09 dic 2011

Reforma tributaria: derechos y deberes ciudadanos

Demandada por la oposición cuando el año pasado se presentaron los resultados de la CASEN 2009 y replanteada este año con más fuerza por la crisis educacional, la reforma tributaria ha aparecido como una dimensión ineludible de la agenda política, en tanto respuesta a las distintas caras de la desigualdad social.

Razonable es comenzar a constituir equipos técnicos para abordar el análisis de esta compleja materia fiscal, pero desde ahora el debate debe ser político.

Se trata de convenir sobre cuáles deben ser los fundamentos, criterios orientadores y prioridades de una reforma tributaria coherente con un proyecto político de inclusión social.

Recién entonces habrá lugar para que participen los equipos técnicos capaces de formular las medidas concretas que materializan dichas concepciones.

Todos los estudios, nacionales e internacionales, muestran que el sistema tributario chileno se caracteriza: en primer lugar, por una baja carga tributaria; en segundo término, por una estructura tributaria regresiva; y, en tercer lugar, por una evasión y elusión que, siendo de las más bajas de la región, todavía deben ser combatidas.

Veamos el primer aspecto, el relativo a la carga tributaria.

La evidencia disponible revela que Chile tiene una baja carga tributaria, no sólo en relación a cuánto tributan países con equivalentes ingresos per cápita, sino en cuanto al potencial de tributación que nuestro nivel de desarrollo permite. Basada en datos de nuestra economía, CEPAL estima que Chile tiene un potencial de incremento de su carga tributaria de 3 puntos del producto interno bruto.

¿Y por qué importa elevar la carga tributaria? La sociedad chilena ha avanzado en conciencia y exigencia de derechos. Y los derechos no son estáticos, sino que progresivos a medida que las sociedades se desarrollan.

A esta realidad no es posible responder sin recursos fiscales garantizados de manera permanente y cuya progresión asegure que los derechos sean efectivamente ejercidos a lo largo del tiempo.

Veamos el segundo aspecto, el referido a la estructura tributaria.

Hasta el propio presidente Piñera señaló hace un par de días que se requiere una tributación más equitativa. Ello, porque todos los análisis indican que la nuestra es una estructura tributaria regresiva.

La mayor proporción de nuestros ingresos fiscales proviene de impuestos indirectos (especialmente el IVA) y que termina por pesar más sobre los hombros de quienes menos tienen. En menor proporción los ingresos fiscales provienen de impuestos directos asociados a las rentas de las personas y empresas.

Además, la vigencia de diversas exenciones que se han legalizado por presiones corporativas de grupos de interés en diversos momentos, limitan que el Estado pueda recaudar impuestos de sectores con altos ingresos.

Es decir, tenemos una composición tributaria que termina siendo generosa con los que más tienen y muy exigente con los sectores de menores ingresos del país.

¿Y por qué importa revisar la actual estructura tributaria? Si con la recaudación tributaria el Estado es el responsable de promover mayores oportunidades y justicia social a través de políticas sociales redistributivas, resulta paradójico que transfiera subsidios, prestaciones y bienes sociales con los impuestos que pagan, mayormente, los sectores menos acomodados del país.

El impacto distributivo que tiene nuestro gasto social es un esfuerzo destacable y encomiable del Estado chileno, pero tiene un límite, pues se basa en una recaudación fiscal regresiva que sólo mitiga parcialmente la brecha de ingresos en el país.

Si se mide la distribución del ingreso en gran parte de los países europeos resulta que la brecha distributiva disminuye a la mitad después del pago de impuestos. En Chile, en cambio, tal brecha de ingresos se mantiene casi igual, medida antes y después del pago de impuestos.

Y la explicación está que en Europa, a diferencia nuestra, la mayor recaudación fiscal proviene de los impuestos a la renta de personas y empresas, siendo menor la proporción de impuestos indirectos.

Finalmente, veamos los problema de evasión y elusión tributarias.

