Nuevamente una Fiscalía ingresa a una repartición pública para incautar computadores y documentos, tal como ocurrió con el escándalo de la licitación de equipos antidroga del Plan Frontera Norte. Esta vez, los operativos se realizaron en el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) , después de la renuncia de su titular tras las presiones por denuncias de manipulación de cifras en el Censo 2012 y problemas con el cálculo del IPC.
Una imagen que deja a la administración Piñera no sólo cuestionada, sino a todas luces situada al margen del cumplimiento de la ley.Sí, porque en este caso lo que se investiga es la posible manipulación de información pública, es decir, de todos los chilenos y con impacto en todos los hogares.
No da la mismo señalar que somos más o menos ciudadanos, no da lo mismo decir que un IPC es más o menos alto. De estas dos cifras se derivan muchas decisiones y políticas públicas y, también, acciones en el mundo privado.Son indicadores relevantes, que siempre contaron con credibilidad y que hoy dejan al INE bajo la lupa y en crisis.
La excelencia de la que tanto habló el Presidente al asumir su mandato ha quedado literalmente como otra más de las promesas no cumplidas y, lamentablemente, los efectos se ven hoy en un terreno donde los impactos de un trabajo mal hecho son enormes y en diversas áreas.
Se ha señalado que es necesario hacer de nuevo el Censo, pero señalemos que se gastaron más de 24 mil millones de pesos y que Chile tiene enormes demandas y necesidades como para permitirnos un gasto de esta naturaleza sin buenos resultados.
¿Quién paga? ¿Quién responde? Ya renunció el titular del INE, tal como lo solicitó la bancada a primera hora, pero su jefe directo, el Ministro Longueira, brilla por su ausencia.
Por eso, hemos pedido una sesión especial a la que citaremos al secretario de Estado; estamos pidiendo, además, que en el caso del IPC se asuman los errores en las metodologías y se rectifiquen todas las decisiones vinculadas, entre ellas, la propuesta del Gobierno por un salario mínimo de 205.000 pesos que a todas luces hoy puede subir, considerando que los estudios internacionales aseguran que el IPC fue subestimado en un 2 %.
El Gobierno está en un callejón sin salida, donde la única opción es rectificar y reconocer los errores.
En el Congreso, estábamos discutiendo la autonomía del INE y vamos a terminar discutiendo y debatiendo, finalmente, sobre su falta de credibilidad.
Por lo tanto, corresponde una rápida y urgente intervención por parte del Gobierno, el silencio no contribuye. Hay que restablecer la credibilidad en lo que son las cifras más básicas del sistema, como son los datos del Censo y el IPC.
No sólo se ha generado un daño al sistema estadístico, sino al país entero y a nuestra imagen frente a organismos internacionales. La excelencia nunca llegó, pero no aceptarlo es aún peor.