En dramática definición a penales (3-2), después de ganar el partido 3-1, derrotó en Talcahuano al favorito Unión Española ante más de 10000 espectadores.
Una rehabilitadora jornada para el fútbol nacional, constituyó la final del Clausura 2012 que disputaron en el Estadio Cap de Talcahuano, el local Huachipato y Unión Española, ante más de 10.000 espectadores que repletaron el recinto, entre ellos centenares de mujeres, niños y mayores de edad. No hubo detenidos, lanzamiento de petardos ni bengalas. Tampoco líos de las barras.
Asimismo, el comportamiento de los jugadores fue ejemplar.No hubo expulsados ni lesionados y a su término hubo abrazos y felicitaciones entre ellos. Igual comportamiento se constató en el partido de ida jugado en Santa Laura. Los jugadores recibieron las medallas y copas, entregadas por el Presidente de la ANFP, Sergio Jadue, con aplausos y sin pifias.
Fue la “final de los pobres”, entre un representativo de una colonia extranjera y uno de regiones. Un clima distinto cuando juega alguno de los “grandes” en títulos y dinero. Para Huachipato fue el segundo título en su historial. El primero lo había logrado en 1974.
Huachipato fue un ganador sorpresivo. Necesitaba ganar por más de 2 goles de diferencia, porque había perdido en Santa Laura 1-3, o a lo menos igualar la diferencia para definir por penales. Y sorpresivamente, lo logró, pese a que Unión había tenido una mejor campaña en la temporada y con la victoria alcanzaba el séptimo título de su historia e incluso también con un empate. Y al término del primer tiempo parecía que lo conseguía, porque igualaban a un gol. Pero no jugaba mejor. No lograba imponer su clásico toque, dirigido por Vecchio y no mostraba alguna novedad en su accionar, salvo un férreo control del goleador uruguayo de los de la usina, Braian Rodríguez.
El gol de la Unión llegó tras un contragolpe y con un certero pase de Vecchio a Currimulla, a los 30 minutos, quien batió a Veloso con un tiro bajo al segundo palo. El empate llegó por obra de Daniel “Chucky” González, incorporado por el mediocampista Sandoval, para aprovechar sus disparos de tiro libre. Y el empate lo alcanzó el mismo Chucky de tiro libre, con un disparo desde fuera del área, al ángulo superior del arco de Lobos, ayudado por una escasa y mal ubicada barrera roja.
Huachipato cambió en el segundo tiempo. Pellicer fue más atrevido que José Luis Sierra, quien no cambió a nadie demorando la salida de Hernández y sin buscar su clásico toque.
EL DT de Huachipato instruyó para una marca incesante sobre Vecchio, arriesgando en defensa y desapareció el habilitador de pases gol. Además pasó a dominar con anticipos en defensa y avance del mediocampo a la zona de Unión, especialmente los laterales, con un pausado toque hasta encontrar el espacio. Unión cedió 5 corners. El partido se jugó en zona de los rojos.
Y llegó el segundo gol “acerero”. Otra vez González, sin custodia, ahora disparando desde fuera del área al mismo ángulo del arco de Lobos, quien tuvo lenta reacción. Huachipato advirtió que se podía e hizo ingresar a Aceval por Crovetto, para efectuar centros desde la izquierda y sacar ventaja de su fuerte disparo y más tarde a Sandoval para reforzar el mediocampo. El ataque de Unión cesó pese al ingreso de Rubio, quien por lo menos casi aumenta a los 80 a no mediar excelente salida y contención de Veloso.
Cuando ya el resultado daba el título a Unión vino el gol tras un centro de Aceval, a los 88 minutos que falló Scotti al cabecear mal y dejar el balón en el área y Villalobos ganar en velocidad a Currimilla, logrando el 3-1 y decretando la definición a penales.
En los primeros cinco tiros se lucieron los arqueros al detener Lobos los lanzamientos de Villalobos y Aceval , mientras Nery Veloso contenía los disparos de Díaz y del arquero Lobos.
Habían anotado por Unión Vecchio y Rubio y fallado Jaime. En Huachipato anotaron Rodríguez y Cortés en tanto que González lo envió alto.
En la continuación, Veloso atajó el penal efectuado por Leal mientras que Merlo consigue el gol del triunfo y se lesiona al saltar de alegría y caer mal.
La experiencia de Pellicer se notó. No en vano ha sido campeón en Chile con Universidad Católica (2005) y semifinalista ese mismo año con la UC en Copa Sudamericana, ganador con la U de Concepción en Copa Chile y en Venezuela con Atlético Maracaibo.
Lo de Sierra es meritorio, pero le falta todavía mejorar su nivel. En todo caso es auspicioso, que hayan puesto término a los títulos nacionales del último lustro en manos de DT extranjeros.