Todo lo que puede avanzar un país con una mayor carga tributaria y con una mejor composición de ésta, se pierde si los ciudadanos dejan de pagar sus impuestos, sea directamente por evasión, o bien eludiendo el pago de sus obligaciones tributarias por distintos mecanismos.

Comparado con los restantes países de América Latina, nuestros niveles de evasión y elusión son bajos, pero siguen siendo una importante fuente de pérdida de ingresos fiscales por parte del Estado.

¿Y por qué importa mejorar los niveles de recaudación tributaria? No sólo por la razón obvia de que ello implica disponer de los recursos que el Estado requiere para cumplir su indelegable e insustituible responsabilidad social, sino porque una sociedad fundada en derechos requiere que las responsabilidades no se evadan, ni eludan.

Por cada peso que un ciudadano de altos recursos deja de pagar al fisco, habrá otro ciudadano de bajos ingresos que dejará de tener posibilidades de insertarse socialmente con las mismas posibilidades que aquel que defrauda al fisco e incumple sus compromisos.

No hay trabajador que cobre por planilla que pueda evadir sus responsabilidades tributarias como lo puede hacer, con ayuda de hábiles expertos tributaristas, su empleador.

En suma, el sistema tributario chileno recoge en sí mismo la desigualdad de derechos y deberes ciudadanos. Eso sólo basta para fundamentar su reforma, más allá del necesario debate de montos y medidas apropiadas.

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  • http://twitter.com/FoxWolfLand José Cabezas

    Estimada Clarisa, una reforma tributaria va a estar siempre en relación a las necesidades del Estado para financiar el gasto corriente y de inversión. Por ello no se puede hablar en frío sobre el tema si no se tiene claro previamente los nuevos requerimientos de financiamiento que se desea incurrir en una decisión democráticamente adoptada por la ciudadanía cuando se opta por un determinado candidato a presidente y su respectivo programa de gobierno. Otra decisión democrática podría ser, aunque en Chile no existe el mecanismo legal aún, que mediante un plebiscito se vote por determinadas proposiciones de asignación de recursos por parte del Estado de Chile.
    En relación  a las prioridades actuales en donde asignar recursos es claro que tienen relación con educación, salud, el tema previsional, etc En todo caso este es un tema abierto y que puede cambiar.
    La carga tributaria en Chile,en relación a otros países del continente y de europa, sigue siendo baja de modo que aún se puede avanzar más en este aspecto.

    En relacióna la estructura, los sistemas de recaudación de impuestos en Chile se ha privilegiado  el sistema indirecto por ser este el de mayor rendimiento y el que logra mayor efectividad. El gran inconveniente de esta forma de recaudación es lo ya indicado por Ud. en el sentido de que es regresivo.
    Una forma de corregir su regresividad puede ser la posibilidad de declarar determinados productos de primera necesidad exentos del IVA. Aunque ello, va en contra de la simplicidad y de la economicidad en  la recaudación de impuestos.
    La  carga tributaria en Chile,en relación a otros países del continente y de europa, sigue siendo baja de modo que aún se puede avanzar más en este aspecto. Aún sigue siendo factible subir las tasas en el impuesto de primera categoría y modificar las tasas y tramos del global complementario. Lo mismo, se pueden revisar las tasas que actualmente se aplican en el royalty en el sector minero debido a que se trata de bienes no renovables y que actualmente éstas son muy bajas respecto a las que se aplican en otros países.
    En relación a la evasión y la elusión queda un amplio margen en el cual se puede trabajar y avanzar. Según estudio del SII para el año 1997 en las principales partidas se produjo una evasión de IVA de US$ 1.475 millones, en renta US$ 2332 millones, primera categoría US$ 1.360 millones. La estimación anual de evasión para el año indicado es de US$ 4.101.- millones. No dispongo de información acerca de los montos involucrados en los beneficios tributarios que implican rebajas al pago de impuesto, cuestión que implica que mediante una adecuada planificación tributaria se pueda pagar cantidades irrisorias e incluso solicitar devoluciones de impuestos. Tampoco en relación a la elusión se dispone de información que se pueda manejar en forma responsable. Sin embargo es por todo conocidos en Chile el caso de la minera La Disputada de Las Condes, hoy Anglo American que mediante una planificación tributaria “at the chilean way”  nunca pagó impuesto de primera de categoría. Espero que producto de la venta de las acciones a la japonesa Mitsubichi pague el 35% de impuesto a las utilidades por el hecho de que el vendedor ”Inversiones Anglo American Sur, dueña de AAS. Su giro es de explotación de minas y sociedades de inversión y rentistas de capitales mobiliarios”.

