Segunda derrota consecutiva de la “U”en partidos importantes, con pobres actuaciones, que la pueden dejar fuera de la final de la copa Libertadores y del torneo nacional.
En Buenos Aires, ante Boca Juniors, quedó claro que el desgaste físico que mostraba la “U” en el último mes era irreversible, Su defensa, base de sus éxitos, era permeable y en ataque le costaba un mundo hacer un gol. Si Boca se lo hubiese propuesto, el 2-0 pudo ser más amplio.
Era hora de reemplazo de quienes tenían casi toda la campaña en el cuerpo.Pero el DT Sampaoli obcecado, creyendo en la ilimitada capacidad física de sus jugadores, insistió en jugar con todo los titulares el crucial partido ante Colo Colo, semifinal de ida del torneo nacional, contrariando incluso la opinión de los médicos del club, que opinaban distinto.
Salvo Lorenzetti, lesionado, jugaron todos, en el partido a puertas semicerradas ya que hubo mujeres e hinchas, en el Estadio Monumental aún cuando pocos, a quienes les estaba vedado ingresar.
Y el resultado fue una nueva derrota, 2-0, que lo deja con poca opción de alcanzar la final y lograr el ansiado tricampeonato. Incluso, también, pudo ser mayor, si Ormeño y Paredes no hubiesen sido expulsados, el primero a los 38 minutos del primer tiempo y el segundo, a los 60 del segundo.
Los goles albos fueron una demostración patética de la condición física.Paredes el más peligroso atacante colocolino avanzó con el balón unos cinco metros sin custodia camino del área azul. Nadie interrumpía su camino y al ver levemente adelantado a Johnny Herrera, disparó con el borde externo de su pié izquierdo superando al guardavallas de la “U”.
En el segundo gol albo, otra vez Paredes, sin custodia, hizo un excelente pase en profundidad a Rabello que superó en carrera a Magalhaes y batió nuevamente a Herrera.
El estado de la cancha y Sampaoli hicieron el resto. El césped, pesado y con pozas hacía dificultoso el traslado del balón y ganar en velocidad. Colo Colo jugó con habilidad.Impidió las entradas o juego por las puntas del campeón.
Contreras, Vilches y Romo ganaban los centro por alto y Ormeño y Fuenzalida por los costados, mientras que los juveniles Caroca y Rabello limpiaban adelante.Además, Colo Colo arriesgó jugando fuerte y le costó dos rojas. Pero su DT Luis Pérez estuvo hábil.
Incluyó a Millar por Olivi para retener el balón y buscar el contragolpe. Más adelante a Vidangossy por Muñoz haciendo lo mismo.
En cambio, La “U””, cometió errores de entrada, haciendo jugar al volante Cereceda de puntero izquierdo, tarea que no cumplió, en vez de jugarse con un puntero como Castro o Gallegos.
Con 10 hombres Colo Colo, al comenzar el segundo tiempo, Sampaoli trasladó al costado izquierdo a Junior Fernandes e incorporó como puntero derecho al zurdo puntero izquierdo Hernández sacando a Magalhaes por el error cometido en el gol. También incorporó al lento Marino por Cereceda, lesionado.
Con todo el campo a su disposición y dos hombres más, la “U” atacó como un toro enfurecido.Todos quienes tenían el balón trataban de ganar la batalla individual y no llegaban al área.
Para peor, del banco no llegaba la instrucción de sacar ventaja de la superioridad numérica, con pases en profundidad y de primera y centros de uno a otro costado.Todos iban a la cabeza o piernas de los defensas albos o centros “bombeados” a las firmes manos del excelente arquero Vega. Hasta en las pichangas de barrios se sabe cómo lograrlo…¡Increíble! La “U” quedó en cero.
Y hace incierto su futuro. Tendrá además, que recuperarse de la gesta que intentará ante Boca. En las condiciones actuales, si no se produce una milagrosa recuperación física y anímica, y anotan en cada partido tres goles, se pronostica difícil en ambos torneos el paso a la respectiva final, poniendo término al sueño azul.Sin embargo, ha conseguido resultados increíbles.Y los hinchas que llenarán el Estadio, confían que lo lograrán.