos, se llenan la boca con la democracia y sus virtudes pero a la hora de la verdad, ¿son consecuentes con lo que predican? Espero que Eyzaguirre haga una excelente gestion y se avoque a cumplir el programa de gobierno que indica avanzar hacia educación universal gratuita en todos los niveles. No se si yo soy ingenuo, o el columnista asi como otros miembros de la Izquierda Autónoma están preparando el escenario para oponerse a todo, lo cual no me rima con democracia. Pero, cuando yo escucho educación Universal y gratuita, no me imagino becas.
    Por otra parte, tampoco me rima con democracia acarreo, ya que muchos militantes de la Izquierda Autónoma de distintas regiones del país cambiaron su lugar de votación a Santiago para lograr elegir a Francisco Figueroa en Ñuñoa, Me indignaría saber que la Ena Von Baer fue elegida en Valdivia porque gente de Temuco cambio su lugar de votación para lograr elegirla. ¿Cual es mi punto? Hay que ser democrático en todas, no solo en lo que a mi me conviene. ¿Que sabe alguien de Valdivia, de las necesidades y esperanzas de los electores que viven en Ñuiñoa? ¿Que sabe Moreira de la región de Los Lagos y sus necesidades? Asi que cabros está bien alegar y exigir, pero tambien hay que hacer la otra parte. Tambien hay que ser responsables a la hoar de ejercer nuestros derechos y nuestra rebeldía. Ser rebelde, significa ser dueño de mi rebeldía y elegir bien la batallas con altura de miras…