En emotivo encuentro, Chile venció a los campeones de América, Uruguay, por 2-0 e hizo renacer esperanzas de llegar a Brasil 2014. Con el clásico esquema que le dio éxitos con la “U”, superó a los cuartos del mundo.
La afición se lo perdió. No pudo gozar de la alegría de anoche, de ver a la selección jugando bien, a ratos excelente, con un padrón de juego claro y defender a muerte la ventaja, tirándose al suelo, despejando como fuere y agotando sus energías, frente al campeón de América y cuarto en el último mundial, ante la algarabía, aplausos, miles de globos blancos azules y rojos y hasta contrabandeadas bengalas de las pocas más de 30 mil personas que llegaron al Estadio Nacional.
El público se desilusionó con la derrota en Lima, del viernes pasado, no obstante haber jugado bien un tiempo. Esperaba una victoria, incluso una goleada en Perú, para olvidar las caídas consecutivas del equipo dirigido por Borghi , olvidándose que se jugaba de visita, con 35 mil fanáticos peruanos alentando a su equipo, queriendo adelantar el fallo de La Haya.
En el primer tiempo contra los peruanos, pareció que el esquema que le dio éxito a Sampaoli, de una fuerte marcación, inclusive desde el fondo rival, quitando la pelota antes de mitad de cancha, para llegar rápido por las puntas, con toques de primera, sin entrar a los “encontronazos” era capaz de concretarlo la selección, pese al poco tiempo de trabajo.
Estimulado por los elogios del público y de la prensa, de ir siempre al ataque, hizo cambios en ofensiva y descuidó la defensa en el segundo tiempo. Justo lo que necesitaba Perú para aquietarse, equilibrar y pasar a dominar y alcanzar el gol del triunfo.
La lección la sintió Sampaoli y tomó precauciones frente a Uruguay, un rival al que pocas veces se le había ganado en estas instancias. El esquema defensivo con Jara como líbero, de sorprendente y muy buena actuación y a sus costados Pepe Rojas y Gary Medel fue vital para detener a Suárez y Cavani, goleadores en Inglaterra e Italia e inquietar a Nuslera, Lugano y compañía en defensa, impidiendo que salieran tranquilos.
Asimismo, Mena y Beausejour por la izquierda y Vargas con Isla por la derecha, con aporte permanente de Paredes, Díaz y Aránguiz crearon problemas desde el inicio, tocando de primera, para evitar la disputa del balón, donde los uruguayos son expertos, dando manotazos, empujones y tirándose al suelo, simulando ser víctimas y no victimarios.
A la cuarta incursión por la izquierda, a los 10 minutos, Paredes profundiza a Beausejour, quien devuelve centro al área chica que esperaba el ex albo para anticipar al arquero y zagueros y con excelente taco anotar el gol inicial. Uruguay, dedicado hasta ese instante a defenderse y despejar y buscar los centros y tiros libres, como fórmula de ataque y golpes aleves de Suárez a Jara, buscando tarjeta roja ante la respuesta de éste, que afortunadamente no respondió, pasó a jugar a ras de piso y con habilidad. Bravo pasó susto, pero no se vio obligado a salvadas extremas.
Con equilibrio en el dominio de las acciones se jugó más de la mitad del segundo tiempo. Forlán ingresó para apoyar a Cavani y Suárez. Los tiros de las esquinas y centros uruguayos eran cada vez más peligrosos. Con un tiro desde los 30 metros de Silva, que dio en el horizontal, un lanzamiento con comba de Forlán y arranques de Suárez, abucheado por los hinchas por su inconducta, se veía llegar el empate.
Hubo un centro en que Bravo salió mal y Medel salvó desde la raya y que los uruguayos reclamaron penal al topar el balón casualmente en una mano de Jara, que el árbitro no advirtió.
Matías Fernández, ingresado por Aránguiz, y todavía sin buen estado físico, buscó jugar de primera y usar a Vargas y Paredes. Un pase de Fernández a Isla, obligó a la salida al filo del área grande a Muslera, quien evitó el gol despejando el balón, por donde apareció Vargas, para lograr la segunda conquista y asegurar el triunfo.
Uruguay siguió luchando, ya sin convicción, y sin asustar a Bravo, en tanto Sampaoli buscó asegurar la victoria, haciendo ingresar a Carmona por Beausejour y Marcos González por Isla.
Chile pudo anotar un tercer gol, cuando a los 82 minutos un pase de Díaz deja solo a Paredes, a quien se le adelanta el balón y permite el despeje de Muslera.
Chile quedó cuarto en la tabla de posiciones, que encabeza Argentina con 24 puntos, seguido de Ecuador con 20, Colombia con 19 y a continuación Venezuela y Chile con 15 puntos cada uno.Más atrás Uruguay con 12 y Perú con 11.
La opción de Chile de llegar a Brasil 2014 es esperanzadora ya que le quedan tres partidos en el Estadio Nacional (con Bolivia, Venezuela y Ecuador) y dos de visita con Paraguay y Colombia.
Depende su clasificación en gran medida de que Sampaoli siga haciendo jugar al equipo como anoche, basado en su sistema defensivo y con dos atacantes rápidos y de buen finiquito, que los tiene, para ratificar esa opción.