Igual se perdió, pero 1-2 con el puntero Argentina y dejó esperanzas que de persistir en la idea que implementó anoche le permitiría clasificar a Brasil 2014.
Por fin se notó el trabajo del técnico. Chile ganó muchos puntos -12- en la primera mitad de las clasificatorias, pero nunca gustó, no jugaba a nada. Se imponía la idea del técnico Claudio Borghi, que los más importante era dejar en libertad a los jugadores, que gozaran los partidos.Cuando Chile quedó puntero y parecía un seguro clasificado, vinieron las dudas. Colombia y Ecuador lo pusieron en la tierra. Y el DT ya estaba afuera.
Argentina, el rival de anoche, anunciaba la despedida. El reemplazante ya se veía venir. Se hablaba de fricción entre Borghi y los jugadores y entre éstos en el camarín. También expulsiones, que obligaron a llamar a última hora a 3 juveniles.
Y en la encrucijada, se produjo lo imprevisto, la sorpresa.
La desesperación puso término a la tozudez de Borghi. Chile fue un equipo ordenado, que escasamente perdía sus posiciones. Y si alguno lo hacía había otro que ocupaba su lugar. También fue un equipo que entró decidido a entregar todas sus energías en la cancha, marcando en todos los sectores, poniendo dificultades a los defensas argentinos.
Después de dos minutos iniciales en que Argentina se acercó al área de Pinto, Chile pasó a dominar, Sánchez, Fernández, Beausejour y Medel y hasta el lento Sebastián Pinto y el flojo Mark González marcaban sin cesar.
Durante los quince minutos siguientes Chile anticipaba en defensa con excelentes actuaciones de Marcos González, Isla y Jara coordinados en la marca y con el auxilio de Marcelo Díaz impedían que Messi pudiera llegar al área. Asimismo en la parte más débil del trabajo la coordinación en el ataque tuvo aproximaciones.
Ante un disparo de Medel que el arquero Romero despejó a medias Pinto perdió una propicia oportunidad de anotar. Sánchez era detenido reiteradamente con falta. Díaz causaba peligro disparando de distancia. A los quince minutos otra situación favorable para Chile en un carrerón de Isla hace un centro que conecta de cabeza Beausejour en el otro costado y que salva milagrosamente Romero.
Se veía venir el gol de Chile, cuando un pequeño decaimiento del equipo nacional en la marca a los defensas argentinos, permitió que Marcherano y Gago pudieran accionar con tranquilidad. Fue el momento justo en que aparecieron las habilidades individuales que desequilibraron el partido.
A los dieciocho minutos Gago envía de distancia un pelotazo al área a donde llega con velocidad Messi quien elude la marca de Jara y de González para anotar con su indesmentida calidad el primer gol. No obstante Chile arriesgó y por los costados seguía atacando con Isla y Beausejour, esperando la gran jugada de Alexis que no llegó.
Y vino un segundo contraataque un pelotazo de Marcherano a Higuain a la punta derecha quien avanza con fintas a la izquierda y a la derecha superando primero a Jara y cuando salía González a obstruirlo envía de izquierda al ángulo alto del segundo palo de Pinto. Un golazo de goleador del Real Madrid y de la selección Argentina.
Los minutos restantes del primer tiempo fueron compartidos. Chile manteniendo el orden y la marca. Argentina buscando a Messi e Higuain, luciéndose Pinto al salvar dos goles prácticamente hechos. Sebastián Pinto mientras tanto, vuelve a desperdiciar centro de Beausejour.
¿Qué faltaba para que Chile pudiera descontar y hasta igualar en el segundo tiempo? Debía continuar el trabajo de marcación y cambiar a Sebastián Pinto por alguien que aprovechara los centros y creara más peligro. En la banca estaba Eduardo Vargas y Borghi tuvo un nuevo acierto al hacerlo ingresar por Pinto.
Chile mejoró más al extremo que salió Higuain en el equipo argentino y su reemplazante Guiñazú pasó a la defensa integrando Argentina dos líneas de cuatro defensores. Pero Chile necesitaba algo más para asustar a los argentinos,podía ser Ángelo Henríquez, pero Borghi no lo hizo vestir ni lo dejó en la banca siquiera.
También falló y faltó un trabajo especial para aprovechar centros y tiros libres de los que tuvo más de una media docena disponibles. Alexis luchaba y trataba de hacer el gol sólo sin pasar a los compañeros. Chile dominaba pero no venía el descuento.
Ya estaba en cancha, aunque tardíamente, Felipe Gutiérrez reemplazando a Mark González. Y llegó el descuento para Chile tras un centro de Vargas que Gutiérrez conectó de izquierda abajo batiendo a Romero. Las treinta y cinco mil personas no cesaron de aplaudir y estimular al equipo esperando el empate. Pero ya era tarde, el gol llegó a los noventa y un minutos treinta segundos.
Por fin la afición salió contenta pese a terminar derrotados, convencida de que jugando de esta manera con orden, en todos los sectores y marcación se pueden conseguir mejores resultados, y la ansiada clasificación de Chile puede llegar, siempre que Borghi persista en esto que le dio resultado, que fue la mejor actuación del equipo en este torneo.