Sin miedo, sin rabia y con confianza vamos a decir que NO al sistema político, económico y social tal como está.
Los mismos de siempre que, consecuentemente,hemos defendido un Estado garante de derechos, pese a los amarres constitucionales obsoletos que aún sostenemos, vamos a decir que NO al negocio sin límites en la educación, en la salud y en el trabajo.
Ahora somos millones los que, conscientes e informados, queremos que lo que no funciona en nuestro país, funcione bien, sabemos hacia dónde y cómo deberíamos hacer las reformas que contribuyan a encontrarnos con la libertad, la igualdad y la solidaridad que hemos perdido.
La Gran Bestia son las malas prácticas políticas, las malas artes utilizadas en la campaña electoral.No me cabe duda que la Gran Bestia quedará reducida a su mínima expresión, porque es justo y necesario.
Los que no quieren sintonizar con los cambios sociales que nuestra cultura demanda, los que mienten y mienten porque algo queda, los resentidos y odiosos, los que ‘atornillan al revés’ de los tiempos son los que están viviendo los estertores de la Gran Bestia.
Vamos a decir que NO a las ilusiones que se construyen sólo para las elecciones y que, en el día a día, no se suman al esfuerzo de todos.Vamos a decir que NO a los que son ciegos y sordos al llamado de las mayorías y restan fuerza al presentar alternativas que contienen el mismo significado de cambio que el programa de Michelle Bachelet.
Estas elecciones son muy importantes, se juega la posibilidad de “hincarle el diente” a las reformas que cambiarán la cara de Chile, vamos por ello.
Los estertores de la Gran Bestia tienen fecha de vencimiento: el 17 de noviembre.
Esperamos que todos lo expresemos con fuerza y unidad el domingo, es nuestra oportunidad para terminar con campañas basadas en la agresividad, violencia y resentimiento que se han convertido en los estertores de la Gran Bestia al mostrar los antivalores humanos en una campaña que ha superado los niveles de mediocridad política, utilizando el temor y la inseguridad además de tergiversar los propósitos de la propuesta de la Nueva Mayoría para Chile.