Para los que –afortunadamente– no somos economistas, cuando nos enteramos hace meses que junto al Mediterráneo la arcas fiscales no andaban bien, de inmediato nos invadió la idea que nuestra próspera economía se iba a contagiar.
El temor se parecía a las epidemias de influenza que, sea porcina, aviaria o española, iba a asomarse y entraría por Pudahuel.
Nada de eso ha ocurrido hasta la semana pasada. Por tradición hispánica nos dio a pensar que los bancos e inversoras españolas en Chile iban a remitir dólares a la Madre Patria en containers sin wiki-leaks ni Bri-Ciber. Por su peso, bruto o neto, a tara fija.
Tampoco sucedió. Algo mucho más generoso ocurrió: nos anuncian inversiones con un aumento de capital.
En este mundo cualquier evento económico o actividad especial que aparentemente excede a lo que es una tarea útil y corriente exige una explicación.
La sospecha está cuando creemos que en tal evento hay algo de lo que no nos damos cuenta, que no estamos ni ahí, que es algo desconocido y esto nos impulsa a investigar.
Es cierto que puede haber eventos inesperados o casualidades, alguna inversión sin costo para nosotros, pero los economistas nos han enseñado que nada es gratis. Por lo tanto, lo más probable es que alguien se está beneficiando con el evento al que aludimos. Para cazar al beneficiario, a ese alguien que suele ser difícil de pillar, hay que tender la malla para saber si hay engaño o algún ardid del que alguien se vale para atraernos.
En el mundo actual y en Chile hay una fuerza grande y misteriosa que determina la fortuna de millones de personas. Se llama el mercado de valores. Hay personas que dicen tener conocimientos especiales para utilizar esta fuerza. Se llaman analistas bursátiles.
Por otro lado en nuestro país está la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) con el ojo puesto en generosas ofertas de inversión con un cambalache o trueque hecho con afán de ganancia. ¿Será cosa de puro ponerse nomás?
El jefe del SVS tiene uno de los más poderosos , ni hablar de los mejor remunerados, puestos de la economía nacional y es responsable del control y enlace de inversiones en nuestro país. No es responsable de los desembolsos pero conoce la carga impositiva de empresas y grandes organizaciones foráneas que invierten acá. Él lidera hoy la investigación del aporte de capital citado.
El papel de este importante asesor económico en el gobierno es flexible, aunque se menciona expresamente en la legislación, en gran medida su trabajo vale por lo que hace.Eso constituirá su perfil público .
Todos esperamos también que en el ítem energía, la SVS pueda intervenir en la llamada carretera eléctrica, rechazando torres y expropiaciones y mejor considere el cable submarino a lo largo del país, con enlaces ortogonales a cada región.