  • http://twitter.com/FoxWolfLand José Cabezas

    Estimada Clarisa, una reforma tributaria va a estar siempre en relación a las necesidades del Estado para financiar el gasto corriente y de inversión. Por ello no se puede hablar en frío sobre el tema si no se tiene claro previamente los nuevos requerimientos de financiamiento que se desea incurrir en una decisión democráticamente adoptada por la ciudadanía cuando se opta por un determinado candidato a presidente y su respectivo programa de gobierno. Otra decisión democrática podría ser, aunque en Chile no existe el mecanismo legal aún, que mediante un plebiscito se vote por determinadas proposiciones de asignación de recursos por parte del Estado de Chile.
    En relación  a las prioridades actuales en donde asignar recursos es claro que tienen relación con educación, salud, el tema previsional, etc En todo caso este es un tema abierto y que puede cambiar.
    La carga tributaria en Chile,en relación a otros países del continente y de europa, sigue siendo baja de modo que aún se puede avanzar más en este aspecto.

    En relacióna la estructura, los sistemas de recaudación de impuestos en Chile se ha privilegiado  el sistema indirecto por ser este el de mayor rendimiento y el que logra mayor efectividad. El gran inconveniente de esta forma de recaudación es lo ya indicado por Ud. en el sentido de que es regresivo.
    Una forma de corregir su regresividad puede ser la posibilidad de declarar determinados productos de primera necesidad exentos del IVA. Aunque ello, va en contra de la simplicidad y de la economicidad en  la recaudación de impuestos.
    La  carga tributaria en Chile,en relación a otros países del continente y de europa, sigue siendo baja de modo que aún se puede avanzar más en este aspecto. Aún sigue siendo factible subir las tasas en el impuesto de primera categoría y modificar las tasas y tramos del global complementario. Lo mismo, se pueden revisar las tasas que actualmente se aplican en el royalty en el sector minero debido a que se trata de bienes no renovables y que actualmente éstas son muy bajas respecto a las que se aplican en otros países.
    En relación a la evasión y la elusión queda un amplio margen en el cual se puede trabajar y avanzar. Según estudio del SII para el año 1997 en las principales partidas se produjo una evasión de IVA de US$ 1.475 millones, en renta US$ 2332 millones, primera categoría US$ 1.360 millones. La estimación anual de evasión para el año indicado es de US$ 4.101.- millones. No dispongo de información acerca de los montos involucrados en los beneficios tributarios que implican rebajas al pago de impuesto, cuestión que implica que mediante una adecuada planificación tributaria se pueda pagar cantidades irrisorias e incluso solicitar devoluciones de impuestos. Tampoco en relación a la elusión se dispone de información que se pueda manejar en forma responsable. Sin embargo es por todo conocidos en Chile el caso de la minera La Disputada de Las Condes, hoy Anglo American que mediante una planificación tributaria “at the chilean way”  nunca pagó impuesto de primera de categoría. Espero que producto de la venta de las acciones a la japonesa Mitsubichi pague el 35% de impuesto a las utilidades por el hecho de que el vendedor ”Inversiones Anglo American Sur, dueña de AAS. Su giro es de explotación de minas y sociedades de inversión y rentistas de capitales mobiliarios”.