11 sep 2013

Una agresión gratuita al país

Seguramente se me dirá que hay cosas que son noticias y que por sí misma “tienen valor periodístico”, que generan debate, que copan la opinión pública al día siguiente y, lo más importante (“nunca puede olvidarse”), que dan rating.

Sin embargo, a pesar de que no es una costumbre muy recurrente en la práctica de algunos medios de comunicación, determinados contenidos y/o reportajes, deben también ser evaluados en las consecuencias y en el momento de su puesta en escena.

La reciente entrevista al triste y dramáticamente recordado jefe de la DINA, Manuel Contreras, en medio de las diferentes reflexiones, polémicas, recuerdos y dolores a propósito de los 40 años del golpe militar, me parece francamente una agresión gratuita a la mayoría de los chilenos.

Especialmente lamentable es el hecho que ella haya sido realizada por dos periodistas tan brillantes como Mónica Rincón y Daniel Matamala.

Ni siquiera puede entenderse que se trata del derecho que tiene una persona a poder dar su versión de los hechos, ya que en los innumerables juicios a que ha sido sometido el señor Contreras ha podido ejercer dicho derecho y han sido precisamente los porfiados hechos, una y otra vez demostrados, los que han derivado en las consecuencias de público conocimiento: tendrá que seguir preso el resto de su vida y hasta le sobran cientos de años de presidio por los crímenes y horrores cometidos.

El sólo hecho de que, como resultado de la entrevista, haya que volver a contradecir a este señor y/o hacer aclaraciones al respecto, dicho más claramente, que haya que volver a dedicarle un minuto de tiempo y un cuarto de neurona a este personaje, me parece un favor a su persona inmerecido, impropio y absolutamente de más.

¿Quienes tomaron la decisión de hacer la mencionada entrevista, pensaron la impotencia, rabia, agresividad y dolor entrañable que deben haber sentido miles de chilenos al escuchar las patéticas y absolutamente esperadas (por su reiteración) palabras de Manuel Contreras?

Afirmaciones tales como: “hacer desaparecer un cuerpo lo encuentro ridículo”; “a mí no me gustaría que me torturaran, por eso no me gusta la tortura”; “yo di órdenes de no hacer desaparecer a nadie”; “en los interrogatorios de la DINA no se torturó a nadie”; “los detenidos desaparecidos están en el Cementerio General”, ilustran parte de un discurso que violenta y revive el drama de familias enteras, las que tienen que escucharlas sin tener la posibilidad de encarar tan cínicas e hirientes palabras.

Aún más, al ver las reacciones en las redes sociales y aunque son muy mínimas, surgen voces de jóvenes que ven en las declaraciones de Contreras algo posible de creer y/o a lo menos de plantearse el derecho a duda.

El que únicamente un sólo joven de Chile, que no vivía aún para la dictadura militar, pudiese creer el discurso del ex jefe de la DINA, ya constituye una siembra comunicacional lamentable, preocupante e innecesaria.

No tengo duda, así es la democracia, que habrá mucha gente que piensa lo contrario a lo expresado en esta columna, no obstante, me sentí impelido a decirlo porque también estoy cierto que interpreto a muchos otros.

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  • Giovanna Escanella .A

    Una Columna con un análisis de contenido con fuerza, claro y coyuntural, recomendable para cualquiera que se sienta representado como yo en cuanto a los medios de comunicación y su denigrante búsqueda de una noticia que no lo es, estilo actual de los medios por la prensa roja, de la cual me siento avergonzada como periodista y hastiada de que mis colegas recurran a ella y no aun periodismo serio como el que solíamos practicar antes de la farándula. En cuanto al entrevistado es un personaje que no merece ni siquiera ser recordado como un delincuente…Ernesto Moreno Beauchemin, en su líneas claras y precisas, señala una verdad y opinión que me identifica totalmente, como se que hablará también por muchos de ustedes…

  • Marcelo Gutiérrez Billa

    Completamente de acuerdo, y muy lamentable la sensación que queda de que dos periodistas inteligentes no estaban preparados para contra argumentar las respuestas obvias de Contreras. Nunca debieron aceptar ese papelón.

  • morabas

    Dar en el clavo, eso es exactamente lo que su comentario hace, encontre brutalmente desatinada la entrevista a tan patetico personaje de la dictadura Chilena. Me pregunte por los afectados…, familiares, amigos, etc por este personaje. La verdad que esta bien no olvidar, esta bien conmemorar, pero de ahi a realizar un REALITY, resulta grotesco y no tiene sosten como ejercicio al periodismo. Aca solamente se hizo oda al desatino, al show mediatico por un rating, pero se le hace un flaco favor a la convivencia nacional. Aplausos para usted señor periodista, aun no recuerdo a alguien mas de su profesion que muestren criterio periodistico y compromiso con su profesion.

  • Luca Toderini

    Totalmente de acuerdo con usted, una entrevista innecesaria y absolutamente rupturista que no aporta nada nuevo y que solo llama a dividira la sociedad chilena, entregando de alguna forma una visión totalmente distorsionada de la realidad.